Dallas derrota a Houston y suma 6 triunfos seguidos con un buen Barea

Los Mavericks siguen en racha. Ya suman 6 victorias seguidas. Su última víctima, los Rockets de Scola, que tuvo un partido raro. Mientras, Barea funcionó muy bien desde la banca para Dallas. Arroyo, mientras, ganó con Miami y Ariza perdió con los Hornets en Oklahoma City.

Interesante este último partido, un Oklahoma City-New Orleans, encuentro de vecinos (y vecinos de gran nivel) que se saldó con victoria local gracias al impulso del base Russell Westbrook, que protagonizó un apasionante duelo con Chris Paul.

Miami, mientras, venció a Washington de forma discreta y sin acallar las críticas. James, Wade y Bosh coparon todo el juego y sus compañeros, incluido Arroyo, no vieron la bola. Como no la vio Delfino en Salt Lake City porque sigue de baja. Su equipo, Milwaukee, acudió con lo puesto a enfrentarse con los Jazz y, lógicamente, perdió.

Dallas 101 Houston 91

Dallas sigue en el buen camino. Buen juego, excelente química en el equipo, momento dulce de Dirk Nowitzki, que acaba de ser nombrado Jugador de la Semana en el Oeste, madurez en la plantilla... y 6 victorias consecutivas para colocarse en la parte alta del Oeste con 13 triunfos y 4 derrotas.

La de anoche no fue comodísima, pero tampoco compleja. Los locales dominaron el partido y lo aseguraron en el tercer cuarto, donde adquirió un papel fundamental Caron Butler, que en ese cuarto anotó 13 de sus 19 puntos. Se pusieron los locales 22 arriba y Santas Pascuas.

Nowitzki volvió a sobresalir con 20 puntos, 10 rebotes y 3 tapones en 29 minutos, Kidd dio 11 asistencias en 26 y Marion se fue a 14 puntos y 10 rebotes partiendo de la segunda unidad, una segunda unidad en la que estuvo muy activo el puertorriqueño José Juan Barea.

J.J anduvo realmente hábil durante toda la noche. Hizo 11 puntos y repartió 6 asistencias en 27 minutos de bondades deportivas: 5 de 8 en el tiro de campo con 1 triple sin fallo, 3 rebotes... lo hizo todo bien.

En el campo contrario, los Rockets pelearon el partido, pero poco más. Y es que su titularidad se vio desbordada. Esa fue la explicación de que Luis Scola hiciera muy buenos números, pero jugara poco. Acabó el argentino con 15 puntos y 5 rebotes en 21 minutos en los que intentó 13 tiros a canasta. Enorme actividad, pero escasa productividad colectiva, ya que con él en pista su equipo encajó un -18.

Algo parecido les pasó a los otros titulares, jugadores como Battier o como Martin, que fue el máximo anotador visitante con 17 puntos, pero errando 11 de sus 15 lanzamientos a canasta.

Oklahoma City 95 New Orleans 89

Duelo de rivalidad vecina entre 2 equipos punteros en el Oeste a día de hoy y victoria local fraguada en el último cuarto, bajo el impulso de un Russell Westbrook que dirimió un precioso duelo en el puesto de base con Chris Paul.

Westbrook terminó con 25 puntos, 11 asistencias, 5 rebotes y 5 robos. Su único lunar fue perder 8 balones, pero poco importó. Porque el base local decidió el partido con 6 puntos consecutivos que llevaron el marcador a un cómodo 89-81 a 43 segundos del final. Esos 6 tantos fueron la culminación del parcial de 14-0 con el que los de Brooks labraron su victoria.

Junto a Westbrook, brilló Kevin Durant, pero de forma intermitente. Fue el autor de 26 puntos y 11 rebotes, pero a fuerza de tirar (7 de 22 en el tiro de campo tras errar sus 5 triples). Sefolosha, mientras, tuvo una noche perfecta en el tiro (7 de 7 entre tiros de campo y libres) e Ibaka no fue capaz de anotar en 31 minutos, pero capturó 11 rebotes y puso 3 tapones. Por cierto, un Ibaka que estaba prácticamente expulsado por los árbitros en el tercer cuarto, pero que se quedó jugando gracias a la revisión de la jugada de su expulsión a través del vídeo.

Los Thunder ganaron a pesar de sólo anotar el 37,8% de sus tiros. Para obrar el milagro tuvieron que ir muchas más veces a la línea de tiros libres y, sobre todo, tuvieron que dominar de cabo a rabo el rebote (56 a 36 con un 40-5 en el aro local).

Los Hornets estuvieron en la brega, aunque se pegaron el susto de la noche cuando casi pierden por lesión en el tercer cuarto a Chris Paul, que intentando salvar un balón por la línea de fondo resbaló con una toalla. Sin embargo, se recuperó para ser el mejor de los suyos con 17 tantos, 14 asistencias y 5 robos. West metió 20 puntos y Okafor hizo 13 con 11 rebotes.

En cuanto al hispano del partido, Trevor Ariza, estuvo bien. Ofreció un gran despliegue ofensivo y aportó 10 puntos, 3 rebotes, 3 robos de balón y un 4 de 7 en el tiro de campo -con 2 triples- en 38 minutos.

Miami 105 Washington 94

Ganar por 11 puntos en casa a un equipo mediocre como los Wizards, al que, además, le faltaban Wall, Yi Jianlian y Thornton, no es para tirar cohetes.

Los Heat ganaron pero no aplacaron el ruido de fondo que acompaña a su decepcionante inicio de temporada (10 victorias en 18 partidos). Además, anoche demostraron más que nunca que su juego está lo más alejado posible de lo que se le pide a un equipo de baloncesto. Jugaron 3 hombres, sus 3 estrellas, y los demás apenas tocaron la bola.

Un ejemplo de ello fue el puertorriqueño Arroyo, base titular del equipo que en 25 minutos no anotó un solo punto. Pero es que tiró el pobre 2 veces a canasta. Dio 2 asistencias y se limitó en muchas fases a ver cómo James, Wade o Bosh se tiraban todo lo que podían o se pasaban entre ellos.

Los número son tozudos. James (30 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias), Wade (26 tantos, 8 rebotes, 6 asistencias y 4 robos) y Bosh (20 puntos y 7 rebotes). El trío estelar sumó 76 de los 105 puntos del equipo, lanzó 49 tiros dejando 25 al resto y perdió 13 de los 15 balones extraviados por el equipo, porque el resto era difícil que perdieran lo que pocas veces tuvieron en sus manos. Una filosofía que nada tiene que ver con el juego coral -aunque tengan sus megaestrellas- de Lakers, Celtics o Spurs, por poner 3 claros ejemplos.

Por si fuera poco, los árbitros echaron una manita pitando 31 faltas personales a Washington, que además estuvo muy flojo en el tiro triple (3 de 17). Andray Blatche (26 puntos y 9 rebotes) y Gilbert Arenas (23 y 7 asistencias) fueron sus mejores armas en un partido en el que fueron expulsados en el tercer cuarto Hilton Armstrong y Juwan Howard.

Utah 109 Milwaukee 88

Todo lo contrario que Miami es Utah. El equipo mormón, bajo el auspicio de Sloan, juego como un bloque con un base que amasa el balón porque es el cerebro del equipo, un armador dominante que controla todas las facetas del juego, Deron Williams.

Los Jazz ganaron fácil a unos Bucks mutilados. Y es que a los de Wisconsin les faltaba casi toda su artillería, pues no pudieron contar con Bogut, Gooden, Delfino y Maggette. Casi nada. Brandon Jennings se erigió en el líder visitante con 27 tantos, el turco Ersan Ilyasova fue titular y terminó con 18 tantos, 6 rebotes y 3 recuperaciones y el suplente Douglas-Roberts sumó 19 tantos. En el lado opuesto, el desastroso partido de Salmons (1 de 11 en el tiro de campo).

Utah, que ya suma un balance de 14-5, logró un 54,8% de sus tiros frente a un acierto del 34,7 de su rival. Deron Williams fue una vez más el eje de la victoria con 22 puntos y 10 pases de canasta, Jefferson, su más efectivo compañero con 22 tantos, 11 rebotes y 4 tapones y Earl Watson se lució desde la segunda unidad.