JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2009-2010
Marc Gasol se impone a Brook Lopez y lidera una complicada victoria
La bocina salva a D'Antoni y arruina a Horford
Sergio Rodríguez regresa a la titularidad pero no juego la recta final
Ganaron los Grizzlies a los Nets, pero con más apuros de los previstos y gracias a un gran partido de Gasol. Pero para apurada la victoria de los Knicks sobre los Hawks (99-98) con Sergio Rodríguez de titular y Horford anotando fuera de tiempo la canasta de la victoria.
El vídeo muestra claramente como al cesta con la que Horford iba a dar al victoria a Atlanta sobre la bocina se produjo fuera de tiempo. Una pena para él, porque hubiera redondeado un gran partido (acabó con 18 puntos y 12 rebotes).
Mientras, Sergio Rodríguez fue titular, pero se mostró irregular y no jugó los minutos decisivos del partido.
El que sí jugó esos minutos y resultó crucial en la victoria de Memphis fue Marc Gasol, que dominó en la zona a Brook Lopez en un atractivo duelo.
Mientras, los Hornets se imponían a los Warriors en un duelo a la carrera con 20 asistencias del novato Darren Collison.
Memphis 107 New Jersey 101
67 a 51 se fue al descanso Memphis sin Randolph en sus filas, aquejado de molestias en la espalda.
En su ausencia, Marc Gasol absorbió el doble de juego del habitual en esa primera parte y se hizo el amo de los aros con una actuación sobresaliente en la que dejó bien claro que al más que prometedor Brook Lopez aún le queda cierto camino para alcanzar la competitividad del español.
De hecho, gran parte de esa ventaja acumulada se debió a la lección de juego que Gasol dio a Lopez, que encestó la primera canasta del partido pero luego ni vio el aro ni fue capaz de entorpecer al español en la lucha por el rebote. La comparativa entre ambos jugadores, esclarecedora al final del segundo cuarto: ¡Marc Gasol 16 puntos y 8 rebotes y Brook Lopez 3 tantos y 0 rebotes!.
Fue cuando Gasol se erigió en un gigante cuando su equipo dominó sin problemas y fue cuando menos juego recibió cuando más se creció Brook Lopez y peor le fueron las cosas a los Grizzlies. Eso ocurrió en la segunda parte.
Para empezar, el tercer cuarto se convirtió en un sonoro fracaso ofensivo de los locales, que anotaron 14 puntos y vieron como los Nets, el peor equipo de la liga, se les subía a las barbas hasta casi darles un disgusto.
Ante apenas 10.000 espectadores -infame entrada viendo la trayectoria de Memphis-, los de Vandeweghe se fueron creciendo hasta ponerse muy cerca (94-91) con 3 minutos por jugar, pero no supieron rematar. Un 2 más 1 de Gay y un mate de Carrollo colocaron el 99-91. Aunque el partido se prolongó más de la cuenta porque los Nets no dieron su brazo a torcer.
Rudy Gay y Mike Conley fueron los máximos anotadores del equipo de Tennessee, si bien Gay -que capturó 10 rebotes- volvió a las andadas, a sus peores vicios, al tirar 18 veces a canasta y no dar ni una sola asistencia.
Ellos fueron los más anotadores, que no los mejores. Porque el mejor, a pesar de su bajada de rendimiento en la segunda parte fue Marc Gasol, que acabó con 19 tantos, 13 rebotes, 3 asistencias, 2 tapones y 8 de 13 en el tiro doble. Darrell Arthur fue titular en lugar de Randolph y los suplentes aportaron mucho más de la cuenta, destacando las anotaciones de Marcus Williams, Sam Young y DeMarre Carroll.
En New Jersey, actuaciones destacadas de sus hombres bajos titulares. Courtney Lee hizo 30 puntos y Devin Harris se fue a 28. El novato Terrence Williams volvió a destacar partiendo en segunda oleada con 14 tantos, 6 rebotes y 6 asistencias. Y Brook Lopez salvó un poco sus números con 10 puntos, 7 rebotes y 6 pases de canasta.
New York 99 Atlanta 98
Al Horford, además de hacer un gran partido, pudo convertirse en el héroe visitante de la noche, pero su gloria le duró solo unos pocos segundos, los que tardaron los árbitros en ver el vídeo de la última jugada del partido y dictaminar que la canasta ganadora del dominicano había sido anotada fuera de tiempo.
Esas décimas de segundo que separaron a Horford de la gloria a la nada fueron las mismas que salvaron al técnico local Mike D'Antoni y a su elección como base final, Toney Douglas.
Porque aunque Sergio Rodríguez salió como base titular y Bill Walker como escolta titular, ni uno ni otro jugó los minutos finales como organizador del juego. Ese privilegio -ausente McGrady, que no se vistió- recayó en Toney Douglas, que no había hecho mal partido, pero que la pifió en el momento decisivo.
Ganaban los locales 99-98 cuando en el ataque neoyorquino nadie sabe qué se le pudo pasar por la cabeza a Douglas. El caso es que salió a la carrera, como pollo descabezado y sin ningún compañero a su alrededor, y terminó perdiendo una bola decisiva a 7 segundos del final (la única que perdió en todo el partido), bola que se llevó Crawford. Ahí empezó el final.
Josh Smith, partidazo el suyo, intentó anotar la canasta de la victoria, pero con 1,7 segundos por jugar Wilson Chandler le puso un fantástico tapón, el balón cayó en manos de Horford que anotó, pero su canasta estaba fuera de tiempo.
El encuentro fue una resurrección de los Knicks ante uno de los mejores equipos del Este. Y esa resurrección llegó en ausencia de McGrady, que no se vistió, ya que D'Antoni prefirió dar descanso a su maltrecho cuerpo tras los pitos que el jugador recibió en el partido anterior.
Sergio Rodríguez volvió a la titularidad y su partido resultó agridulce, como una emocionante montaña rusa. Caló el español en el público, que recibía todas sus jugadas con un ¡oh!, ya fuera para bien o para mal. Hizo algunas de las jugadas más espectaculares del encuentro y algunas de las más atolondradas por un exceso de velocidad, pero sus números quedan por debajo de lo que hizo en la pista. Acabó con 9 puntos, 3 rebotes y 4 asistencias en 23 minutos, pero perdió 6 balones, su talón de Aquiles.
El que sí estuvo fino fue Gallinari, que anotó 27 puntos. Lee hizo 19 con 13 rebotes y Harrington sumó 14.
En Atlanta, partidazo nuevamente de Al Horford, que estuvo especialmente fino en la parte inicial del partido. El caribeño terminó con 18 puntos, 12 rebotes y 3 robos en 38 minutos y fue una de las piezas claves de su equipo, que basó su juego en el acierto de sus hombres interiores. Porque Josh Smith, a pesar de ser taponado en la jugada decisiva, ofreció un juego completísimo: 25 tantos, 10 rebotes, 6 asistencias y 3 tapones.
Además, Joe Johnson sumó 22 unidades y Crawford añadió 16.
Los Knicks soportaron su nefasto balance en el control del juego -2 robos por 16 pérdidas- gracias a la tremenda diferencia que hubo entre ambos equipos en el triple: 10 de 15 los locales por 3 de 17 los visitantes. Y los locales terminaron ganando en un partido más bien defensivo, muy alejado de su corte de juego.
Partido con 266 puntos
Encuentro a la carrera, locura ofensiva en Nueva Orleans, donde los Hornets se impusieron a los Warriors por 135 a 131 para equilibrar así su balance de temporada (32-32).
El New Orleans Arena asistió a otra exhibición del joven Darren Collison. El base novato perdió 7 balones, pero anotó 16 puntos y dio ¡20 asistencias!, haciendo olvidar al lesionado Paul.
West logró 28 puntos y 13 rebotes, el suplente Thornton se fue a otros 28 pero solo en 29 minutos y Okafor añadió 22 con 11 rebotes.
En los Warriors, Reggie Williams hizo 28 puntos en su quinto partido en la NBA, ya que debutó en la liga el pasado 2 de marzo. Anthony Morrow sumó otros 28 con 6 de 6 en el triple. Y Maggette logró 18 en 22 minutos.
El partido fue una locura. Los locales anotaron el 58,7% de sus tiros, dieron 38 asistencias y dominaron el rebote (44 a 23), pero sufrieron. Y es que los visitantes no les anduvieron a la zaga: un 58,8% en el tiro de campo, incluidos 13 de 25 triples. Fue un festival ofensivo.