Kobe Bryant guía a los Lakers a una nueva victoria tras anotar 36 puntos

Los Lakers siguen a lo suyo, y ese a lo suyo se traduce en victorias. Anoche, nuevo triunfo a domicilio, esta vez en Oklahoma City de la mano de un inspiradísimo Kobe Bryant en un encuentro que deparó buenas actuaciones de Pau Gasol y Trevor Ariza.

El mayor de los Gasol tuvo que jugar nuevamente una minutada -42- y finalizó el choque con 14 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias, siendo el más importante escudero de Bryant (36 puntos, 26 en la segunda parte). Mientras, Ariza permaneció en juego 20 minutos en los que anotó 8 puntos y robó 2 balones.

Peor le fueron las cosas al mediano de los Gasol. No es que su partido fuera malo (acabó con 9 puntos, 9 rebotes y 2 tapones), ni mucho menos. La cuestión fue que el encuentro parecía de antemano un imposible y en la práctica lo fue. Cleveland se impuso de principio a fin a Memphis, que nunca tuvo opción alguna de pelear por el partido.

Oklahoma City 93 L.A.Lakers 107

Suma y sigue. Los Angeles Lakers no bajan el pistón y ya se enfrenten a equipos grandes, a equipos chicos, a situaciones adversas o a relajaciones propias, terminan cada noche en el mismo escenario, el del triunfo. Y ya suman 47 victorias por solo 10 derrotas.

No fue una excepción su visita al Ford Center de Oklahoma City, donde los angelinos eran claros favoritos y cumplieron, no sin tener que trabajarse la victoria a pesar de que empezaron a toda máquina (2-10), vivieron un cómodo y feliz primer cuarto (22-32) con un gran Pau Gasol, que dio 5 asistencias en los primeros 12 minutos, y llegaron a marcharse en el segundo período por 18 puntos (29-47) gracias al buen quehacer de los suplentes.

Esos dos primeros cuartos fueron prueba del momento dulce que vive el conjunto californiano, que se fue a los vestuarios con un marcador tranquilo (44-56), más aún teniendo en cuenta que Kobe Bryant, Pau Gasol y Lamar Odom no habían dado de sí todo lo que llevan dentro en el capítulo ofensivo, que Durant estaba en plena efervescencia -19 puntos- y que el rebote era de los locales. Eso sí, los Lakers se fueron a vestuarios con un 56% en el tiro de campo.

Pero estos Lakers no gustan de resolver los partidos por la vía rápida y echarse a descansar, lo que les puede costar un disgusto a largo plazo (Gasol jugó anoche otros 42 minutos). Y ese escaso gusto por la definición salvaje les costó a los visitantes otro susto de los suyos. Se relajaron y la ventaja de 18 puntos que llegaron a amasar en el segundo cuarto se redujo a 1 (74-75) ya en el último cuarto tras sendas canastas de Krstic y Collison, que hicieron una buena labor defensiva toda la noche sobre Pau Gasol.

Fue en ese delicado momento cuando surgió la intensidad de Trevor Ariza, que protagonizó dos jugadones impresionantes para dar un poco de aire a su equipo. El primero fue una remontada por línea de fondo con espectacular entrada a canasta ante Collison; el segundo, un robo de balón en cancha propia que se resolvió con una carrera celérica hacia el aro, Collison golpeó en el aire a Ariza y éste anotó la canasta de forma inverosímil y no se sabe cómo se sacó de la chistera un 2 más 1.

Esas dos jugadas sirvieron de acicate para el resto de sus compañeros, pero no fue hasta que volvió a la cancha Kobe Bryant a 9 minutos del final cuando empezaron a resolverse todas las ecuaciones del partido, y el matemático que las resolvió fue la estrella visitante. Kobe anotó nada más salir del banquillo. Primer balón en sus manos, primer tiro, primera canasta. Fue el preludio de otra fantástica exhibición del jugador de Filadelfia, que hizo 15 puntos en esos últimos 9 minutos para sumar 26 en la segunda parte e irse a 36 en el cómputo global de la noche. Su inmenso trabajo, que a punto estuvo de truncarse en la recta final por una mala caída, lo remató con un par de canastitas Derek Fisher, canastas que fueron la puntilla para los Thunder.

Los Lakers fueron capaces de dominar un partido en el que no existieron en el rebote ofensivo y en el que ni Gasol ni Odom brillaron especialmente en la anotación. A pesar de ello, el español fue el segundo mejor jugador de los Lakers con 14 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias, aunque no destacó en el tiro (4 de 11) y Odom terminó con 8 puntos y 8 rebotes que no hacen justicia a la presencia real que tuvo en la pista. Fisher y Farmar formaron una buena pareja en la organización, Walton firmó otro serio partido y Ariza estuvo bien en los 20 minutos que jugó (8 puntos con 4 de 7 en el tiro y 2 robos).

En el bando contrario, Kevin Durant fue de largo el mejor con 32 puntos, 10 rebotes y 6 asistencias, la sorpresa positiva vino de la mano de Kyle Weaver (16 puntos) y la negativa de Jeff Green (10 puntos con 4 de 14 en el tiro). Nenad Krstic y Thabo Sefolosha, dos adquisiciones con la temporada ya iniciada, fueron titulares.

Los números:

• Oklahoma City: Durant 32 pt, 10 reb, 6 as y 3 rob; Weaver 16 pt en 23 min.
• Lakers: Bryant 36 pt; Gasol 14 pt, 8 reb y 6 as.
• Kobe Bryant se sitúa ya como el decimonoveno máximo anotador de la historia de la NBA tras superar a Adrian Dantley.
• Los árbitros pitaron una falta flagrante a Walton tras propinar un peligrosísimo golpe en el aire en el tercer cuarto a Russell Westbrook.
• De los 36 rebotes registrados en el tablero local, 33 fueron para los Thunder y sólo 3 para los Lakers.

Cleveland 94 Memphis 79

Los Grizzlies consiguieron irse del Quicken Loans Arena con un resultado digno porque así lo quiso Cleveland, ya que el partido no tuvo historia alguna, se decidió en los primeros minutos y cumplió a rajatabla todos los pronósticos, puesto que se enfrentaban el mejor equipo local de la liga contra un conjunto que fuera de su FedExForum es una calamidad.

Pronto se pudo comprobar que Memphis no sería rival de cuidado para LeBron James y compañía. Un 12-4 inicial sentó ya las bases de una dinámica de partido que no varió un ápice en los 48 minutos de juego. La agerrida y coordinada defensa local dejó en evidencia las escasas luces del ataque visitante desde el salto inicial. Y tras un primer cuarto de dominio de los Cavs sin paliativos se vivió un segundo cuarto con los mismos ingredientes, lo que llevó a la mesa un plato bien previsto: 58-36 al descanso.

En esos primeros 24 minutos, el máximo anotador de los Cavs no tuvo ni siquiera que ser James. Un suplente de lujo, Daniel Gibson, ocupó ese lugar de privilegio con 12 tantos. Fueron dos cuartos totalmente descafeinados en los que sólo surgieron chispas, y de las buenas, en el duelo entre Marc Gasol y Zydrunas Ilgauskas, puro espectáculo de brega. Se 'pegaron' los dos gigantes en la zona de modo entusiasta, una lucha feroz cuerpo a cuerpo que tuvo su aquél.

Por lo demás, al ecuador ya se veía que Mayo no era Mayo y que nadie en los Grizzlies era capaz de saltarse el guión trazado desde el banquillo por Mike Brown. El dominio en los tableros de los de Ohio era brutal (24 rebotes a 11 en el descanso) y especialmente llamativa era la estadística de los tiros libres, lo que demuestra la agresividad ofensiva de uno y otro equipo: los Cavaliers habían lanzado 21 tiros libres y los Grizzlies sólo 4, todos de la mano de Gasol.

El resto del partido fue simplemente un dejarse llevar. Ambos conjuntos se acoplaron a los 20 puntos de diferencia y entorno a esa veintena de distancia se movieron. La máxima fue de 26 y Memphis terminó endulzando un poco el marcador en los últimos minutos.

Que la ofensiva visitante nunca se sintió cómoda, es un hecho constatable. Ni un solo jugador del equipo de Tennessee fue capaz de brillar en ataque. Y es que los máximos anotadores de Memphis fueron anoche Gay y Warrick, ambos con una muy pobre producción de 13 unidades. La quinta derrota consecutiva de los Grizzlies estaba servida.

Tan cómoda fue la velada, que Cleveland ni siquiera precisó de su mejor LeBron James. La megaestrella local estuvo en tono menor, a pesar de lo cual hizo 15 puntos y 8 pases de canasta en media hora de juego. Mike Brown ni siquiera tuvo que requerir sus servicios en el último cuarto, en el que LeBron estuvo sentado con suma placidez en el banquillo.

Gibson fue el mejor local con 19 puntos, seguido de Mo Williams, que aportó 18 a un equipo que nuevamente no pudo contar con Delonte West. Había regresado West de su lesión de muñeca de forma triunfal, pero su regreso sólo ha durado 1 partido al sentir dolor en la muñeca lesionada. Su relevo en el quinteto inicial lo tomó un ex de Memphis, Terence Kinsey, un jugador que no tuvo ningún predicamento en los Grizzlies y que ayer jugó con uno de los mejores equipos de la NBA 27 minutos para anotar 11 puntos. El otro ex de Memphis que milita en los Cavs, Lorenzen Wrigth (que además es de Memphis), no tuvo tanta suerte, no saltando a la cancha en toda la noche.

Los números:

• Cleveland: Gibson 19 pt; Williams 18 pt y 6 as; James 15 pt y 8 as.
• Memphis: Gay y Warrick 13 pt.
• Cleveland suma 26 triunfos y 1 derrota como local y Memphis, 3 victorias y 22 partidos perdidos como visitante.