Los Warriors quieren usar sus excepciones de traspaso para reforzar su banquillo
Al suplente Harrison Barnes le salen bastantes pretendientes de cara a un posible intercambio
Golden State Warriors va a intentar reforzar su segunda unidad antes de que el 20 de febrero se acabe el plazo para efectuar traspasos. El bajo rendimiento ofensivo de la suplencia del equipo hace que en sus despachos se fije como objetivo prioritario el reforzamiento del banquillo.
Eso es lo que dice USA Today, que tiene como fuente a una persona conocedora de la situación del equipo de Oakland.
Actualmente, la segunda unidad de Golden State produce 24,1 puntos por partido, la segunda cifra más baja de los 30 equipos de la NBA.
La idea sería lograr algún jugador sin tener que desprenderse de ninguno. Y eso lo podría conseguir Golden State a través de las excepciones de traspaso (trade exceptions) que tiene. El conjunto californiano tiene dos excepciones por valor de 9 y 4 millones de dólares que expirarán el próximo verano y otras dos de índole menor, de unos 780.000 dólares cada una, que caducan el 17 de febrero.
Eso sí, para lograr un traspaso Golden State requeriría de la intervención de un tercer equipo. Tendría que ser un traspaso a 3 bandas, según explica la publicación estadounidense.
Interés por Harrison Barnes
Los últimos rumores en torno al equipo que dirige Mark Jackson aseguran que los únicos 2 jugadores que los Warriors consideran ahora mismo intransferibles son Stephen Curry y Andrew Bogut, aunque el resto de los integrantes de la plantilla tendrían grados muy diferentes en cuanto a su posibilidad de salir del equipo.
Esos rumores han disparado el interés por el jugador de segundo año Harrison Barnes. Y es que parece que al alero de Golden State le están saliendo un buen número de pretendientes.
De todos modos, no está nada claro que el equipo quiera desprenderse de un jugador que tiene un notable potencial.