Howard, Jamison y Meeks se pegan un homenaje ante Denver Nuggets

Los Lakers bombardearon a los Nuggets desde el exterior anotando 17 triples y martillearon desde el interior con Dwight Howard (28 puntos y 20 rebotes). Tremendas actuaciones de los suplentes Antawn Jamison y Jodie Meeks. Con Kobe Bryant y Pau Gasol en un segundo plano, metieron 122 puntos y ganaron.

Jamison hizo un partido colosal con 33 puntos y 12 rebotes empezando como suplente. Y otro suplente, Meeks, asombró a propios y extraños al lograr ¡¡¡15 puntos en sus primeros 5 minutos de juego tras anotar 5 triples sin fallo!!!. En la tromba de juego ofensivo de Lakers -71 puntos al descanso aunque no siempre con un patrón claro de juego-, a Pau Gasol se le vio nuevamente fuera de lugar. Metió sólo 6 puntos de los 122 de su equipo y no hizo más que 7 tiros a canasta. Al menos, intentó ser partícipe dando 8 asistencias.

Mientras, Minnesota ganó a Milwaukee a pesar del monumental triple-doble del visitante Larry Sanders: 10 puntos, 12 rebotes y 10 tapones. Sanders empató el récord de tapones de la franquicia que estaba en poder de un tal Kareem Abdul-Jabbar desde 1973. El local José Juan Barea fue titular por primera vez y lo hizo bien y el ruso Alexey Shved fue la pieza capital del triunfo de Wolves.

Además, Philadelphia ganó en Charlotte bajo el impulso de Evan Turner y Jrue Holiday y el acierto final de un gran Jason Richardson.

L.A.Lakers 122 Denver 103

Parece claro que la diferencia de estos Lakers de Mike D'Antoni entre el éxito y el fracaso radica en gran parte, como en aquellos Phoenix de Steve Nash, del acierto o el desacierto desde el triple. Lo que resulta peligroso. Pero no es menos cierto que estos Lakers van adquiriendo velocidad de juego, que Dwight Howard se está agrandando (¡anoche anotó hasta un triple!) y que la suplencia está alcanzando grandes cotas, especialmente un espectacular Antawn Jamison que sigue creciendo en detrimento de un perdido Pau Gasol.

El español jugó 28 minutos, y menos hubiera jugado si Howard no hubiera sufrido un corte en un párpado en el segundo cuarto, lo que le obligó a retirarse unos minutos a vestuarios. A los Lakers se les vio siempre más cómodos con el dúo Jamison-Howard y D'Antoni intentó evitar que compartieran muchos minutos Gasol y Howard, porque el equipo no jugaba igual.

El partido fue una locura. Howard hizo un primer cuarto excelso con 16 puntos y 5 rebotes, pero llegó en el segundo cuarto Jodie Meeks y dejó pequeña la gesta del pívot. En sus primeros 5 minutos en cancha, ¡Meeks hizo 15 puntos con 5 triples sin fallo!. El Staples se rindió a sus pies. Y los Lakers se fueron al descanso anotando 71 puntos cuando ante Indiana hicieron 77 en todo el partido. Un auténtico frenopático a alta velocidad.

Ganaron los locales metiendo el 54% de sus tiros y anotando nada menos que 17 triples de 33 intentos. Lo hicieron con Kobe Bryant y Pau Gasol en segundo plano porque el primero lo coparon Dwight Howard (28 puntos y 20 rebotes), Antawn Jamison (33 tantos, 12 rebotes y 5 triples) y Jodie Meeks (21 puntos en 17 minutos con 7 de 8 desde el triple). ¡7 triples en 17 minutos!. Infernal el trío. Eso sí, el segundo plano de Kobe y Pau totalizó 17 asistencias.

Denver aprovechó la rapidez del juego para endosar 60 puntos en la pintura a los Lakers. Danilo Gallinari sumó 19 puntos, 4 triples y un brutal mate en el primer tiempo, Jordan Hamilton jugó buenos minutos y Andre Iguodala protagonizó la jugada bizarra de la noche al fallar un mate solo al contraataque y volver corriendo para recuperar el rechace.

Minnesota 95 Milwaukee 85

Minnesota ganó a Milwaukee a pesar de estar plagado de problemas físicos. A los ya consabidos se unieron la baja de Andrei Kirilenko y el hecho de que Kevin Love tuviera que jugar estando enfermo. Aún así, los Wolves resolvieron el partido y se sitúan con un balance de 7-8 a la espera de que vuelva Ricky Rubio.

Los locales metieron 57 puntos en la primera mitad, pero sufrieron un preocupante parón cuando sólo fueron capaces de anotar 11 puntos en el tercer cuarto. No importó. Porque en el cuarto final salió al rescate ese ruso lleno de talento que se llama Alexey Shved. El internacional ruso terminó el partido con 16 puntos, 10 de ellos en el último cuarto. Metió 4 de sus 6 intentos triples. Fue el máximo anotador local junto a Luke Ridnour. Todo ello en un equipo en el que hasta 5 jugadores de Minnesota estuvieron en torno a los 15 puntos. La versatilidad de Shved resultó letal para los Bucks.

Uno de ellos fue el puertorriqueño José Juan Barea, que fue titular por primera vez en la temporada y se lució: 15 puntos y 5 asistencias en 31 minutos con 6 de 10 en el tiro. Además, Kevin Love hizo 15 puntos y 14 rebotes, aunque con un horrible 5 de 19 en el tiro, y un gran Nikola Pekovic aportó 14 tantos y 16 rebotes. Buenos minutos de Derrick Williams desde la segunda unidad.

Mientras, el gran protagonista de Milwaukee fue Sanders con ese triple-doble con tapones. Además, 18 puntos de Monta Ellis y de Stephen Curry, que no tuvieron un día feliz y totalizaron un 14 de 41 en el lanzamiento. La peor noticia, la lesión de tobillo de Beno Udrih en el último cuarto, aunque no parece que sea seria.

Jason Richardson decide

Philadelphia no abandona su paso firme. Triunfo en Charlotte por 98-104 para ponerse con 10 victorias y 6 derrotas. Un triunfo armado a partir de las grandes actuaciones de un Evan Turner que sigue yendo a más (25 puntos y 10 rebotes) y un Jrue Holiday bañado de calidad (13 tantos y 15 asistencias), pero, sobre todo, armado a partir de una actuación estelar de Jason Richardson en el cuarto cuarto.

J-Rich sumó 14 de sus 22 puntos en ese cuarto final tan decisivo, y metió 4 triples ante unos Bobcats a los que sólo les pitaron 10 faltas en todo el partido, lo que dice poco a favor de su dureza. Ben Gordon fue el mejor anotador local con 19 puntos, el novato Jeffery Taylor añadió 16 y Bismack Biyombo ofreció sus mejores prestaciones de la temporada con 14 tantos, 7 rebotes y 3 tapones en 24 minutos de juego.