Carlos Arroyo y Rudy Fernández, que regresó, triunfan con sus equipos

Carlos Arroyo brilló en la dirección y superó con su equipo, Miami, a Rose y los Bulls, a los que sometieron a una soberana paliza en el United Center. Mientras, Rudy Fernández volvió tras superar su lesión y ejerció de sexto hombre en la victoria de Portland sobre Dallas.

En este partido hubo 3 hispanos: el local Fernández, que estuvo a un nivel aceptable, y los visitantes Barea -excelente en el pase- y Nájera, que no hizo nada en los pocos minutos que jugó.

Los que sí hicieron mucho fueron Scola y Ariza, parte esencial de la ofensiva de Houston. Entre ambos hicieron 41 tiros con poco acierto, pero dieron muchas otras cosas a su escuadra. Lástima que el equipo no funcionara y perdiera sorprendentemente en el Toyota Center ante los Clippers.

Chicago 74 Miami 103

Tremendo varapalo el sufrido anoche por los chicos de Del Negro. Una contrariedad máxima que irritó sobremanera al público del United Center, que ve cómo los playoffs se alejan irremediablemente.

El golpe propinado en los primeros 24 minutos por el equipo de Spoelstra es de los que deja huella. Y si no lo creen, asómense al resultado al descanso. Auténtico 'escandalazo': ¡¡¡33-63!!!.

Con esos guarismos nada más había que decir. Todo lo demás fueron vacaciones, alegres o tristes, según el bando.

Fue un día especialmente feliz para Carlitos Arroyo, afianzado como base titular de los Heat. El armador boricua se fajó como un grande ante Derrick Rose, que no tuvo su noche.

El que sí la tuvo fue Arroyo, que acabó con 10 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias y 2 robos en 36 minutos. Dirigió con pasos firmes a los de Florida y contribuyó a la felicidad colectiva de los suyos.

Esta vez ni siquiera fue Wade el maestro de ceremonias, porque Wade, como Arroyo, pensó en los demás y se dedicó más a pasar que a anotar (10 asistencias en 29 minutos). Porque el líder en esta ocasión fue un incontenible O'Neal, que se apenas se centró en el rebote para poder recalcar su faceta anotadora: 24 puntos en 25 minutos. Beasley sumó 15 en 20 minutos y Haslem cumplió, como siempre, como jefe de la segunda unidad.

Frente a ese hábito por cercar la perfección, la imperfección pudo con los Bulls, un equipo más que gris, que anotó el 32,9% de sus tiros y que completó una primera parte vergonzosa.

Warrick se lución de cara a la galería cuando había ya poco que rascar (14 puntos y 7 rebotes en 19 minutos) y Taj Gibson hizo 12 puntos y 10 rebotes.

Portland 101 Dallas 89

Hubo 3 hispanos en cancha, pero ninguno de ellos sobresalió, si bien Fernández, que reaparecía, y Barea contribuyeron al juego de sus respectivos equipos, no así Nájera que completó 5 minutos de juego para quedarse en blanco en todos los casilleros estadísticos.

Valiosa victoria de los de Oregón frente a los de Texas basada en una gran defensa que se derivó en defender a muerte en los últimos 12 minutos. Es decir, los Trail Blazers ganaron como le gusta ganar a su técnico, Nate McMillan, echando el resto atrás... y también porque dispusieron de 26 tiros libres por sólo 9 de su rival.

Aldridge fue el mejor local con 20 puntos, 10 rebotes y 5 pases de canasta, Miller hizo 19 y 10 asistencias y Camby se fue a 17 y 11 rebotes. Mientras, Brandon Roy ejerció de líder en la sombra, más sobrio que nunca, más desprendido. Y es que lanzó a canasta tantas veces como asistencias dio (7). Y el equipo funcionó.

En cuanto a Rudy Fernández, reapareció tras su leve lesión y lo hizo más o menos bien, aunque no fuera para tirar cohetes. Ejerció de sexto hombre jugando 28 minutos y acabó con 7 puntos y 2 rebotes.

Dallas decepcionó en la medida que decepcionaron su líder, Dirk Nowitzki, que anduvo tibio, y su comodín de lujo, Jason Terry. Butler fue su mejor hombre con 25 puntos y 9 rebotes, seguido de Marion con 15. Y Barea lo hizo muy bien en los 13 minutos que jugó, ya que repartió 6 asistencias en ese poco tiempo, a las que añadió 2 puntos.

Houston 93 L.A.Clippers 99

Tremendo fiasco en el Toyota Center que hace despedirse prácticamente de la postemporada al equipo texano, donde el protagonismo recayó de nuevo, para bien y para mal, en Scola y Ariza.

Para bien porque firmaron grandes números. Ariza logró 18 puntos, 8 rebotes, 8 asistencias y 3 robos en 41 minutos y Scola en 42 se fue a 16 puntos, 14 rebotes y 3 asistencias.

Para mal porque asumieron muchos tiros y no siempre en buenas condiciones. Ariza firmó un 7 de 20 y Scola un 7 de 21 para un horrible 14 de 41 conjunto.

Los Rockets sintieron demasiado las bajas de Kevin Martin y Shane Battier, bajas que no pueden ser excusa para la derrota.

Brooks, su base, lo hizo bien -18 tantos y 9 asistencias-, pero fue incapaz de controlar a Baron Davis en los momentos decisivos.

Llegaron al final esos momentos. Los locales volvieron a la vida gracias a una canasta de Scola seguida de un triple de Ariza (86-89 a 2:03 del final), pero ahí emergió la gigantesca figura de Baron Davis, que arruinó a los de Adelman al anotar ¡7 puntos en los últimos 50 segundos!.

Fue Baron Davis (16 puntos y 8 asistencias) pieza clave visitante, como lo fue Drew Gooden (17 puntos y 14 rebotes) y especialmente un monstruoso Craig Smith, que reventó a Houston con ¡25 puntos y 10 rebotes en 26 minutos!.