Oklahoma arrolla a Houston y Miami claudica ante Bucks en el último cuarto

Desigual resultado para Thunder y Heat en la jornada de anoche. Los primeros pasaron por encima de los Rockets en su visita a Houston, mientras que los segundos sumaron su segunda derrota consecutiva tras hundirse en el cuarto final. Los Blazers de Víctor Claver, también ganaron.

Y esta vez sí que se puede hablar con toda propiedad de los Blazers de Claver porque el valenciano fue parte importante del equipo. Salió de titular, estuvo casi 26 minutos en pista y cerró la noche con 8 puntos, su mejor anotación en la NBA, y celebrando con los suyos una trabajada victoria ante los Sixers, en los que Jrue Holiday rozó el triple doble.

En Houston, donde no estuvo Carlos Delfino, Kevin Durant y Russell Westbrook lideraron una ofensiva imparable en la que también destacó el ex Rocket Kevin Martin. Por su parte, Brandon Jennings fue el máximo anotador de unos Bucks en los que muchos jugadores aportaron y que superaron a unos Heat apagados, y definitivamente fundidos en el final del partido, en los que Dwyane Wade y LeBron James encontraron pocos apoyos.

Portland 89 Philadelphia 85

Los Blazers ganaron con apuros a los Sixers en un partido muy igualado que no se decidió hasta el último minuto. Tras haber reducido a 3 su desventaja, Spencer Hawes tuvo la oportunidad de empatar a 27 segundos del final, pero su triple no entró y a Portland le bastó que Nico Batum anotara a continuación 2 tiros libres para sellar la victoria.

La buena noticia fue ver a Víctor Claver realizar su mejor partido en el tiempo que lleva en la NBA. Volvió a ser titular, pero esta vez arrancó con fuerza y acierto y sumó 7 puntos en el primer cuarto. Ese buen arranque le valió la confianza de Terry Stotts durante el resto de la noche. Claver completó casi 26 minutos en pista y sumó finalmente 8 puntos, su mejor anotación NBA, y 3 rebotes.

Batum y Damian Lillard, 22 y 20 puntos, fueron los máximos anotadores de Portland pero, mientras el primero sumaba 8 asistencias y 7 rebotes, Lillard volvió a mostrar que, aun siendo el base del equipo, hay días en los que contribuye con poco más que mirar a la canasta contraria y terminó con un 0 en asistencias y rebotes. J.J. Hickson sumó un nuevo doble doble (16 puntos y 13 rebotes). En los Sixers, Jrue Holiday fue con diferencia el mejor y flirteó con el triple doble para terminar con 29 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias de la noche.

El susto de la noche lo dio el prometedor pívot novato de los Blazers Meyers Leonard, cuya rodilla derecha se dobló de muy mala manera. Habrá  que esperar al resultado de las pruebas médicas, pero por un instante los aficionados de Portland no pudieron evitar que por su cabeza desfilaran los nombres de Bill Walton, Sam Bowie, Greg Oden…

Oklahoma City arrolla a Houston con una ofensiva demoledora

Como un vendaval pasaron los Thunder por el Toyota Center de Houston (94-124). Los de Oklahoma anotaron 68 puntos en la primera mitad y sentenciaron el encuentro con 2 tremendos parciales en los finales del primer y segundo cuarto (12-2 y 16-0) respectivamente. Poco les importó extraviar 21 balones, porque su rival estuvo aún peor en ese aspecto, desperdiciando 24 posesiones.

Los Rockets contuvieron bien a Kevin Durant en el inicio del encuentro, pero el alero despertó justo antes del descanso para anotar 7 de los 16 puntos del parcial que sentenció el encuentro prematuramente. Terminó con 26 puntos anotados, aunque el máximo anotador del equipo fue Russell Westbrook que sumó 28 a los que añadió 8 puntos y otros tantos rebotes.

Oklahoma dominó el rebote, pero no necesitó que sus interiores aportaran demasiado en la ofensiva, Serge Ibaka se quedó en 9 puntos, siendo los hombres exteriores los que llevaron el peso de la ofensiva. A destacar el papel de Kevin Martin, autor de 5 triples para 19 puntos, en su regreso a Houston.

No tuvo igual suerte James Harden ante su ex equipo. Fue quien más anotó en los Rockets, 25 puntos, pero con una serie discreta de 6 de 17. Marcus Morris hizo 24 y Carlos Delfino estuvo ausente por segundo partido consecutivo debido a los efectos de una intoxicación alimentaria.

Nuevo varapalo para Miami

Los Heat parecen estar pasando por uno de esos malos momentos de juego que resulta inevitable hasta para los mejores equipos en una temporada tan larga como la de la NBA. Anoche, su visita a Milwaukee se saldó con una clara derrota (104-85), como lo había hecho su compromiso de la noche anterior en Detroit.

Dos derrotas inesperadas, la primera por la teórica debilidad del rival y la segunda, por su contundencia. Los Bucks están realizando una gran temporada, pero pocos hubieran apostado por una victoria tan holgada, liderada por los 25 puntos de Brandon Jennings y los 19 de Luc Mbah a Moute y a la que contribuyó también la buena labor de hombres como Mike Dunleavy, 18 puntos, Monta Ellis, que recuperó 5 balones y dio 9 asistencias, o Larry Sanders, que pusó 4 tapones además de hacer dobles figuras en puntos y rebotes.

El caso es que llegado el final del tercer cuarto, el desenlace apuntaba ser otro. Los Heat iban por delante (69-71) y parecían poder rematar el encuentro en los últimos 12 minutos tras haber endosado a sus rivales un parcial de 13-27 en ese tercer periodo que podría haber sido mayor si los locales no hubiesen reaccionado con un parcial de 7-0 en los últimos minutos del cuarto.

Pero ocurrió todo lo contrario. La disposición de ambos equipos cambió como de la noche al día y del 13-27 se pasó al aplastante 35-14 con el que los Bucks cerraron el encuentro. LeBron James, 26 puntos, y Dwyane Wade, 24, estuvieron muy sólos en la ofensiva de los Heat. Chris Bosh hizo sólo 12, con malos porcentajes, y del resto, no hubo nadie capaz de superar los 5 tantos anotados.

Además, a los Heat les faltó intensidad defensiva y parecieron faltarles piernas en el final del encuentro, acusando el partido jugado la noche anterior. Perdieron 21 balones y sólo fueron capaces de robar 3 a sus rivales. Un dato esclarecedor.