Estados Unidos da a conocer el equipo con el que afrontará los Juegos Olímpicos de Pekín
El director general de la selección de baloncesto de Estados Unidos, Jerry Colangelo, ha dado a conocer hoy la lista con los 12 jugadores que defenderán los colores del equipo nacional estadounidense en los Juegos Olímpicos de Pekín.
La lista, que no ha deparado sorpresas, está configurada por jugadores de la NBA más que contrastados, y por un buen puñado de estrellas de la liga encabezadas por Kobe Bryant, LeBron James, Chris Paul y Dwyane Wade.
Los convocados son los siguientes: Chris Paul (New Orleans Hornets), Deron Williams (Utah Jazz) y Jason Kidd (Dallas Mavericks) como bases; Dwyane Wade (Miami Heat), Michael Redd (Milwaukee Bucks) y Kobe Bryant (Los Angeles Lakers) como escoltas; LeBron James (Cleveland Cavaliers), Carmelo Anthony (Denver Nuggets) y Tayshaun Prince (Detroit Pistons) en el puesto de alero; y Carlos Boozer (Utah Jazz), Chris Bosh (Toronto Raptors) y Dwight Howard (Orlando Magic) como jugadores interiores.
El conjunto estadounidense estará dirigido por una leyenda de los banquillos, el mítico entrenador de la Universidad de Duke, Mike Krzyzewski, que estará asistido en el capítulo técnico por otros tres preparadores de gran renombre: Jim Boeheim –que entrena a la Universidad de Syracuse y que, como Krzyzewski, está en el Salón de la Fama-, Mike D’Antoni (New York Knicks) y Nate McMillan (Portland Trail Blazers).
Un largo proceso de selección
Estados Unidos se propuso por primera vez establecer un calendario de preparación a largo plazo tras los sonoros fracasos sufridos en la Olimpiada de Atenas y los Mundiales de Indianapolis y Japón.
Para ello, en el año 2006 se fijó un programa senior que involucró a los entrenadores ya mencionados bajo la batuta en los despachos como coordinador de Jerry Colangelo. En ese programa se incluyó a 33 jugadores de los cuales saldría la lista final.
La lista ofrecida hoy no ha deparado, como decimos, sorpresas, toda vez que con antelación a la misma se habían anunciado ya las bajas de última hora de Chauncey Billups y Amare Stoudamire.
El proceso ha resultado arduo, y la selección de Estados Unidos ha sido de las últimas en anunciar su plantel para los Juegos. De hecho, en el acto oficial celebrado hoy el propio Colangelo lo ha reconocido al asegurar que “fue un proceso de selección muy difícil”, según recogen los medios de comunicación norteamericanos.
El equipo de Estados Unidos es fortísimo, no hay duda, pero tal vez se eche en falta un mayor equilibrio entre el juego exterior, que es brillante y amplio, y el interior, que resulta igualmente potente pero escaso en número.
De todos modos, los nombres de la lista lo dicen todo. Entre todos ellos suman 38 participaciones en el All-Star, ya que 10 de los 12 jugadores elegidos han jugado ese Partido de las Estrellas alguna vez –todos menos Deron Williams y Tayshaun Prince-.
Calendario de preparación
En unos días, Estados Unidos iniciará su calendario de preparación, que arrancará los días 28 y 29 de junio en un minicampo de entrenamiento que se llevará a cabo en Las Vegas.
No será hasta finales de julio cuando la selección retomará su trabajo. Entre el 20 y el 25 de julio entrenarán de nuevo y culminarán esa etapa el día 25 con un partido amistoso ante Canadá.
Después se desplazarán a Asia, donde intensificarán su calendario de partidos amistosos contra equipos poderosos: el 31 de julio ante Turquía, el 1 de agosto ante Lituania, el 3 de agosto ante Rusia y el 5 ante Australia.
Llegará entonces el momento de la verdad. Y es que Estados Unidos tiene mucho que demostrar tras sus continuos fiascos internacionales.
Los estadounidenses ganaron la Olimpiada de Sidney en el año 2000, pero después han encadenado decepciones, empezando por el lamentable sexto puesto que obtuvieron en los Campeonatos Mundiales disputados en su casa, en Indianapolis. Después llegaron la cuarta plaza en los Juegos Panamericanos de 2003, el bronce en los Juegos Olímpicos de Atenas y el bronce otra vez en los Mundiales de Japón. Toda una cura de humildad para los orgullosos profesionales de Estados Unidos.