Kobe Bryant y su máscara arrinconan el duelo entre Pau Gasol y Ricky Rubio

Pau Gasol y Ricky Rubio, los dos baloncestistas españoles más mediáticos, se encontraban a las faldas de Hollywood y bajo la atenta mirada del boricua José Juan Barea. Sin embargo, todo el protagonismo de la película fue para el Hombre de la Máscara: Kobe Bryant.

Bryant jugó con máscara para proteger su maltrecha nariz, rota en el intrascendente All-Star por un exceso de no se sabe qué de Dwyane Wade. Y con máscara fue la estrella: 31 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias llevaron su firma. Minnesota, que había ganado el día anterior a los Clippers, cayó ante los Lakers sin Kevin Love. Entre los hispanos, el mejor con diferencia fue Pau Gasol.

Mientras, el partidazo del dúo Ilyasova-Gooden no fue suficiente para Milwaukee en Boston. Delfino metió 8 puntos y capturó 8 rebotes. Pero el verdadero poderío estuvo en el triple-doble de Rajon Rondo y los 25 tantos y 10 rebotes de Kevin Garnett.

En el partido más atractivo de la jornada del miércoles, Chicago Bulls dio un paso más en su demostración de poderío al ganar en San Antonio a unos Spurs que eran casi inexpugnables en el AT & T Center. La clave: Derrick Rose superó a Tony Parker.

Finalmente, Golden State ganó en Atlanta en un partido marcado por la igualdad en el que brillaron Monta Ellis, David Lee y un McGuire que dominó los tableros.

L.A.Lakers 104 Minnesota 85

Doble sesión de Minnesota en el Staples Center en 24 horas. Primero, pase exitoso ante los Clippers; después, pase fracasado ante los Lakers. Y es que parecía difícil que los de Adelman pudieran ganar en 2 días a domicilio a los 2 equipos angelinos, más aún cuando a esta segunda cita acudían sin su gran estrella, Kevin Love, y cuando los Wolves habían perdido con los Lakers los últimos 16 partidos que habían disputado.

Mientras que la gran estrella visitante no andaba por la pista, la gran estrella local, Kobe Bryant, lo hacía de modo singular, con una máscara protectora tapándole la cara debido a su fracturada nariz. Pero la máscara, lejos de ser una molestia, fue un acicate para el de Filadelfia, que se marcó un partidazo y oscureció el duelo español entre Gasol y Rubio.

Si algo no está en duda en estos Lakers es su enorme solvencia como locales. Es en casa cuando mejor defienden y cuando alcanzan su mejor balance defensa-ataque. Llevan, por ello, 15 victorias en los 17 encuentros que han jugado en el Staples. Esa superioridad ya se manifestó en un primer cuarto de dominio local con un buen Kobe y con Pau y Ricky sumando 0 puntos al final del cuarto. Y se hizo aplastante en el tercer cuarto, cuando los Lakers, tras acabar 50-44 la primera mitad, endosaron a los Wolves un parcial de 33-15 y dejaron al rival en un 5 de 20 en el tiro. A partir de ahí, no hubo partido. Los angelinos llegaron a alcanzar una ventaja de 27 puntos y ya todo fue puro paseo.

Un paseo gobernado por la máscara de Bryant. El escolta local terminó con 31 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias y acabó acaparando todos los flashes. Pau Gasol, que fue de menos a más, ofreció su mejor versión en el tercer cuarto, el que decidió el choque. Eso le da más valor a sus números, que no fueron malos: 15 puntos, 5 rebotes, 4 asistencias y 3 tapones. Gasol logró un 6 de 10 en el tiro de campo y lo que es más importante, con él los Lakers lograron un +33 en 31 minutos. El tercer jugador de la tripleta estelar de Lakers, Bynum, se fue a 13 puntos, 13 rebotes y 3 tapones. Y la noticia, no desdeñable, fue que jugadores como Barnes, Blake, Murphy e, incluso, el señor ex Ron Artest aportaron su granito de arena.

A Minnesota se le vio desfondado y algo perdido sin la referencia de Love. Otra vez los suplentes estuvieron mejor que los titulares. Webster y Beasley hicieron 14 puntos y Anthony Randolph 12 con 9 rebotes. Ricky Rubio volvió a estar bien en el pase (9 asistencias, una por debajo de las piernas de Fisher), pero volvió a fracasar en el tiro: anotó 2 puntos ante Clippers y 3 ante Lakers con 2 de 16 en el lanzamiento. Y no le fue mucho mejor a Barea. El puertorriqueño sólo jugó 10 minutos y se quedó en blanco. Dio 4 pases de canasta y falló sus 4 tiros. Los Wolves, eso sí, presentan un gran 18-18 como balance de temporada.

Boston 102 Milwaukee 96

Los Celtics sufrieron para ganar a los Bucks y equilibrar su trayectoria de temporada para alcanzar las 17 victorias en 34 partidos. Sufrieron a pesar de que su gran trabajo defensivo en el tercer cuarto (27-13) hacía presagiar un más tranquilo final. Pero Ilyasova estaba para pocas concesiones.

El turco Ilyasova, el mejor visitante con Gooden, anotó 2 canastas en el último minuto para acercar a los suyos y amenzar a Boston (98-96 a 24 segundos del final). Pero en ese momento surgió la madurez y serenidad de un crack llamado Kevin Garnett, que decidió el encuentro con aplomo desde la línea de persona. Garnett y Rondo fueron las estrellas. El ala-pívot acabó con 25 puntos y 10 rebotes, además de decidir el partido, y el base logró su tercer triple-doble de la temporada, ahí es nada: 15 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias. Además, Brandon Bass hizo 16 puntos y 7 rebotes, Ray Allen sumó 15 puntos y Chris Wilcox se hizo con 13 rebotes.

Todo el quinteto inicial de Celtics anotó 10 o más puntos y el equipo funcionó a ráfagas, fracasando constantemente desde la línea del triple (3 de 16).

En Milwaukee, estelares Ilyasova (25 puntos y 10 rebotes) y Gooden (23 y 8), que contrarrestaron el mal partido de Brandon Jennings a pesar de sus 8 asistencias. Dunleavy volvió a ser humano y estuvo a años-luz de su actuación anterior, que se saldó con 27 puntos anotados. Y Delfino aportó 8 puntos, 8 rebotes, 2 asistencias y 2 recuperaciones en 34 minutos. Se puede decir que los Bucks estuvieron en el partido, pero no fue suficiente porque al otro lado de la cancha estaban dos señores llamados Rondo y Garnett.

Gran victoria de Bulls y Rose

El gran partido se jugaba en San Antonio. Los Spurs recibían a los Bulls con un balance de 13-1 en casa, pero sufrieron su segunda derrota como locales al caer 89-96 en un partido duro, defensivo, muy serio, de verdad. Partido auténtico en el que Rose demostró su poderío al superar claramente a Tony Parker. El base de Chicago fue la estrella del encuentro con 29 puntos.

Los Bulls se van a 29-8 con esta victoria. Lo lograron tras recuperar en un gran último cuarto todo el espacio que habían perdido en un mediocre tercero. Rose estuvo rodeado de un gran ejército de secundarios. Algunos de lujo, como Noah -10 puntos y 13 rebotes- o C.J.Watson, que anotó 12 en 13 minutos de acción.

Los Spurs recuperaron a Splitter, pero notaron la falta de anotación de Parker, que dio 9 asistencias. Gary Neal -21 puntos en 24 minutos- y Tim Duncan, 18 tantos y 10 rebotes, fueron los mejores visitantes.

Los Warriors ganan en Atlanta

Los Warriors venían de perder metiendo sólo 78 puntos y 24 horas después sólo encestaban 85, aunque esta vez para ganar. Lo lograron por 82-85 con 24 puntos y 8 asistencias de Monta Ellis, 22 y 12 rebotes de David Lee y espectacular encuentro en los tableros de McGuire, que no anotó, pero capturó 15 rebotes. Bien Ekpe Udoh y surrealista actuación de Stephen Curry por obra y gracia de su entrenador. Curry no jugó durante todo el partido porque estaba lesionado, pero saltó a la cancha a 33 segundos del final para participar en una jugada que duró 3 segundos y en la que no tocó la bola. Eso sí, su presencia pudo ser decisiva para despistar a la defensa rival y que Lee metiera una canasta muy importante.

Regresó Joe Johnson a los Hawks y fue su máximo anotador con 18 tantos. El quinteto inicial se fue a dobles dígitos en ataque y 3 de sus hombres firmaron dobles dobles: Josh Smith, Marvin Williams y Zaza Pachulia, éste último con 13 puntos y 16 rebotes. Pero el problema surgió con la falta de aportación de los suplentes.