San Antonio Spurs decide retirar la camiseta número 12 de Bruce Bowen
Bowen jugó 8 temporadas en el equipo texano y conquistó 3 anillos
A algunos les ha causado sorpresa; a otros, no tanto. Bruce Bowen forma desde hoy más parte aún de la fantástica historia de los Spurs de Gregg Popovich y Tim Duncan, esa historia en la que también han marcado el paso Manu Ginóbili y Tony Parker.
Los Spurs han informado hoy de su decisión de retirar la camiseta número 12, la de Bruce Bowen, como tributo a un jugador que fue esencial en el trabajo defensivo que llevó al equipo a ganar 3 anillos en los años 2003, 2005 y 2007. Bowen, ya retirado con 40 años, recibe así el más alto honor que un jugador pueda recibir de su equipo: ver colgada su camiseta en el pabellón donde tanto sudor derramó.
La ceremonia de homenaje al jugador, retirado hace 2 años, se celebrará el 21 de marzo, coincidiendo con la visita de los Minnesota Timberwolves a San Antonio. La noticia se ha propagado con rapidez. Twitter, sin ir más lejos, ha sido un hervidero en el que Bowen ha recibido un gran número de felicitaciones. Uno de los primeros en hacerlo: el argentino Manu Ginóbili, que se refería a él como un amigo. Y es que compartieron muchas batallas y muchas alegrías.
De Bowen se pueden decir muchas cosas, pero una casa a la perfección con él: era un defensor feroz que no reparaba en gastos. Fue 5 veces elegido en el mejor quinteto de defensores de la NBA. Pero lo que pocos recuerdan es que antes de esas distinciones y de lograr 3 anillos, este alero nacido en California en 1971 no había sido drafteado y había jugado en varios equipos de la liga francesa. También recaló en la CBA antes de aterrizar en la NBA, donde contra todo pronóstico tuvo una vida longeva.
Jugó 13 años en la mejor liga del mundo, alcanzó en 10 ocasiones la postemporada y fue 3 veces campeón. Militó en Miami, Boston, Philadelphia y otra vez Miami antes de encontrar su lugar en el mundo. Ese lugar se llamaba San Antonio. En esa ciudad se quedó a vivir a las órdenes de Popovich durante 8 felices años en los que jugó 630 de los 873 encuentros que disputó en temporada regular durante su estancia en la NBA, en la que llegó a afrontar 135 encuentros de playoff.
Su fortaleza física no tenía casi parangón. En sus 7 años finales con los Spurs disputó 571 partidos de los 574 posibles de temporada regular. Su serie de partidos en esas 7 campañas fue 82-82-82-82-82-81-80. Impresionante.
Algunos podrán considerar que no atesora suficientes habilidades ofensivas para tal tributo (promedió 6,1 puntos en toda su carrera NBA); otros afirman que fue la pieza defensiva esencial que permitió brillar aún más en ataque a jugadores como Duncan, Ginóbili y Parker. Y añadirán que representa el espíritu defensivo que llevó a los Spurs a ser inexpugnables durante unos cuantos años.