España y Estados Unidos repiten en Londres la final olímpica de Pekín

La gran final está servida. Estados Unidos y España repetirán su enfrentamiento de Pekín 2008. En la memoria, uno de los mejores partidos que se recuerdan, una final olímpica que dejó un gran sabor de boca hace 4 años. Estados Unidos es la gran favorita.

Los norteamericanos se deshicieron en semifinales de Argentina, que aguantó 25 minutos para caer con cierto estrépito en la recta final del partido (109-83). Era la tercera semifinal olímpica consecutiva que enfrentaba a argentinos y estadounidenses. En Atenas 2004 ganó Argentina para dispararse hacia el oro; en Pekín 2008 venció Estados Unidos; también hoy, en Londres 2012, el triunfo fue para el equipo norteño.

Mientras, España derrotó 67-59 a Rusia en otra exhibición final de defensa, tal y como hiciera en cuartos de final ante Francia. La primera parte fue de los rusos, pero los españoles reaccionaron con brillo en la segunda mitad.

España 67 Rusia 59

Rusia había ganado en la fase de grupos a España tras recibir un 20-2 en contra al inicio del choque, pero esta vez, en el momento de la verdad, el camino del partido fue inverso: dominio en la primera mitad de Rusia (20-31) y de España en la segunda (47-28). Dos mundos opuestos.

España jugó la peor primera mitad ofensiva que se le recuerda en décadas. Sólo metió 20 puntos con un 6 de 29 en el tiro. La defensa rusa resultó magistral y la incapacidad española para resolver en ataque alcanzó un tono calamitoso. Al descanso, sólo el segundo cuarto de Pau Gasol mereció el perdón. En Rusia, apagados Andrei Kirilenko y Alexey Shved, aunque diera 4 asistencias, en ataque, los primeros 20 minutos fueron de Sergei Monya (9 puntos tras 3 triples) y Sasha Kaun (8 tantos).

El tercer cuarto supuso un cambio radical de panorama. La circulación de balón española mejoró notablemente y esa fluidez dio paso a una ofensiva más alegre, una alegría en ataque que prosperaba según también lo hacía el trabajo defensivo de los de Sergio Scariolo. Rudy Fernández mejoró sus prestaciones, José Manuel Calderón se empezó a echar el equipo a las espaldas y Kirilenko se metía en problemas de faltas. Un triple de Calderón dejó el partido empatado a 46 a falta de un cuarto por jugar.

Los minutos finales contemplaron los mejores momentos defensivos de España con imporantes aportaciones de suplentes como Sergio Llull, Fernando San Emeterio o Felipe Reyes, que secó a Victor Khryapa. Marc Gasol hizo muy buenos minutos y España se despegó en el marcador para ganar.

Al final, victoria española con 16 puntos y 12 rebotes de Pau Gasol, 14 tantos, 4 triples y 3 asistencias de Calde, 11 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias de Marc Gasol y otros 11 puntos de Rudy. En Rusia, 14 tantos y 5 rebotes de Kaun y 10 puntos, 8 rebotes y 3 tapones de Kirilenko, que hizo un 2 de 12 en el tiro de campo y terminó errando al final 3 libres consecutivos.

Estados Unidos 109 Argentina 83

A Argentina le volvió a pasar con Estados Unidos lo que le ocurrió en la fase de grupos. Hizo una muy buena primera parte, pero mediado el tercer cuarto empezó a flaquear y en el último acto terminó cayendo con cierto estrépito ante el poderío físico y la profundidad de banquillo estadounidense. Y es que el guión de esta semifinal fue también muy parecido a lo acontecido hace un par de días en los cuartos de final entre Australia y Estados Unidos.

El equipo de Mike Krzyzewski empezó a toda pastilla y le metió un 18-6 de inicio a Argentina con 11 puntos de Kobe Bryant en los primeros 5 minutos de juego, pero los de Julio Lamas reaccionaron de inmediato para llevar el electrónico a un apretado 19-17 con un parcial de 1-11. El primero cuarto, extraño pero equilibrado, acabó 24-19 para los favoritos, que no parecían tenerlas todas consigo.

El segundo cuarto demostró la fortaleza mental argentina. Refugiados de forma casi permanente en una zona, los argentinos se estiraban o menguaban al ritmo que su rival acertaba o fallaba con su tiro exterior. Argentina aguantó el marcador y un triple de Manu Ginóbili cuando expiraba el tiempo llevó el partido al descanso con un 47-40 para Estados Unidos. Los norteamericanos dominaban el rebote, tiraban como los ángeles de 2 (su serie: 15 de 21), pero no andaban finos desde el triple (5 de 17). Sus mejores hombres en el intermedio Kobe Bryant, LeBron James y Kevin Love. El mejor argentino: un gran Carlos Delfino.

Llegó la reanudación y a los pocos minutos Kevin Durant rompió el partido desde la distancia. Y es que 2 triples consecutivos suyos pusieron el marcador en un claro 59-46 y otros 2 consecutivos del propio Durant llevaron esa distancia a +17 (70-53). A partir de ahí, no hubo partido. El tercer cuarto acabó con 74-57 y el último, en el que Estados Unidos se acercó a la treintena de ventaja, sobró.

Los ganadores metieron 18 triples con un 43% de efectividad en el tiro, dominaron el rebote, anotaron un 64% en sus tiros dobles y tuvieron a 5 jugadores en dobles dígitos. Kevin Durant acabó con 19 puntos y 5 triples, LeBron James con 18 más 7 rebotes y 7 asistencias y Carmelo Anthony con 18 en 22 minutos. Y Russell Westbrook se fue a vestuarios lesionado cuando faltaban 3:38 para el final del partido. En Argentina, 18 puntos de Ginóbili, 15 de Luis Scola, que sólo capturó 1 rebote, y otros 15 con 5 rebotes y 3 pases de canasta de un Delfino que se apagó en la segunda parte. Pablo Prigioni sumó 6 asistencias.