JORNADA NBA / playoffs 2010 - SEMIFINALES DE CONFERENCIA
Bryant y Gasol le dan la primera victoria a los Lakers frente a Utah
Kobe anota 11 puntos en la recta final y Pau hace 38 de valoración
Los Jazz presentan un buen juego coral sin Okur y Kirilenko
Los Lakers ganaron el primer partido de las semifinales del Oeste, pero no terminaron de convencer. Ante unos Jazz privados de Kirilenko y Okur, el equipo de Phil Jackson se complicó la vida en el último cuarto y tuvo que recurrir al juego milagroso de Kobe Bryant.
El escolta de Filadelfia anotó 11 de sus 31 puntos en los últimos 4 minutos del partido, cuando más feas se habían puesto las cosas para los locales. Y Pau Gasol llevó el peso del partido con anterioridad, ofreciendo otra brillantísima actuación con 25 puntos, 12 rebotes, 5 tapones y 4 asistencias.
Los Jazz no solo fueron Deron Williams y Carlos Boozer. También estuvieron a muy buen nivel Millsap, Miles y Matthews. Lo malo para ellos es que ya han vivido en el pasado más cercano 2 eliminaciones ante el equipo angelino y que cada vez que un equipo de Phil Jackson se ha adelantado en el primer partido de una ronda ha ganado. El escalofriante balance es de 45 victorias sin derrota alguna. Una estadística sobranatural.
L.A. Lakers 104 Utah 99 (1-0)
Los Lakers arrancaron de muy buenas maneras y dominaron gran parte del encuentro aunque nunca lograran una ventaja convincente, pero en el inicio del último cuarto -con la segunda unidad en pista, sin Kobe ni Pau- las cosas se torcieron y estuvieron a punto de venirse abajo. Menos mal que llegó Bryant al rescate.
Comenzó el partido de forma tremenda. En la primera jugada, Deron Williams se lesionó, pero afortunadamente sólo fue un susto. Y es que, de haberse confirmado el daño, hubiera sido la tumba de esta serie.
De todos modos, el inicio no pudo ser más duro para los mormones, que avanzado ya el primer cuarto perdían por 11 puntos (26-15). Para entonces, los locales llevaban anotados 13 de sus 15 intentos a canasta y Bryant y Gasol estaban golpeando fuerte a la defensa rival, sin que de nada sirviera el buen partido del 'lesionado' Williams.
Aún así, los de Sloan consiguieron contener la hemorragia y presentarse en el inicio del segundo cuarto con un 30-23 en contra. En esos primeros 12 minutos, los Lakers habían anotado el 78,9% de sus tiros de 2, no habían intentado ni un solo triple y habían errado el único tiro libre del que dispusieron. Extraña forma de anotar, pero lógica para estos Lakers cargados de hombres altos de calidad. El equipo sumó 22 puntos en la pintura en este primer cuarto.
Se inició el segundo y los suplentes de los Lakers funcionaron muy bien. Tan bien, que un triple de Odom colocó la máxima ventaja de todo el partido para los angelinos (39-25). Pero otra vez Utah templó la situación y consiguió irse al descanso con un aceptable 53-45.
Para entonces, Bryant y Gasol sumaban 24 tantos (12 por cabeza) y Fisher, Artest, Odom y Walton ayudaban, mientras que Bynum, tocado, andaba discreto; en Utah, Deron Williams se salía con 17 puntos y Boozer y Millsap le secundaban de lejos.
El tercer acto pareció templar los ánimos, que nunca estuvieron muy exaltados, todo hay que decirlo. Pero en esos minutos sin aparentes sobresaltos, en los que ambos equipos parecían navegar en una balsa de aceite, los Jazz supieron sorprender sigilosamente, sin que se notara. Y con un par de triples presentaron sus credenciales en el partido (63-60).
Los Lakers reaccionaron de inmediato merced a la conexión Kobe-Pau y a 2 buenas canastas de Fisher y a partir de ahí se vivió un ligero balancín en el marcador que se resolvió a favor de los locales por 81 a 73 y todo por decidir en el último asalto de 12 minutos.
Con lo que nadie contaba era con lo que iba a venir después. La segunda unidad angelina, que tan buen trabajo había hecho en su primera aparición, naufragó en su segunda. Y los Lakers sin Bryant y Gasol se vinieron abajo en unos fatídicos minutos.
Los de Sloan apretaron las tuercas en defensa y los Lakers anotaron ¡1 tiro libre en los primeros 6 minutos del cuarto período!. ¡Vaya desastre!.El parcial de 1-12 dejó el marcador en 82-85 para el equipo de Jerry Sloan, que se mantenía impertérrito en la banda. Eran minutos en los que tampoco estuvieron en pista Williams y Boozer, por lo que el relevo estuvo en manos de un Millsap con mayúsculas y un muy buen Miles.
Entonces, Pau Gasol firmó el primer momento clave del choque. A falta de 6 minutos para el final atrapó un rebote ofensivo, pasó el balón a Fisher, éste se lo devolvió y el español anotó una gran canasta con tiro adicional, la primera de su equipo en el último cuarto. La lata se había abierto.
Sin embargo, los verdaderos problemas estaban por llegar. El juego cada vez más coral de Utah empezaba a rendir sus frutos y los visitantes se colocaron 89-93 a algo más de 4 minutos del final.
En ese delicado momento, en ese instante crudo, emergió como un gigante la figura de Kobe Bryant, majestuosa, extraordinaria. Y Kobe decidió el partido. Parcial de 15-6 para los locales en los últimos 4 minutos con 11 puntos de Bryant. Sólo Odom y Gasol osaron anotar 2 puntos cada uno. El español para prácticamente cerrar el partido tras poner un importante tapón con 102-97, quedarse con el balón, recibir una personal y anotar los 2 tiros libres del 104-97. Restaban 10 segundos.
La figura de Bryant fue colosal (31 puntos con 12 de 19 en el tiro) y la de Gasol, también (25 puntos, 12 rebotes, 5 tapones, 4 asistencias y 38 de valoración en 40 minutos). Entre los 2, hicieron 56 tantos con 21 de 34 en el tiro de campo y 14 de 14 en el tiro libre. El resto fueron acompañantes, con buenos papeles de Fisher, Walton -aunque muy corto su papel- y de Odom y Bynum en el rebote, si bien Odom tuvo un importante peso en el juego, siendo el tercer hombre del equipo.
En los Jazz, Williams (24 puntos y 8 asistencias) y Boozer (18 y 12 rebotes) llevaron el peso, pero lo compartieron en gran parte con Millsap (tremendo con 16 tantos y 9 rebotes), Miles -otros 16 puntos- y Matthews -14 y 7 rebotes-.