Derrotas de muy distinto signo de Portland y Milwaukee

Derrotas de muy distinto rango las sufridas en la última jornada de la NBA por Portland y Milwaukee. Mientras que los Blazers nunca fueron rival para Utah, los Bucks plantaron cara a Orlando hasta el último suspiro. Rudy Fernández y Carlos Delfino cumplieron.

No es que los internacionales español y argentino tuvieran una gran noche, pero al menos no desentonaron como otros compañeros y terminaron sus actuaciones con una indiscutible dignidad, exenta, eso sí, de la brillantez que ambos pueden alcanzar.

Mientras, Fabricio Oberto tuvo un protagonismo más que residual en la derrota de su equipo, Washington, ante unos cada vez más conjuntados Charlotte.

Utah 108 Portland 92

Todo empezó mal para el equipo de Rudy en Salt Lake City. Y es que el 32-17 del primer cuarto fue una auténtica losa para los chicos de Nate McMillan, que ya no levantaron cabeza, se fueron al descanso con esos mismos 15 puntos de desventaja y afrontaron el inicio del cuarto final ya con 22 abajo y sin ánimo para nada.

Segunda derrota consecutiva para los Blazers y segundo encuentro seguido experimentando las consecuencias de su mal juego. Los de Oregón volvieron a defender mal, y eso es noticia en uno de los mejores equipos de la NBA en esta faceta, y fracasaron desde el perímetro (3 de 18 en el triple). Además, el esfuerzo infructuoso del día anterior para intentar remontar a Memphis les pasó factura en este partido, ya que se vio a un equipo cansado.

Frente a ese panorama desolador se situaron unos Jazz que practicaron un juego refrescante basado en dos pilares ofensivos de primer nivel: Carlos Boozer y Deron Williams.

Boozer y Williams no tuvieron oponentes y su juego fue más que fantástico. Boozer aportó al triunfo 26 puntos, 12 rebotes y 7 asistencias y Williams hizo 24 tantos, 15 asistencias y 6 rebotes. Casi nada... y entre los 2 encestaron 21 de sus 32 intentos de canasta.

Este esplendoroso dúo hizo que el resto de compañeros sólo tuviera que ejercer de digno complemento, y así fue. Los Jazz anotaron el 60,6% de sus tiros, con 7 de 12 triples, e hicieron un monumento al pase extra al ser capaces de asistir ¡36 de sus 43 canastas!.

Con esas 36 asistencias, récord del equipo esta temporada, y ese acierto en el lanzamiento, poco importó el desacierto en los tiros libres -15 de 27-. Se trató de un lujo al alcance de los chicos de Sloan, que llegaron a dominar por 27 puntos y sumaron su quinta victoria en los últimos 6 partidos.

En Portland, mientras, nadie sobresalió, pero al menos unos tuvieron más orgullo que otros. El que mejor salvó un mal partido fue Roy, que acabó con 19 puntos. Tras él se situaron Aldridge -14 en un discreto encuentro- y Bayless -también 14, pero en sólo 22 minutos-. Y el cuarto en anotación fue un Rudy Fernández, que jugó más minutos que los habituales a costa de Andre Miller.

El mallorquín, en otro partido triste para él, logró al menos salvar los muebles: 11 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias en 32 minutos, aunque anduvo poco fino en el disparo a cesta -3 de 10-.

Milwaukee 98 Orlando 100

Muy distinta fue la derrota de Milwaukee ante un rival teóricamente muy superior, Orlando. Muy distinta porque los Bucks pelearon con fiereza hasta el final a pesar de que tuvieron que prescindir durante todo el partido de Michael Redd, que no parece recuperarse de su lesión.

Ante la falta de Redd, ausente Bogut y con Jennings en un mal día en el tiro, otros asumieron la responsabilidad, siendo un trío el que llevó el partido igualado hasta el final, un trío comandado por un espléndido Ersan Ilyasova, bien escoltado por Ridnour y Warrick.

El jugador turco, ex del Barcelona, brilló con luz propia. Fue titular y aprovechó al máximo sus minutos al anotar 20 puntos y capturar 16 rebotes. Ridnour hizo otros 20 puntos, con 6 asistencias, y Warrick logró 16 en 22 minutos.

Mientras, Jennings hacía 18 tantos, pero con la irregularidad por bandera; capaz de anotar 4 de 7 triples y sólo 3 de 15 en el tiro de 2. Y Delfino cumplía sin ofrecer lo mejor de sí: 9 puntos, 3 rebotes, 2 tapones y 2 robos en 29 minutos.

Pero enfrente había 2 bestias (Howard y Carter), que al final fueron 3 con la inclusión de Lewis en la resolución del partido.

Dwight Howard resultó simplemente imparable y completó un doble veinte (25 puntos, 20 rebotes y 4 tapones). Mientras que Vince Carter ejerció de héroe clásico. En la primera parte recibió un codazo en la cara, se tuvo que ir al vestuario, le cosieron la boca (4 puntos en el labio) y a su vuelta triunfó, pues 19 de los 25 puntos que hizo los consiguió en la segunda parte.

Jason Williams aportó 12 puntos y 10 rebotes, pero el tercer hombre fue Rashard Lewis (14 puntos y 9 rebotes), ya que resultó decisivo al final. Suya fue la canasta que cerró el marcador a 44 segundos de la conclusión y suyo, el rebote defensivo con la que concluyó la jugada siguiente tras un triple errado por Ilyasova y un tiro a media distancia igualmente errado de Ridnour.

Luego llegó la jugada final, que tuvo su miga. Con 98-100 en el marcador, Carter tuvo que tirar faltando 6 segundos para el final y ese rebote definitivo pareció no tener dueño. Fue una titánica lucha de Howard contra todos que hizo que se perdieran todos los segundos con el balón vivo yendo de un lugar a otro. Esa lucha final de 'Superman' valió el partido. Y Orlando se coloca ya con 13-4 en la clasificación.

Washington 76 Charlotte 92

Paso firme, y cada vez más, el que han adquirido estos Bobcats de Larry Brown, que ganaron su 4 partido consecutivo gracias a todo un 'clinic' defensivo que dejó a su rival en 50 puntos en los 3 primeros cuartos (50-69).

Ese monumento a la defensa dejó a los Wizards en un 38,5% en el tiro y anuló por completo al dúo Arenas-Butler, que sumó 12 puntos (6 cada jugador) tras sólo encestar en conjunto 5 de sus 20 lanzamientos.

Anulados Arenas y Butler, a Washington le quedó poco. Antawn Jamison (19 puntos) y poco más. Un auténtico erial ofensivo en el que Fabricio Oberto tuvo una presencia testimonial, 5 minutos de juego en los que no encaró el aro y capturó 2 rebotes. Está claro que la vuelta de Jamison, en la posición de 4, ha cerrado todas las puertas al argentino en el quinteto inicial y le ha restado muchos minutos. El quinteto por arriba, integrado por Butler-Jamison-Haywood, parece inamovible.

Charlotte jugó de forma colectiva en los dos lados de la cancha, y si trabajó solidariamente en defensa, no lo hizo menos en ataque.

Hasta 6 jugadores sumaron dobles figuras con Gerald Wallace como líder (14 puntos y 14 rebotes para un jugador que siempre fue buen reboteador, pero que este año es una bestia). Tras él, un trío de compañeros se fue a 12 puntos, el integrado por Chandler, Felton y Mohammed -éste último en tan solo 12 minutos-.