JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2008-2009
Marc Gasol irrumpe de forma estelar en la NBA con una actuación excepcional
El español da la victoria a los Grizzlies tras aportar 27 puntos y 16 rebotes
Barea no aprovecha sus minutos en unos Dallas venidos a menos
Marc Gasol ha explotado. Su irrupción en la NBA resulta más que notable si se tiene en cuenta que sólo ha disputado 4 partidos en la liga profesional estadounidense. Como hiciera su hermano mayor en su primer año, el pívot de Memphis apenas ha necesitado unos partidos para demostrar su calidad.
A diferencia de Pau, Marc ha llegado a la NBA con un mayor bagaje baloncestístico, con una sustancial experiencia de la que el hoy jugador de los Lakers carecía.
Anoche, en la victoria de los Grizzlies sobre los Warrios, se vio la mejor versión de Marc Gasol y el poco público que se dio cita en el FedEx Forum se encontró con una gratísima sorpresa, unida a la victoria de su equipo por 90-79.
Mientras, el puertorriqueño José Juan Barea desaprovechó por completo la oportunidad que le brindó su entrenador, Rick Carlisle. En 16 minutos apenas hizo nada. Su pobre imagen fue un reflejo perfecto a la deficiente imagen de su equipo, Dallas, que perdió en casa ante Cleveland.
Memphis 90 Golden State 79
Los Grizzlies están sorprendiendo por su notable inicio de temporada. En 4 partidos acumulan ya 2 victorias. Y buena culpa de ese rendimiento inesperado la tiene el pívot español Marc Gasol.
Gasol emergió anoche con fuerza en el universo NBA. Lo hizo de forma contundente, sin mediar palabra, con actos. Sus números no pueden dejar indiferente al aficionado al baloncesto, ya que en su cuarto partido en Estados Unidos, el mediano de los Gasol anotó 27 puntos, capturó 16 rebotes y puso 3 tapones en 36 minutos.
No precisó el pívot catalán de ningún protagonismo excesivo, de ninguna muestra de egoísmo. Tan solo tiró 11 veces a canasta en dinámico y otras 11 en el estatismo de los tiros libres. Y en ambos casos anotó 9 de sus intentos. Unos porcentajes excepcionales.
Marc Gasol hizo 12 puntos en el primer cuarto y se fue al descanso con 20, y su único lunar fue perder 6 balones. Pero poco importa este último dato, ya que como bien resumió Biedrins, pívot de los Warriors: "Marc Gasol nos destrozó".
De la victoria de Memphis hay que extraer importantes conclusiones. Porque los Grizzlies jugaron a otra cosa, jugaron al baloncesto. Siguieron defendiendo a las mil maravillas, pero la fuerte presión defensiva de los Warriors sobre Mayo y Gay les obligó a un esfuerzo mucho más colectivo del que salió beneficiado Gasol en lo individual y el equipo en su conjunto.
Mayo y Gay calcaron sus estadísticas de tiros-asistencias: anotaron 6 de 13 y repartieron cada uno 3 pases de canasta. Un cambio radical respecto al egoísmo de partidos anteriores que habrá que ver si queda en excepción o trata de convertirse en norma. Lo cierto es que el equipo dio 22 asistencias frente a las 11 y 13 que había repartido en los 2 partidos anteriores.
Mientras, al otro lado de la cancha los Warriors de Don Nelson naufragaron a conciencia. La suya fue una derrota sin paliativos a pesar de que siempre vivieron en las distancias cortas, muy cerca del éxito. Pero su 34,4% en el tiro de campo y su horrible 3 de 20 en el triple fueron un lastre insalvable.
En los visitantes, el máximo anotador fue Stephen Jackson (17 puntos, pero con 6 de 21 en el tiro) pero el mejor hombre fue el letón Biedrins (16 puntos y 22 rebotes).
Corey Maggette estaba llamado a ser el mejor de Golden State, pero cuando llevaba 13 puntos anotados se lesionó y desapareció del partido. Se jugaba el segundo cuarto.
En los Grizzlies, liderato total de Marc Gasol y buenas aportaciones de Gay (14 puntos), Mayo (13, con dos canastas muy importantes en el despegue del cuarto tiempo) y Conley, que dirigió mejor al equipo.
Dallas 81 Cleveland 100
No fue el día ni del puertorriqueño Barea ni de su equipo, los Dallas Mavericks. El base boricua volvió a ejercer de segundo armador del equipo, pero la oportunidad brindada por su entrenador, Rick Carlisle, la desaprovechó por completo.
Dispuso Barea de 16 minutos en los que se mostró impotente para desarrollar su juego. No anotó, sólo ofreció 1 asistencias a sus compañeros y perdió 2 balones.
No fue el jugador hispano el único que no respondió a las expectativas. Buena prueba de ello fue el partido que hizo la estrella de Dallas, Dirk Nowitzki. El jugador alemán se quedó en 8 puntos, anotando 3 de los 11 intentos que realizó.
En realidad, el único jugador local que se mostró mínimamente efectivo fue Josh Howard (18 puntos).
Dallas inició mal el choque (16-28) pero se rehizo y fue poco a poco recortando el marcador (42-51 al descanso y 66-72 al final del tercer cuarto). Pero el equipo de Carlisle se volvió a hundir en los últimos 12 minutos (parcial de 15-28).
La clave de ese hundimiento tuvo, sin embargo, su raíz en el tercer período. El luminoso reflejaba empate a 63 cuando llegó la desolación para los texanos. Y es que entre el tercer cuarto y el comienzo del cuarto los visitantes endosaron un parcial de 3-22 a los locales hasta dejar el electrónico en un concluyente 66-85 a falta de 8:47 para concluir el partido.
En ese tremendo parcial ejercieron de gurús ofensivos LeBron James, en el tercer acto, y Mo Williams, en el cuarto.
James volvió a ser el referente de Cleveland (29 puntos y 8 rebotes), bien secundado por Ilgauskas (17 puntos y 11 rebotes) y el buen quehacer ofensivo de West y Williams y la sólida labor defensiva de un rejuvenecido Ben Wallace (13 rebotes en 22 minutos).
Los Cavs dominaron totalmente el rebote (35-52) y manejaron con más criterio sus posesiones (5 robos y 14 pérdidas los locales por 11 y 10 los visitantes). Fueron éstas las claves colectivas de una victoria contundente de los de Ohio que revela las debilidades de Dallas, un equipo que esta temporada puede sufrir más de lo previsto.
Philadelphia 125 Sacramento 91
El dominicano Francisco García no pudo vestirse debido a la lesión que arrastra. Y de buena se libró, porque la debacle de su equipo, los Kings de Sacramento, en Philadelphia, fue total.
Tan total fue el desastre que los californianos perdían ya de 20 al descanso (68-48) y lo hacían ya de 40 a 2:49 del final (119-79). Y los Kings acumulando ya 4 derrotas en 4 partidos.
Los números expresan claramente el abismo que separó a los 2 equipos. Impresionante fue el acierto local en el tiro: 59,2% de campo y un casi insuperable ¡76,9% en los triples con 10 de 13!. Además, los Sixers lanzaron 35 tiros libres por 18 de los Kings, que perdieron, para rematar la faena, 19 balones.
La holgada victoria permitió al entrenador local, Maurice Cheeks, repartir los minutos de juego y dar entrada a sus 12 jugadores, no precisando Philadelphia el concurso estelar de sus mejores jugadores, siendo los máximos encestadores Thaddeus Young (18 puntos), Louis Williams (17) y Willie Green (16).
Mientras, en el Wachovia Center, los Kings vieron cómo ante el desastre el único jugador que tuvo un plus de intensidad fue su novato Jason Thompson, que acabó con 17 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias.