Un triple sobre la bocina de Mo Williams arruina la exhibición de Tim Duncan

Tim Duncan hizo un partido monstruoso, como en sus mejores tiempos. Sumó 22 puntos, 21 rebotes y 6 tapones, pero los Spurs perdieron tras encajar un 14-3 en la parte final del encuentro ante Utah. Mo Williams, con un triple sobre la bocina, decidió el encuentro.

Además, Minnesota ganó a Denver pese al horrendo partido de Kevin Love. Nikola Pekovic, Andrei Kirilenko y un gran José Juan Barea lideraron el triunfo. El de Mayagüez lo bordó: 17 puntos, 8 asistencias y 5 rebotes en 27 minutos. Además, el base boricua anotó 2 libres decisivos en los segundos finales. Todo ello ante la inminente vuelta de Ricky Rubio.

La felicidad, mientras, se ha instalado en el lado teóricamente pobre de L.A, en los Clippers. El equipo angelino ganó en Charlotte para lograr su 8 triunfo consecutivo, algo que no lograba desde la temporada 1991-1992.

Utah 99 San Antonio 96

Se enfrentaban uno de los mejores equipos locales contra el mejor equipo visitante. Y el partido llegó vivo hasta la bocina final de forma inesperada visto el desarrollo del último cuarto.

Porque Spurs se había puesto 85-93 con un triple de Boris Diaw. Apenas quedaban 4 minutos. La típica distancia insuficiente para la mayoría de escuadras, pero no para San Antonio, que suele administrar con mimo y maestría este tipo de diferencias. Pero esta vez no fue así. El fortín mormón fue una olla a presión. Estalló el EnergySolutions Arena con un final espectacular de los suyos. Parcial de 14-3 y triunfo para los Jazz, que acumulan 9 victorias en los 10 partidos que han jugado ante su afición.

Una canasta de Paul Millsap empató el encuentro a 96 con 39 segundos por jugar. Y nada se decidió hasta el último aliento. En esa definición tuvo mucho que ver la extrema confianza en sí mismo de Mo Williams. El base local no había hecho un buen partido y con empate a 96 había errado un triple. Sin embargo, asumió la responsabilidad de volvérsela a jugar y encestó un triplazo sobre la bocina bajo la marca de Danny Green.

Los Jazz ya habían dado un toque de atención a los Spurs en el segundo cuarto (31-16). Esta vez nada iba a ser fácil para San Antonio, que vio cómo se cortaba su buena racha de resultados y cómo no alcanzaba los 100 puntos cuando venía de anotar 132 y 134.

Utah corrió la cancha, como ya hiciera con los Lakers. Anotaron los locales hasta 29 puntos al contraataque a la par que hacían daño con sus hombres grandes. Paul Millsap se fue a 24 puntos, 12 rebotes y 5 asistencias y Al Jefferson sumó 21 tantos. Además, Gordon Hayward añadió partiendo como sexto hombre 19 puntos, 7 rebotes, 6 asistencias y 4 triples.

Ese triple final de Williams arruinó una actuación memorable de Tim Duncan. Porque vimos a un Duncan mayúsculo, autor de una heroicidad impropia de su edad. Acabó con 22 puntos, 21 rebotes y 6 tapones, como en sus tiempos jóvenes. Junto a él, Tony Parker logró 22 tantos y 7 asistencias. Pero no estuvieron esta vez demasiado acompañados Parker y Duncan. Gary Neal no estuvo a la altura y sólo Tiago Splitter rindió a un aceptable nivel. Manu Ginóbili acabó con 8 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias, una de ellas de auténtica fantasía. Pero no estuvo al nivel de sus mejores noches.

Minnesota 108 Denver 105

No regresó Ricky Rubio, como ya se había avanzado antes del partido, pero el base catalán está a las puertas de su vuelta, que podría llegar este fin de semana. Mientras reaparece, su equipo sigue cumpliendo objetivos. Anoche, ganó a Denver para situar su balance en un muy positivo 10-9. Y eso que Kevin Love vivió una noche negra al terminar con un 3 de 17 en el tiro.

Poco importó. Porque Nikola Pekovic (22 puntos y 11 rebotes), Andrei Kirilenko (18 con 4 robos) y un gran José Juan Barea le dieron el relevo. El puertorriqueño acabó con 17 puntos, 8 asistencias, 5 rebotes y 2 robos en 27 minutos. Partidazo el suyo. Luke Ridnour también lo hizo bien y Love, al menos, aportó 14 rebotes.

El partido anduvo tremendamente equilibrado en el Target Center y los locales se impusieron pese a sumar un 2 de 14 en el triple y recibir 62 puntos en canastas logradas cerca del aro. Sufrieron los locales en la recta final. Y eso que llevaban 14 puntos de ventaja en el último cuarto. Los Nuggets trabajaron bien en esos últimos minutos y Corey Brewer apretó el marcador (103-100) a 38 segundos del final. Entonces, llegó una canasta bendita de Kirilenko y 2 tiros libres ganadores de Barea. Pero ni aún así quedó el encuentro visto para sentencia. De hecho, Ty Lawson tuvo sobre la bocina el triple para llevar el partido a la prórroga, pero no entró.

En Denver, 26 puntos y 14 rebotes de Kenneth Faried, 24 tantos con 4 de 5 en triples de Danilo Gallinari y 17 y 11 asistencias de Ty Lawson. Eso sí, los de Colorado notaron los malos partidos de Andre Iguodala y Andre Miller. Porque los 2 Andre son parte esencial de su juego.

Los Clippers, en racha

Los Lakers deben estar sufriendo por partida casi triple. Por sus malos resultados, por los excelentes de su rival angelino y por el gran rendimiento que Matt Barnes está teniendo en los Clippers.

Barnes fue elemento fundamental en el octavo triunfo consecutivo de los Clippers, que ganaron 94-100 a Charlotte para ponerse 16-6 en la tabla clasificatoria. El alero, ex Laker, se fue a 19 puntos en 24 minutos y metió el triple que abrió brecha en el marcador para situarlo 85-94 a 2:53 del final. Junto a él, brillaron los de siempre. Chris Paul hizo 19 tantos y 10 pases de canasta, Blake Griffin fue el tercer hombre en 19 puntos y Eric Bledsoe aportó de todo desde la suplencia, como Barnes.

En los Bobcats, 19 puntos y 8 rebotes de Byron Mullens y 17 de Kemba Walker. Mientras, el ex ACB Bismack Biyombo fue titular, disputó 39 minutos y acabó con 10 puntos y 9 rebotes.