Los Lakers derrotan a Dallas con 8 puntos de Gasol en la prórroga

Los Lakers están sorprendiendo a todos desde que Kobe Bryant cursó baja. Sin su megaestrella, los angelinos han ganado 4 de sus 5 partidos, los 4 de forma consecutiva y se han impuesto a rivales como San Antonio y Dallas.

Además, el triunfo de los Lakers ante Dallas Mavericks representa la inversión de una situación dolorosa. Dallas le metió en los pasados playoffs un 4-0 a Lakers y los angelinos le han endosado a los Mavs en la presente temporada regular un 4-0 de vuelta.

Muchos jugadores participaron del triunfo, pero tenemos que destacar por su cercanía y por su brillantez a Pau Gasol, jugador decisivo en el final de partido y autor de 20 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias.

Por otra parte, Sacramento ganó a Portland con una canasta final de Marcus Thornton que neutralizó el octavo triple de Wesley Matthews que había dado ventaja a los de Oregón a 5 segundos del final. Y Boston derrotó al peor equipo de la NBA, Charlotte, sin poner en juego a su big three clásico (Garnett-Pierce-Allen). Rondo-Bradley-Bass fue esta vez un insólito big three ganador.

L.A.Lakers 112 Dallas 108 (tras prórroga)

Pau Gasol hizo un partido de brega, con más tesón que acierto, durante buena parte de la matinal californiana. Ayudó sin demasiado brillo al equipo, sobre todo en defensa con un gran trabajo sobre Nowitzki, pero llegado el momento de la verdad el español se erigió en la figura del encuentro.

Primero, resultó decisivo defensivamente en la jugada final del último cuarto, cuando defendió a 7 metros de la canasta a Nowitzki, que bien presionado erró el tiro sobre la bocina. El partido se encaminó así a la prórroga tras finalizar con empate a 98.

Y lo fue luego, porque Pau resultó crucial en la prórroga al anotar 8 puntos, 6 de ellos tras 2 triples consecutivos desde la esquina mediado el tiempo extra. Algo inaudito. Para rizar el rizo y como gran colofón, el internacional español anotó los 2 tiros libres que a 0,5 segundos del final dieron la victoria a los locales. Acabó Gasol con grandes números: 20 puntos, 10 rebotes, 5 asistencias, 2 de 2 triples y un gran sabor de boca tras 44 minutos de juego.

Pero la victoria de los Lakers fue nuevamente un triunfo del espíritu coral que reina sin Kobe, ya que su ausencia ha provocado que muchos jugadores den un paso adelante. Es el caso de Pau, pero también de Bynum, Sessions, Metta World Peace y Barnes. Bynum acabó con 23 puntos y 16 rebotes, aunque falló bastantes tiros (9 de 24), Sessions se fue a 22 tantos, Metta World Peace sumó 18, aunque se excedió en el número de lanzamientos (7 de 20) y Barnes rozó el triple-doble con 11 tantos, 11 rebotes y 8 asistencias. Brown utilizó una rotación de 8 jugadores y Kobe estuvo dando la lata en el banquillo como si fuera el técnico local.

Dallas cuidó muy bien el balón, como los Lakers (13 pérdidas entre ambos equipos en 53 minutos), lanzó con gran acierto desde el triple, pero tuvo problemas, algo lógico, en el rebote. Nowitzki erró sus primeros 7 tiros del partido, llegó al descanso con 5 puntos, pero acabó con 24 y 14 rebotes, si bien se fue a un 9 de 28 en el tiro con sólo 1 asistencia.

Además de Nowitzki, Terry sumó 21 puntos con 5 de 6 triples y fue de menos a más, Delonte West añadió 20 tantos tras una gran primera parte, Jason Kidd protagonizó un gran arranque de partido y Marion sumó un doble doble y provocó la sorpresa de todos cuando en la jugada decisiva de la prórroga, con 110-108 para Lakers, 3 segundos de juego y banda para los locales, dejó agotar la posesión sin hacer falta a Gasol hasta que quedaban sólo 5 décimas para el final. Inexplicable decisión que nadie alcanza a entender y que fue la tumba definitiva de Dallas.

Sacramento 104 Portland 103

Wesley Matthews hizo un partido inmenso. Metió 31 puntos tras anotar 8 de 10 triples. El octavo pareció ser el tiro ganador, el de la victoria visitante. Ese triple, logrado a 5 segundos del final del partido, puso un 102-103 a favor de Portland. Pero llegó Marcus Thornton y tiró por tierra la obra magna de Matthews. Fue con una cesta ganadora a 3 segundos del final. La victoria era de los Kings.

Sacramento ganó a pesar de que Portland metió el 52,6% de sus tiros y enchufó nada menos que 16 triples con un 50% de acierto. La clave para que no ganaran los de Kaleb Canales estuvo en la relación robos-pérdidas, que fue fantástica para los locales (8 a 6) y horrible para los visitantes (3 a 17).

Los Kings tuvieron a muchos jugadores activos. Cousins metió 23 puntos, Tyreke Evans y Thornton hicieron 20 cada uno e Isaiah Thomas 18 con 8 asistencias. Mientras, el dominicano Francisco García no anotó en los 6 minutos que disputó.

En Portland, el partidazo de Matthews apenas fue secundado por Felton -19 puntos- y por el doble doble de J.J.Hickson, que capturó 13 rebotes.

Boston gana sin su trío veterano

Boston reservó a Garnett, Pierce y Allen en su visita al peor equipo de la NBA, Charlotte. Y la apuesta de Rivers salió bien. El equipo ganó 82-94 (mismo resultado de su partido anterior ante Nets) y se reinventó a través de un nuevo e insólito big three formado por Rondo, Bradley y Buss. Brandon Bass acabó con 22 puntos y 9 rebotes, Avery Bradley con 22 y 2 triples y Rondo fue el marco necesario para hacerlo todo comprensible. Acabó con 20 tantos y 16 asistencias, haciéndose perdonar sus 8 pérdidas de balón.

Junto a ellos, un gran Stiemsma, enormemente completo: 8 puntos, 5 rebotes, 6 tapones y 4 robos. Y un Pietrus que se tiró 11 triples con acierto escaso. Los Celtics sentaron las bases de su triunfo en un brillante primer cuarto.

Gerald Henderson, con 22 puntos, fue el mejor de los Bobcats, un equipo destruido que sólo ha ganado 7 de sus 59 partidos.