La prensa de Detroit destaca el sorprendente rendimiento de Walter Herrmann
El argentino anotó 10 puntos en 16 minutos en su primer partido de temporada
Los medios de comunicación de Detroit ya habían elogiado la disposición con la que el argentino Walter Herrmann había afrontado la pretemporada y ese espíritu positivo lleno de trabajo ha empezado a dar sus frutos nada más iniciarse la temporada regular, cobrando forma en el gran partido que Herrmann hizo ante Indiana.
En realidad, esa disposición especial a afrontar la temporada al 150% viene de más atrás de la pretemporada. Sus raíces se remontan a la decisión del alero argentino de renunciar a los Juegos Olímpicos de Pekín y a su determinación para mejorar su juego durante el verano, especialmente su tiro de larga distancia con el fin de tener más opciones como alero en la NBA.
“Estuve trabajando todo el verano mi tiro”, reconoce Herrmann al diario digital mlive.com, que es uno de los medios del estado de Michigan que dedican un artículo a la explosión inicial del internacional argentino. “Espero jugar un poco mejor esta temporada que la pasada”, advierte el jugador a la par que dice: “Estaba esperando esta oportunidad”.
Un buen inicio
En mlive.com el titular es por entero para el alero nacido en Venado Tuerto. Y dice algo así como “Herrmann dispuesto para ayudar a los Pistons”. Un titular impensable la pasada temporada, cuando su entonces entrenador Flip Saunders le tenía en el fondo, muy en el fondo, del banquillo, casi en la grada. Entonces parecía que el jugador no estaba en disposición de poder ayudar a los suyos.
Ahora, apenas unos meses después, Herrmann se muestra de otro modo. Su juego empieza a encajar en la rotación de los Pistons, uno de los mejores equipos de la NBA, y su primer partido de temporada regular ha sido toda una reivindicación de su juego: 10 puntos y 2 rebotes en 16 minutos de juego, todo ello con un gran acierto en el tiro.
Herrmann saltó a la pista en el segundo cuarto formando con la segunda unidad al completo (con Stuckey, Afflalo, Maxiell y McDyess) y en 8 minutos sumó 8 puntos. Pero casi tan importante como esos 8 puntos fueron los 7 minutos y 13 segundos que su entrenador le dio en el último cuarto, cuando el partido estaba sin decidir. Un Herrmann jugando los momentos decisivos de un partido en la etapa Saunders hubiera sido una estampa imposible.
Elogios de su nuevo entrenador
Frente a la indiferencia que el juego de Herrmann provocaba en Saunders, Michael Curry, su nuevo entrenador, se muestra optimista y convencido de que se trata de un jugador muy aprovechable para la NBA.
Curry afirma que Herrmann “ha mostrado a todos que es un jugador que puede salir y dar a Tayshaun (Prince) un descanso... es un jugador que está muy capacitado para jugar en esta liga”.
El diario local Detroit Free Press también se hace eco de las palabras del técnico de los Pistons en relación a Herrmann y Arron Afflalo, ya que este periódico afronta la noticia haciendo referencia a estos dos jugadores, indicando en el titular que Herrmann fue la sorpresa de la primera noche de juego.
En el Free Press, Curry habla de estos dos suplentes y dice que “les veo abandonando el banquillo, siendo capaces de sustituir a nuestro escolta y nuestro alero, esperamos que jueguen bien”. Y luego añade que “Walter podría no tirar de este modo cada noche, pero es un tipo experimentado. Arron Afflalo es un chico joven que trae presencia defensiva y mucha energía”.
“Esperamos que ambos hagan esto cada noche. Algunas veces tendrán una gran noche anotando, pero la mayoría de las veces esperamos que salgan y sean sólidos”, concluye el entrenador.
Un momento feliz
Este puede ser, sin duda, un momento feliz para un hombre que ha sufrrido los reveses más tremendos que pueda ofrecer la vida. Herrmann asegura que se siente feliz en este arranque de temporada.
“Es, tal vez, el primer partido en el que jugué muchos minutos con confianza, en este equipo... Tayshaun (Prince) está jugando realmente bien. Cuando Michael (Curry) me necesite, allí estaré”. Y es esa disposición la que puede llevar a Herrmann a acomodarse en la rotación de un equipo grande, como son, sin duda, los Pistons de Detroit.