Bryant y Meeks evitan otro desastre de los Lakers, que ganan en Washington

Los Lakers ganaron en Washington. Lo hicieron sin ningún glamour. De una forma más bien chabacana. Kobe Bryant, a pesar de su horrible noche en el tiro, y Jodie Meeks aseguraron que su equipo no sufriera una nueva humillación, que pudo llegar de la mano de los suplentes locales.

Mientras, Oklahoma City se pegó un susto inesperado a última hora. Ganaba por 24 puntos a Sacramento en el último cuarto cuando Scott Brooks retiró a los suplentes. Con lo que nadie contaba era con la exhibición del visitante Isaiah Thomas (¡26 puntos en 16 minutos!). Remontada brutal y Brooks que tuvo que dar marcha atrás y volver a colocar a los titulares en cancha a falta de 4 minutos.

Mientras, en Florida, Orlando doblegó con juego coral a los Warriors, que han iniciado el campeonato a un nivel excepcional. El juego colectivo pudo con la calidad individual de Stephen Curry y David Lee, que estuvieron demasiado solos.

Victoria en la capital

"Spanish Night" en Washington, pero sin jugadores hispanos, ausentes Trevor Ariza y Pau Gasol por lesión. Los Lakers se impusieron a los Wizards en Washington por 96-102 en un partido en el que los angelinos no recuperaron brillo, pero al menos sí la senda del triunfo. Estos Lakers sólo levantan cabeza parcialmente ante los equipos más frágiles, léase Hornets o Wizards. Sus últimas victorias sólo han llegado así.

Volvió a suceder anoche. Triunfo ante un equipo, Washington, que ha ganado 3 de los 20 partidos que ha jugado. Triunfo cimentado en un buen tercer cuarto en el que los visitantes defendieron, y eso es noticia, para alcanzar el final del cuarto 14 arriba (69-83). Ese final del tercer acto junto al comienzo del último nos dejó la explosión de Jodie Meeks, quen con 10 puntos consecutivos llevó la ventaja angelina hasta un 72-88. Y cuando todo parecía felicidad en los Lakers, vino otra vez el señor del mazo y devolvió a los californianos a su absurda realidad.

A partir de ese 72-88, parcial de 17-4 para Washington, que se puso a 3 a falta de 5 minutos para el final (89-92). Esta vez, al menos, los Lakers supieron salir del atolladero, que no es poco.

Kobe Bryant (30 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias) lideró a los suyos a pesar de su lamentable partido en el tiro (9 de 29 con 1 de 8 triples) y Jodie Meeks volvió a demostrar que es de lo más positivo que le está pasando a los Lakers en esta temporada. Hizo Meeks 24 puntos con 4 triples. Dwight Howard sumó 12 puntos, 14 rebotes y 4 tapones, pero no tuvo el protagonismo necesario en la ofensiva. El resto, poco o nada. Metta World Peace falló los 6 triples que intentó, Antawn Jamison, llamado a hacer grandes gestas, jugó 6 minutos...

Como viene siendo habitual, los Lakers hicieron internacionales a jugadores de segunda fila como Cartier Martin o Kevin Seraphin. Entre estos 2 y Nene Hilario (los 3 son suplentes) ¡sumaron 54 puntos y 24 rebotes!. Ahí es nada. Cartier Martin hizo 21 puntos, 8 rebotes y 5 triples; Seraphin se fue a 16 con 8 rebotes; y Nene Hilario, que sigue mejorando, hizo muchísimo daño a los Lakers con sus 17 tantos y 8 rebotes en sólo 22 minutos. Martell Webster fue el único titular que estuvo en su sitio en un equipo local al que le pesaron sus 19 pérdidas de balón.

Oklahoma City 113 Sacramento 103

Resultado completamente engañoso en Oklahoma. Los Thunder, que sumaron anoche su décima victoria consecutiva, estaban teniendo una noche de lo más tranquila. Se habían ido al descanso con un esclarecedor 61-42 y ya en el último cuarto dominaban por 24. Entonces, Brooks decidió dar descanso a sus estrellas. Con lo que no contaba era con la explosión de Isaiah Thomas, que en los últimos 13 minutos y medio del partido anotó 26 puntos. Y la diferencia bajó de +24 a +5, por lo que Brooks tuvo que devolver a sus titulares a pista con 4 minutos por jugar para que resolvieran. Y lo hicieron, claro.

Estos Thunder, salvo extraños contratiempos como el de anoche, viven en un universon apacible, donde la hostilidad no tiene cabida. Viven en un hogar donde todo se hace más llevadero. Y poco a poco suman. Por ahora, ya están en un 19-4 que les permite permanecer en los más alto del Oeste.

Ante los Kings, más de lo mismo. Un Kevin Durant que casi no falló tiros. El jugador perfecto: 31 puntos y 4 robos con excelentes porcentajes de tiro. Serge Ibaka sumó 18 puntos y 11 rebotes y Kevin Martin otros 18 tantos. Buena prueba de que este equipo funciona es que sus jugadores se permiten lujos que antes no se permitían, como por ejemplo los 15 puntos de Thabo Sefolosha o las 13 asistencias de Russell Westbrook, que parece haber cambiado de chip. El equipo metió todos sus tiros libres: ¡22 de 22!.

Sacramento, que sólo ha ganado un partido fuera de su cancha, luchó hasta el final. Lo hizo gracias a esa portentosa actuación de Thomas, pero también gracias a los 21 puntos de Tyreke Evans. El dominicano Francisco García terminó con 2 puntos y 2 robos en 13 minutos tras fallar 5 de sus 6 tiros a canasta.

Orlando 99 Golden State 85

Sorpresa en Florida. Y es que en el Amway de Orlando los Magic doblegaron con cierta facilidad a uno de los equipos revelaciones de la temporada, Golden State Warriors.

Se puede decir que, en este caso, pudo el juego grupal local con la calidad individual de los visitantes Stephen Curry (25 puntos) y David Lee (24 con 15 rebotes) que estuvieron muy poco acompañados.

Orlando llegó al ecuador con un cómodo 51-35 y nunca pasó apuros. Bueno su trabajo defensivo, que dejó a Warriors en un 37% en el tiro y muy alejado de su rendimiento habitual en anotación.

En ese buen trabajo defensivo, hay que incluir la intimidación local (11 tapones). En ataque, mientras, muy buena la labor de la segunda unidad con J.J.Redick en 16 puntos (12 desde el triple), el novato Andrew Nicholson en 15 tantos, 9 rebotes y 4 tapones y el también novato E'Twaun Moore en otros 15 puntos. Doble doble con 11 asistencias de Jameer Nelson y excelente en los tableros Nikola Vucevic -12 puntos y 17 rebotes-. El boricua Moe Harkless hizo buenos minutos, cosa poco común en los últimos partidos, y el mexicano Gustavo Ayón apenas disputó 5 minutos.