Blazers gana con 44 de Aldridge y Gasol mete 22 puntos en la derrota de Lakers

LaMarcus Aldridge se marcó en la escueta jornada del jueves una actuación estratosférica para dar la victoria a Portland sobre Denver. El jugador texano de los Blazers finalizó el encuentro con 44 puntos, 13 rebotes y 5 asistencias y además metió los últimos 15 puntos de su equipo para rubricar una costosa victoria.

Tampoco le fue fácil a Miami doblegar a unos Lakers que siguen arrastrando su plaga de lesiones. Otra vez sin Dwyane Wade, los Heat tiraron del poderío de Chris Bosh y LeBron James, que fueron los mejores durante el encuentro y decidieron al final. En Lakers, otras gran actuación de este Pau Gasol 2014 que parece una versión claramente mejorada de la de 2013. En Florida, el español firmó 22 puntos y 11 rebotes en la derrota.

Miami 109 L.A. Lakers 102

Duelo de indudable interés venido a menos por la plaga de lesiones de Lakers y lógica victoria local, aunque no tan sencilla como se esperaba a priori. Con Miami Heat sin Wade por quinto partido consecutivo, el equipo de Florida se basó más que nunca en sus otras dos grandes estrellas, un Chris Bosh imparable en el tiro de 4 metros, que finalizó con 31 puntos y un 15 de 22 en el lanzamiento de campo (5 de 5 en el cuarto final), y un LeBron James muy completo que no paró hasta ver el partido en sus manos, y que sumó 27 tantos, 13 rebotes, 6 asistencias y un 60% en el tiro de campo.

Ellos dos fueron los verdaderos artífices del triunfo, ya que tomaron la manija también al final, en el momento de la verdad. Porque un triple de Jodie Meeks había puesto a los Lakers a tiro de piedra, con un 103-99 en contra a menos de 3 minutos del final. Entonces, surgieron LeBron y Bosh. El alero se marcó un triple muy importante y, luego, el ala-pívot logró un tiro a media distancia prácticamente definitivo cuando restaban 54 segundos. Fue un final alargado por un par de revisiones de vídeo pero en el que Lakers no tuvo opciones reales a pesar de andar cerca en el marcador.

Miami se tomó a veces las cosas con demasiada calma. Tras llegar al descanso con un 57-46 al favor, se puso 15 puntos arriba (75-60) al inicio del tercer cuarto. Parecía que el partido se rompía, pero Mike D'Antoni solicitó un tiempo muerto y la situación pareció aplacarse. Tanto se aplacó, que Lakers llegó vivo hasta la recta final del partido.

Llegó vivo gracias a otro gran encuentro de Pau Gasol en ataque y en el rebote, que no en defensa, capítulo éste en el que tanto él como sus compañeros siguen sin apretar de verdad. El español lleva un enero magistral. Anoche, 22 puntos, 11 rebotes, 4 asistencias, 3 robos y un 60% en el tiro. Junto a él, los 22 de Jodie Meeks tras enchufarse 4 triples y la mejora de Nick Young según avanzaba el encuentro para acabar con 19. Bien Jordan Hill y 11 asistencias de Kendall Marshall. Eso sí, estos Lakers ya acumulan 14 derrotas en sus últimos 17 partidos.

Miami es otra cosa. No está maravillando, tiene baches, pero a su ritmo, por ahora, ya le vale. Lleva ya un 18-3 en casa y ante Lakers anotó un 57,7% en el tiro de campo. Además de Bosh y James, ayudaron Norris Cole y Mario Chalmers, mejoró Michael Beasley y Greg Oden se fue hasta los 10 minutos para 5 puntos y 5 rebotes.

Portland 110 Denver 105

Los Blazers demostraron anoche ante Denver que no solo son un equipo dotado de un furibundo ataque y francotiradores desde el triple, sino que también saben ganar defendiendo y buscando la pintura en una mala noche desde la larga distancia.

Denver lo sufrió en sus carnes tras irse al descanso con un favorable 59-67. Porque la segunda parte fue otra cosa. Se les atascó la ofensiva y terminaron con 14 puntos en el cuarto decisivo. 

Pero lo que de verdad sufrieron en sus carnes los Nuggets fue a LaMarcus Aldridge, que acabó el partido entre gritos de "MVP, MVP". No era para menos. Porque su partido ante Denver fue simplemente increíble: 44 puntos, 13 rebotes, 5 asistencias y autor de los últimos 15 tantos de su equipo para firmar el triunfo. Colosal.

Aldridge fue una máquina de hacer baloncesto. Y su rúbrica fue fantástica. Una canasta de Randy Foye a 60 segundos justos del final había adelantado a Denver 104-105. De ahí al final, parcial de 6-0 con Aldridge anotando sin fallo 6 tiros libres. Con 108-105, Foye tuvo un triple para empatar a 17 segundos del final, pero no entró, como tampoco lo hizo el posterior lanzamiento de 2 de Wilson Chandler. Ahí se esfumaron las opciones del equipo de Brian Shaw.

Además del portentoso Aldridge, Portland (32-11 con 17-4 en el Moda Center) tuvo a Wesley Matthews en 24 puntos y Nico Batum completo pero poco anotador. El equipo aguantó el tipo pese al partido en tono menor de Damian Lillard y su discretísima noche colectiva desde el triple.

Denver, como casi siempre, tiró de grupo. Hasta 6 jugadores en 10 o más puntos con Chandler en 18 y Ty Lawson en 13 con 11 asistencias.