Earl Lloyd, pionero de la integración racial en la NBA
Muere a los 86 años el primer jugador negro que pisó una cancha de la NBA
Ha muerto a los 86 años Earl Lloyd, ex jugador de los Washington Capitals, Syracuse Nationals y Detroit Pistons. A muchos, apenas les sonará su nombre, pues no fue nunca una estrella de la NBA, pero si por algo se le recuerda y recordará, será por haber sido un pionero en la liga.
Lloyd fue el primer jugador negro que disputó un partido en la NBA, esa liga dominada ahora por jugadores de su mismo color. Lo hizo en 1950, poco antes de que otros pioneros como Nat ‘Sweetwater’ Clifton y Chuck Cooper también lo hicieran.
Para poner ese logro en contexto hay que recordar que los Estados Unidos de aquellos años eran muy diferentes a los actuales, cargados aún en buena parte de su territorio de un profundo racismo que condenaba a aquellos cuya tez no era blanca a la exclusión no solo social y económica, sino también legal.
En aquellos años, los jugadores negros tenían vedado el acceso a las grandes ligas del deporte profesional, reservadas a los blancos, y el gran talento de muchos de ellos sólo podía mostrarse en las Negro Leagues del béisbol y competiciones segregadas similares de otros deportes.
Una vida marcada por la segregación
Lloyd había nacido en 1928 en Alexandria, Virginia, en el corazón del viejo Sur esclavista y creció en ese ambiente de segregación racial, donde negros y blancos vivían en dos mundos separados, mucho más pobre el de los primeros, obligados siempre a ocupar un escalón socioeconómico inferior.
En su instituto, sólo para negros, no había pistas deportivas sobre las que practicar y, como él mismo recordaba no hace mucho, no tuvo un solo compañero de clase blanco en todo su ciclo educativo, desde el jardín de infancia hasta que se graduó en West Virginia State, una universidad también sólo para negros.
La lucha para cambiar todo eso no fue fácil y estuvo llena de obstáculos. Pero Lloyd fue uno de los muchos que puso su grano de arena para lograrlo.
Lo hizo, con poco eco mediático en aquel entonces, poniendo sus pies sobre una cancha de la entonces incipiente NBA, donde ningún otro jugador negro lo había hecho antes y donde, afortunadamente, han sido muchos los que lo han hecho después. Lo hizo siguiendo el camino que, con mucho rechazo y dificultades, Jackie Robinson había abierto pocos años antes en el béisbol.
El sueldo de Lloyd en aquella primera temporada fue de 4.500 dólares, un salario medio para una liga cuyos jugadores, en su mayoría, solían tener por aquel entonces que complementar sus ingresos con algún trabajo fuera de temporada.
Lloyd jugó 9 temporadas en la NBA, hasta su retirada en 1960, y disputó un total de 560 partidos, en los que promedió 8,9 puntos y 4,7 rebotes y ganó un anillo de campeón con los Nationals en 1955, en un equipo liderado por Dolph Schayes. También entrenó a los Detroit Pistons durante un breve periodo entre 1971 y 1972. En 2003, ingresó en el Salón de la Fama por su contribución al baloncesto.