Los Lakers consiguen su tercer triunfo consecutivo como visitantes con un gran Gasol

Los Lakers siguen engrasando su máquina en su interminable gira por el Este, que anoche cumplió su sexta etapa de las 8 que la conforman. Victoria en Filadelfia de la mano de Kobe Bryant, Pau Gasol y Ron Artest, y con la inestimable ayuda de Lamar Odom.

Los angelinos suman 3 triunfos consecutivos a domicilio en encuentro con rivales muy inferiores. Gasol volvió a presentar números de all-star (19 puntos, 10 rebotes y 5 pases de canasta) y Allen Iverson reivindicó un poco su figura tras todas las críticas que está recibiendo su inclusión en el Juego de las Estrellas.

Mientras, Washington, en duelo de colistas, ganó en East Rutherford a los Nets en un partido defensivo en el que tuvo cabida, y prolongada, Fabricio Oberto, que jugó 19 minutos. Earl Boykins decidió en el último suspiro.

En partido sin hispanos, Cleveland no dio opción alguna a Indiana.

Philadelphia 91 L.A. Lakers 99

Tercer triunfo seguido de los Lakers en su gira por el Este, en la que ya presenta un balance de 4 victorias y 2 derrotas para consolidarse como indiscutibles líderes en el Oeste.

El partido no resultó excesivamente complicado, dando la sensación de que los visitantes se guardaron algunas marchas extras por si las hubieran necesitado en algún momento. De hecho, cada vez que los Sixers se acercaron peligrosamente en el marcador los de Phil Jackson aceleraron levemente para restaurar su dominio.

Un dominio que nació en el segundo cuarto tras un primer acto de toma de contacto que acabó 18-19 y estuvo lleno de imprecisiones, pero que descubrió a un renovado Artest -llevaba varios partidos muy mal, lastrado por los problemas físicos- y mostró como el equipo californiano es capaz de ganar el parcial de un cuarto a pesar de que Kobe y Pau sumaron entre los dos 1 punto.

Tras ese primer cuarto -un período con Artest y Brand como protagonistas en positivo-, llegó el segundo, que a la postre fue el decisivo, pues en él abrieron los Lakers una distancia que ya no perderían. Y en ese cuarto hubo un hombre por encima de todos: Pau Gasol.

El español hizo un cuarto espléndido con 10 puntos, 3 rebotes, 1 tapón, 4 de 4 en el tiro y ¡5 asistencias!. Ese elevadísimo número de pases de canasta, más para un 7 pies, fue la mejor prueba de lo bien que funcionó en esos momentos el triángulo ofensivo de Phil Jackson. Y los Lakers tomaron esa decena de puntos de ventaja que siempre da aire para irse al descanso con un tranquilizador 42-51 con Gasol, Artest y Odom como figuras del equipo, pues Bryant se fue a los vestuarios con 2 puntos y 1 de 7 en el tiro.

Kobe estaba guardando fuerzas, pero a punto estuvo de dejar huérfano a su equipo en una jugada en la que se palpó la lesión. El escolta, que jugaba en su ciudad natal, se torció la pierna al inicio del tercer cuarto de forma fortuita -en un golpe con un rival- y se le giró la rodilla. La imagen tenía mala pinta. Se paró el juego y el jugador se echó mano a la rodilla, Gasol se acercó preocupado y en el banquillo de los Lakers cundió cierto desánimo... pero afortunadamente todo quedó en un susto y Bryant anotó ¡22 puntos en la segunda mitad!.

El tercer cuarto fue una montaña rusa. Los visitantes tomaron su máxima ventaja (42-58), pero entonces irrumpió en la fiesta Allen Iverson para intentar acallar a sus críticos y situó a su equipo en el encuentro. De hecho, los Sixers se llegaron a colocar a 3 puntos (67-70) casi al final del cuarto. Pero fue un espejismo.

Los Lakers volvieron a acelerar el encuentro, subieron su nivel y todo el último cuarto fue de dominio angelino y control absoluto aunque las diferencias no se dispararan.

Bryant terminó con 24 puntos, Gasol sumó 19 con 10 rebotes, 5 asistencias y 2 robos -ambos jugaron 40 minutos-, Artest añadió 18 tantos y Odom disputó más minutos que un gris Bynum y concluyó con 13 tantos, 9 rebotes y 4 asistencias, ayudando mucho en el terreno defensivo.

En los Sixers, Iverson anotó 23 y Brand hizo 19 con 9 rebotes, mientras que Dalembert se quedó en 10 con 12 capturas bajo los aros. Iguodala, mientras, sigue acumulando minutos de juego y perdiendo presencia ofensiva según mejora Iverson y asciende Brand.

New Jersey 79 Washington 81

El hombre menos visible en la cancha, el más bajito, Earl Boykins (apodado 'Lentejita' por el gran Montes), fue el que se hizo más visible a la conclusión del partido. Porque un tiro suyo desde cerca de 5 metros de distancia cuando restaban 4 décimas para el final del choque decidió la partida.

Hasta ese instante final, marcado por las décimas, los depauperados Nets habían alimentado la esperanza de sumar 2 triunfos consecutivos, pues venían de ganar a los Clippers, pero no fue posible. Y eso que la canasta del empate de Brook Lopez (79-79 a 13 segundos del final) había puesto la miel en la boca de los pocos aficionados que se dieron cita en el IZOD Center.

El partido estuvo marcado por la emoción... y el mal juego. Porque el encuentro, bonito bonito no fue. La espesura fue considerable en el ataque (32-35 en la segunda parte con un parcial de 13 a 18 en el último período). Y es que anotando 13 puntos en los últimos 12 minutos poco se puede esperar en la vida.

No sorprendió el bajo nivel de juego, pues estamos hablando de dos equipos que acumulan 19 partidos ganados tras 71 en disputa. Y el menos malo se llevó el gato al agua.

Lo hizo gracias a la fuerza de su suplencia, que anotó más puntos que un quinteto titular en el que ni Jamison, ni Butler, ni Miller (al menos reboteó), ni Foye, ni Haywood alcanzaron de forma individual los 10 puntos.

Sí funcionaron, en cambio, suplentes como el héroe Boykins -15 tantos-, Blatche -14- o Nick Young -10-. Y en esa segunda unidad decisiva estuvo Oberto, que se fue hasta los 19 minutos para desarrollar una gran labor defensiva aunque sus estadísticas fueran pobres: 2 puntos, 2 tapones y 1 asistencias, pues no capturó en casi 20 minutos ni un solo rebote. E hizo 6 faltas personales.

En los Nets, destacar a un renacido Courtney Lee -19 puntos- y a Brook Lopez -17, 8 rebotes y 4 tapones-. Y pare usted de contar.

Cleveland gana fácil

Partido sin historia desde el inicio en el Conseco Fieldhouse, donde Cleveland derrotó a Indiana (73-94) con extrema facilidad a base de defensa y de dejar todo muy clarito desde un principio.

Porque el primer cuarto fue demoledor (18-36) con los gigantes O'Neal e Ilgauskas marcando las distancias al arrasar en la pintura con 16 puntos, casi tantos como todos los que sumaron los Pacers.

El dúo LeBron James-Shaquille O'Neal fue demoledor. LeBron rozó el triple-doble con 22 tantos, 9 rebotes y 13 asistencias, a los que añadió 4 tapones, aunque no estuvo fino en el tiro; Shaq hizo su mejor actuación de la temporada: 22 puntos y 8 rebotes en 25 minutos. E Ilgauskas ayudó con 13 tantos en 20 minutos, colaborando en que no se notara otra vez la ausencia de los bases Mo Williams y Delonte West.

Los Pacers, muy mal. Un 33,7% de acierto en el tiro y ¡9 puntos en todo el último cuarto!. El equipo sólo lanzó 5 tiros libres por 44 del rival, que estuvo especialmente desacertado en esta faceta al solo anotar 23. Danny Granger fue el mejor entre los malos con 13 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias, aunque erró 17 de los 23 tiros que intentó.