Milwaukee derrota a Boston y Memphis gana en Detroit

Milwaukee Bucks y Memphis Grizzlies dieron la campanada en la última jornada de la NBA. Los de Wisconsin se impusieron en casa a Boston Celtics, los de Tennessee lo hicieron fuera ante Detroit Pistons. Los 2 partidos tuvieron como denominador común su corte defensivo.

En el Bradley Center emergió la figura del jugador de origen dominicano Charlie Villanueva. Lo hizo en el último cuarto, donde Villanueva anotó 11 de los 21 puntos de los Bucks para llevarles a la victoria ante los actuales campeones.

En Detroit, Marc Gasol anotó 11 puntos, atrapó 7 rebotes y repartió 4 asistencias, aunque el verdadero protagonista fue Darko Milicic, un hombre que tenía una cuenta pendiente con los Pistons, una cuenta que saldó parcialmente en la matinal del domingo al endosar 12 puntos y 11 rebotes en 20 minutos a su ex equipo. Mientras, el argentino Walter Herrmann no pisó la cancha.

Milwaukee 86 Boston 77

Satisfacción de las grandes la que recibieron en jornada dominical los más de 18.000 espectadores que se dieron cita en el Bradley Center para ver al actual campeón de la NBA, los Celtics de Boston.

Y es que lo que nadie podía esperar era que estos Bucks sin Redd y sin Bogut fueran capaces de doblegar a los célticos, por mucho que los bostonianos anden por la liga sin Garnett, Davis, Scalabrine o Tony Allen.

Pues sucedió. Sucedió que el pez chico se comió al grande y lo hizo con todas las de la ley, haciendo probar a Boston su propia medicina, la defensa.

La defensa local ahogó a la ofensiva visitante hasta tal punto que sólo hubo un hombre verdaderamente acertado en ataque. Si Leon Powe brillaba esta misma semana con un partido de 30 puntos y 11 rebotes, esta vez le tocó brillar a Kendrick Perkins, que acabó con 26 puntos y 12 rebotes. Lo malo para su equipo es que tras el pívot no hubo nadie, porque a Doc Rivers le fallaron sus cabezas de cartel.

Paul Pierce, Ray Allen y Rajon Rondo se coordinaron perfectamente para completar un partido para olvidar. Fue una alineación planetaria desastrosa para los intereses célticos, que hicieron su peor anotación de la temporada en vísperas del Día de San Patricio, que se celebra el 17 de marzo. Todo un desastre.

Esa conjunción planetaria de desastrosas consecuencias tuvo números, números que duelen. Pierce hizo 15 puntos y 11 rebotes, pero bajo el brillo de esas cifras se escondieron otras de muy distinta naturaleza: 3 puntos en la segunda parte, 0 asistencias y 7 pérdidas de balón y 4 de 15 en el tiro de campo en el partido. Ray Allen se fue del Bradley Center con 2 de 11 lanzamientos para 8 puntos y Rajon Rondo hizo un gran papel en asistencias (8), rebotes (7) y robos de balón (3), pero se perdió en la ofensiva con 2 de 10 en el tiro para anotar 5 unidades. El resultado, obviamente, fue descorazonador para los Celtics.

Sería, sin embargo, muy injusto hablar del tremendo demérito de los visitantes sin mencionar el notabilísimo mérito de los locales. El equipo de Scott Skiles defendió como pocas veces lo ha hecho y fue capaz de ganar el partido anotando el ¡32,6% de sus tiros!, lo que habla muy bien de su labor defensiva y muy mal del partido en general, que fue más bien malo tirando a muy malo.

Entre toda esa vorágine de errores, hubo algunos jugadores que emergieron de ese tono gris para darle un poco de color al encuentro. El principal animador fue el dominicano de Queens Charlie Villanueva, que tras una primera parte muy discreta (4 puntos), hizo una segunda parte espectacular (15 tantos, 11 de ellos en el último cuarto). Su papel resultó crucial porque esos 11 puntos en el último cuarto saben a muchos más en un partido de tan corto marcador como éste. De hecho, Villanueva anotó 11 puntos de los 21 que hizo su equipo en el último período y enchufó casi tanto como todo el equipo de los Celtics, que sólo logró 14 puntos en los últimos 12 minutos.

El jugador hispano concluyó el choque con 19 puntos y 7 rebotes a pesar de sólo haber podido jugar 25 minutos a causa de las faltas personales. Cometió 6 y fue eliminado a 4:06 del final. Un serio contratiempo que su equipo supo afrontar.

Porque el partido, igualado, necesitaba un liquidador, y ese liquidador, a falta de Villanueva, fue Charlie Bell. El ex jugador de la Liga ACB española decidió con 1 tiro libre y 1 triple que colocaron un 84-77 inalcanzable para Boston, que fue incapaz de anotar en los últimos 3 minutos de juego tras haber tirado por la borda el partido a base de constantes pérdidas de balón y un nulo juego de perímetro.

Los números:

• Milwaukee: Villanueva 19 pt y 7 reb en 25 min; Jefferson 17 pt (6 de 19 tc); Mbah a Moute 15 pt y 7 reb (4 de 11 tc); Bogans 12 reb.
• Boston: Perkins 26 pt y 12 reb; Pierce 15 pt y 11 reb (4 de 15 tc y 7 per).
• Los Celtics perdieron 25 balones y sólo anotaron 1 triple en todo el partido (1 de 12), terminando con su más baja puntuación de la temporada.
• Hubo muchos rebotes ofensivos (36) y muchas faltas personales (57).
• Los locales anotaron un 32,6% de sus tiros de campo y los visitantes un 37,7.
• Pierce, Allen y Rondo encestaron 8 de sus 36 lanzamientos a canasta.

Detroit 84 Memphis 89

Si monumental fue la sorpresa en Milwaukee, no lo fue menos en Detroit, donde los Pistons cayeron ante Memphis Grizzlies, uno de los peores equipos de la competición.

El sorpresón pilló desprevenidos a los aficionados que llenaron, como es costumbre, The Palace of Auburn Hills en una mañana muy especial. Se trataba del primer partido de los Pistons tras el fallecimiento de su propietario, Bill Davidson, por el que se guardó antes de iniciar el encuentro un emocionado minuto de silencio.

Esos mismos aficionados se sentaron en sus asientos tras ese minuto de tributo a Davidson convencidos de que la victoria no se podía escapar del estado de Michigan, pero se escapó de forma incomprensible.

Como Milwaukee, Memphis basó su triunfo en la defensa y en imponerse como el menos malo de los contendientes, si bien el nivel de acierto en este partido fue bastante superior al que se vio en la Ciudad de la Cerveza. Lo hizo aprovechando el impulso de una sobresaliente primera parte que dio paso más tarde a una deficiente segunda. Pero les bastó con eso.

La primera mitad de los Grizzlies resultó espectacular. Los de Hollins se fueron a los vestuarios con un 40-57 increíble que dejó perplejos a todos. Al descanso, Conley había anotado los 3 triples que había intentado, Marc Gasol había dado 4 asistencias, Rudy Gay se había comportado más generosamente que nunca (3 pases de canasta) y Darko Milicic había comenzado su particular reivindicación.

Porque si algo fue destacable en Detroit fue la omnipresencia de Milicic en los 20 minutos que estuvo en pista. El jugador serbio tenía una cuenta pendiente con su ex equipo y esta vez logró poner su primera muesca en su revólver: 12 puntos, 11 rebotes y 3 asistencias en esos 20 minutos. Fue el mejor de los Grizzlies junto a Mike Conley, que se comió a Rodney Stuckey y acabó con 20 puntos, siendo fundamental en la parte final y haciendo olvidar que sólo repartió 3 asistencias mientras perdía 7 balones.

También destacó Marc Gasol, pero a su manera. Lo hizo aportando al equipo una sobriedad en el juego que le falta a la mayoría de sus miembros. Terminó con 11 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias y 2 tapones en 36 minutos de juego, si bien no estuvo fino en la definición de las jugadas (3 de 9 tiros de 2).

Frente a este juego solidario tan impropio de Memphis, emergió en el rival una sensación de urgencia que pesó como una losa en los de Michael Curry, que tuvieron a su mejor hombre en McDyess -19 puntos y 12 rebotes- y que volvieron a contar con la espectacular generosidad de un desacertado Hamilton -12 asistencias tras dar en el partido anterior 16-. Los demás fueron carne de patíbulo (no Walter Herrmann, que ni siquiera jugó), salvo los suplentes Kwame Brown (13 rebotes y 5 robos) y Will Bynum (12 puntos y 6 asistencias) que depararon una agradable sorpresa.

Lo que no fue agradable fue la forma de perder y el rival contra el que se perdió. Más que nada porque Memphis demostró en la segunda parte lo mucho que le cuesta ganar a este equipo, que esta vez contó con la peor versión de Mayo. De los 57 puntos anotados en la primera mitad pasó a anotar 32 en la segunda y de los 21 puntos de ventaja pasó casi a pedir la hora para no perder el encuentro. Algo que no sucedió gracias a la sangre fría de Conley y Quinton Ross, que decidieron el partido desde la línea de personal en unos últimos segundos en los que las decisiones ofensivas fueron más bien deficientes.

Los números:

• Detroit: McDyess 19 pt y 12 reb (8 de 10 tc); Prince 15 pt; Hamilton 14 pt y 12 as (6 de 19 tc); Brown 13 reb y 5 rob en 26 min.
• Memphis: Conley 20 pt (3 as y 7 per); Gay 15 pt (6 de 18 tc); Milicic 12 pt, 11 reb y 3 tp en 20 min; Gasol 11 pt, 7 reb y 4 as.
• Detroit sólo tiró 4 veces desde más allá del arco.