JORNADA NBA / TEMPORADA 2009-2010
Ginóbili destroza a Toronto con 36 puntos y 8 asistencias
Buen partido de Calderón, que perdió el ritmo por las personales
Utah gana en el Madison con un gran Kirilenko
La bestia ha vuelto. El mejor Ginóbili ha regresado para quedarse. El momento elegido resultó de lo más oportuno. Los Spurs tenían las bajas de Parker y Duncan, pero Ginóbili se encargó de destrozar a los Raptors de Calderón con una actuación prodigiosa que el AT & T Center no olvidará.
Manu está de nuevo entre nosotros. Sus números apabullantes: 36 puntos, 8 asistencias, 4 tapones y 4 rebotes en 32 minutos de juego. Su dominio de la cancha, incontestable. Su capacidad de decisión, total. Y los Toronto de un buen Calderón -13 puntos y 9 asistencias- se fueron de Texas sin una victoria que tuvieron a mano.
Mientras, en partido sin hispanos, Utah hundía un poco más a los Knicks al ganar en el Madison por escaso margen. Los Jazz no vencían en Nueva York desde 2004.
San Antonio 131 Toronto 124
Los Spurs se impusieron en un partido alegre, ofensivo, igualado y vibrante. Un encuentro que fue el sueño de cualquier espectador y la pesadilla de cualquier entrenador, porque doloroso para cualquier técnico y también para los aficionados más avezados resultó la permisividad defensiva exhibida por ambos equipos.
Al final, el triunfo sonrió al equipo que más lo mereció. Porque meritorio resulta ganar un partido cuando se tiene vestido de calle a Tony Parker y Tim Duncan. Son palabras mayores que Manu Ginóbili convirtió en menores de un plumazo. Y eso que el argentino erró sus 4 primeros lanzamientos a canasta.
Alegrón para los buenos aficionados al baloncesto este regreso al más alto nivel del de Bahía Blanca, que supo hacer de base cuando su equipo lo requirió (7 asistencias en la primera mitad en la que fue clave en remontar 10 puntos de desventaja) y supo ejercer de killer cuando llegó el momento (23 puntos en la segunda parte).
Suyos fueron 2 de los 3 triples que definieron el partido en la recta final del choque, aunque los locales terminaran complicándose la victoria de mala manera. De hecho, Popovich retiró a Manu a 1:27 del final (125-112) ante la ovación descomunal del público, pero tuvo que devolverle a la cancha 23 segundos después ante el desbarajuste de su compañeros.
Vimos a un Ginóbili rápido de piernas, ágil de mente, presto de espíritu. Un Ginóbili que calentó el solito a la grada y que tuvo la templanza de las grandes ocasiones para saber aposentar la cabeza en plena borrachera de juego. Su estadística fue demoledora: sumó 43 de valoración en 32 minutos tras hacer 36 puntos, 8 asistencias, 4 agresivos tapones y 4 rebotes. Anotó 6 de 8 en el triple y 14 de 16 en el tiro libre. Fue el indiscutible dueño de la noche.
Pero no estuvo solo. Junto a él bregaron con notable éxito Richard Jefferson (24 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias), George Hill (base titular que puso en problemas a Calderón con 22 puntos y un notable uno contra uno) y un grandísimo Bonner desde la segunda unidad, que hizo 18 puntos y resultó decisivo en el tramo final.
También ayudaron McDyess y el novato Blair, aunque a éste las personales terminaron por arruinarle la jornada.
Como las personales estuvieron en el punto de partida de la bajada de rendimiento en la segunda mitad del español Calderón. El base extremeño se fue al descanso con 9 puntos y 6 asistencias, pero cuando no habían transcurrido 5 minutos del tercer cuarto cometió su cuarta personal tras señalarle los árbitros 2 faltas seguidas de dudoso rango. A partir de ahí, tuvo que estar bastantes minutos en la banda, terminando el encuentro con 13 tantos, 9 asistencias y muy buenos porcentajes de tiro, aunque fallara otra vez 1 tiro libre.
Resulta difícil de explicar, pero estos Raptors perdieron anotando el 59,2% de sus tiros de campo y la friolera de 11 de sus 17 intentos triples (un 64,7%), una faceta en la que tampoco anduvieron mancos los Spurs (14 de 28), que dominaron el rebote y sólo perdieron 6 balones en toda la noche.
Perdieron así los canadienses una ocasión única para vencer en San Antonio. Lo intentaron Bosh (32 puntos y 10 rebotes), Turkoglu -20 tantos-, Bargnani -17- y dos excelentes suplentes, Amir Johnson y el italiano Belinelli, que terminó con 12 puntos en 17 minutos tras anotar 4 triples sin fallo.
Al final, Duncan sonrió. No tanto por la victoria como por haber comprobado que su compañero más competitivo, Ginóbili, había vuelto a la vida en su máximo esplendor. Y esa es una sobresaliente noticia para estos Spurs.
Utah gana en Nueva York
Los Knicks lo intentaron, pero siguen en el fondo del pozo con una sola victoria en este principio de temporada. Aunque esta vez se quedaron muy cerca (93-95).
Se quedaron al borde del éxito gracias a un gran último cuarto en el que con un parcial de 29-17 estuvieron a punto de protagonizar una remontada casi imposible en un partido que llegaron a perder por 21.
Los Jazz no ganaban en el Madison desde 2004. Para lograrlo tuvieron que recuperar al mejor Andrei Kirilenko. El ruso convenció por fin a Sloan con una actuación estelar que se saldó con 23 puntos, 6 rebotes, 6 asistencias y un gran acierto desde el triple -5 de 8-. Kirilenko fue la pieza clave del triunfo junto a Boozer (23 tantos y 14 rebotes), el buen reparto de juego de Deron Williams -16 asistencias- y el gran quehacer del turco Okur (18 y 12).
Precisamente Okur fue el autor de la última canasta del partido a 1:16 del final. El último minuto fue un catálogo de errores culminado por Toney Douglas, que erró la canasta del empate, aunque el novato tenía todo el perdón del mundo, pues fue el mejor local con 21 puntos en 23 minutos de participación. Sólo Wilson Chandler -17 tantos y 10 rebotes- le siguió el juego.