ALL-STAR / ALL STAR 2010
El Juego de las Estrellas bate todos los registros: 108.713 espectadores
Jamás un partido de baloncesto había reunido a tanto público
Noche histórica en Dallas, noche inolvidable para la NBA y noche que quedará en la historia del baloncesto porque jamás un partido había reunido en este deporte un número tan grande de espectadores. El Cowboys Stadium registró una entrada brutal: 108.713 personas.
Los días anteriores a esta gran apuesta de la NBA -jugar en un estadio de fútbol americano- todavía había nervios. Ya se habían vendido más de 90.000 entradas, pero la ola de frío que azotaba a Texas en esos momentos hacía pensar que más de uno preferiría quedarse en su casa, dado además que parte de las entradas se vendían a un precio muy bajo.
El caso es que, lejos de esos malos augurios, el partido de anoche rompió todas las previsiones, y lo hizo para bien.
El número de espectadores entró en el Record Guiness y por paliza. El anterior partido de baloncesto que más público había atraído fue un encuentro de la Liga Universitaria de Estados Unidos (NCAA) disputado en 2003 en Detroit. Entonces hubo 78.129 espectadores, que no es poco.
En cuanto al Partido de las Estrellas que más afición llevó a la grada, hay que remontarse a 1989 cuando, también en Texas, el Astrodome de Houston albergó a 44.735 personas.
Fiesta por todo lo alto
Nada que ver todas esas cifras con las de anoche, que batieron incluso el número de espectadores máximo registrado en un partido de la NFL en este estadio. Los Dallas Cowboys tenían ese récord en algo más de 105.000 aficionados.
La imagen del estadio era alucinante. Estamos ante un edificio de corte futurista que costó más de 1.200 millones de dólares. Anoche, esta brillante obra de arquitectura estaba además pertrechada con las pantallas de vídeo más grandes que se hayan instalado en una cancha de baloncesto. Y es que los espectadores del anfiteatro no sabemos cómo podrían ver la cancha.
El gran escenario estuvo acorde con el gran espectáculo deportivo y no deportivo que se vivió en la cancha, con actuaciones en el descanso de Shewolf, Shakira y una maravillosa Alicia Keys.
En el primer tiempo, Fisher estuvo en pista con unos niños para recordar la gran labor social que hace la liga con su programa 'NBA Cares' y durante el choque se homenajeó a jugadores que todos recordamos con cariño: 'Magic' Johnson, Chris Mullin, Scottie Pippen y Patrick Ewing.