Los Lakers ganan en Dallas en un final de infarto

La jornada de anoche se completó con otros partidos en los que también jugaban equipos con jugadores hispanos, si bien muchos de ellos no saltaron a la pista o tuvieron un papel testimonial.

Los Lakers ganaron 100-102 en Dallas y logran con ello empatar con Houston en el liderato de la Conferencia Oeste. Ninguno de los tres hispanos que forman en los dos equipos se vistieron. Los 'angelinos' Gasol y Ariza por lesión y el puertorriqueño Barea por decisión técnica.

En Detroit, los Pistons dejaron claro lo que todos sabemos, que son un gran equipo. Su versatilidad en el juego quedó palpable ante Denver. Detroit tiene una plantilla que lo mismo es capaz de ganar defendiendo con mayúsculas que atacando sin freno como anoche (136-120). Herrmann se volvió a quedar fuera y Nájera anotó 10 puntos y dio 3 asistencias en 21 minutos.

Mientras, Chicago se desembarazó cómodamente de los Nets por 112-96 en un encuentro en el que el argentino Nocioni apenas jugó 10 minutos. El 'Chapu' logró en ese corto tiempo 9 puntos, aunque estuvo flojo en el tiro y en varias facetas del juego.

Finalmente, Phoenix ganó a domicilio a Portland por 98-111. Los aficionados del Rose Garden vieron al español Sergio Rodríguez durante 5 minutos. Repartió 2 asistencias y falló los dos triples que intentó.

Dallas 100 L.A. Lakers 102

Primera victoria del equipo de Phil Jackson desde que hace unos días se lesionara Pau Gasol. Un triunfo que resultó sufrido a pesar de que el equipo visitante se fue al descanso con 38-59 y llegó a sacar 25 puntos de ventaja a su rival en el tercer cuarto.

Tras tamaña exhibición vinieron los problemas y las apreturas perfectamente reflejadas en un final agónico. Los angelinos dominaban 91-98 a falta de 1:12, pero dos triples consecutivos de la gran figura del encuentro, el alemán Dirk Nowitzki, pusieron el 97-98 en el luminoso. Luego los californianos se escaparon ligeramente (97-101) gracias a dos tiros libres de Odom y uno de Vujacic, pero otro triple, esta vez de Terry, volvió a darle una inusitada emoción al choque. A falta de 4 segundos Fisher se fue a la línea de personales. Falló el primero y anotó el segundo (100-102), dejando un último tiro a los locales. Tiempo muerto de Avery Johnson y jugada de pizarra para Nowitzki. El alemán se levantó en el territorio del triple y sobre la bocina erró el lanzamiento. La canasta victoriosa hubiera sido una justa recompensa a su partidazo (35 puntos, 11 rebotes y 5 tapones).

Los ganadores tuvieron, como es habitual, a Bryant como su máximo encestador con 29 puntos, a los que sumó 7 asistencias. También aportaron buenos números Radmanovic, que fue el factor sorpresa con 21 puntos (10 en el último cuarto) y 10 rebotes y Oden con 17 puntos y 17 rebotes. Los Lakers tuvieron además la virtud de ganar el partido sin que Kobe resultara decisivo en los momentos finales.

En Dallas, el gran partido de Nowitzki se vio apoyado por la producción ofensiva de Josh Howard y Jason Terry, ambos con 19 tantos. En el lado negativo el horroroso rendimiento de Jason Kidd (1 puntos y 7 asistencias).

"Es una gran victoria para nosotros", aseguró Kobe Bryant a la conclusión. Y es que siendo importante numéricamente, el triunfo en Dallas cobra una gran trascendencia desde la perspectiva mental, más aún teniendo en cuenta que el regreso de Gasol a las canchas parece inminente.

Detroit 136 Denver 120

Los Pistons reafirmaron su gran virtud, que no es otra que su tremenda versatilidad en el juego, una versatilidad que les permite ganar partidos planteados de forma ultradefensiva o, como el de anoche, ultraofensiva.

Detroit ganó a Denver en el terreno de los Nuggets (venían de meter 168 puntos) y de paso logró su mayor anotación en un partido sin prórrogas desde 1990. El propio cerebro del equipo, Chauncey Billups, se mostró impresionado al término del partido por la bacanal anotadora de su equipo.

Mientras, Denver se hundió nuevamente en sus debilidades, todas defensivas. El conjunto de George Karl lleva su estilo hasta las últimas consecuencias y eso supone en muchas ocasiones un desastre en los aspectos más sacrificados y solidarios del juego. Sólo así se explica que anotando un 56,6% de sus tiros, incluidos 10 de 20 triples, un equipo pierda casi por 20 puntos. Y es que la defensa de los Nuggets permitió anotar a Detroit un 60,4% de sus lanzamientos, entre ellos 12 de 20 tiros de 3. Si a ello se añade la debacle de la escuadra de Colorado en los tableros (40 rebotes a 22) todo empieza a cobrar sentido.

Los Pistons basaron su victoria en el juego de ataque de Hamilton (24 puntos), Wallace (21) y Billups (14 puntos y 10 asistencias), a los que se sumaron desde el banquillo Maxiell (18 puntos y 7 rebotes) y Hayes (17 puntos), un jugador que parece estar en un momento más que dulce.

Los perdedores se apoyaron en su trío mágico: Anthony (27 puntos), Iverson (20 puntos y 11 asistencias) y Camby (15 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias).

Tras la victoria la franquicia de Michigan se afianza en la segunda plaza del Este a salvo de los envites de Orlando, mientras que Denver sigue sin alcanzar el octavo puesto en el Oeste.

Chicago 112 New Jersey 96

Duelo entre rivales directos en la lucha por acceder a la octava plaza de la Conferencia Este y victoria de los Bulls ante unos Nets que no pudieron contar por segundo partido consecutivo con Krstic, que padece una infección respiratoria.

Chicago se escapó en el segundo cuarto con un parcial espectacular de 29-8 que permitió que los locales se fueran al vestuario con 58-34, pero como sucediera en pasados partidos los de Boylan se adocenaron y permitieron que su rival se les subiera a las barbas hasta recortar notablemente la desventaja (79-70 al principio del último cuarto). A diferencia de las derrotas ante Philadelphia y New Orleans, Chicago supo sobreponerse en esta ocasión y el miedo sólo rondó las gradas fugazmente.

En las filas del equipo de Illinois marcaron la pauta cinco hombres, pero especialmente destacada fue la labor de un Drew Gooden que parece haberse afianzado con rapidez en su nuevo equipo (19 puntos, 11 rebotes, 4 tapones y 3 robos). Los otros cuatro destacados fueron Deng (20 puntos y 9 rebotes), Gordon (17 puntos), Hughes (16) y Hinrich (14 puntos y 8 asistencias). Mientras, el argentino Andrés Nocioni parece perder fuelle dentro de la rotación de Boylan.

Al otro lado de la cancha Carter y Jefferson, con 22 y 21 puntos, estuvieron acertados, al igual que el base suplente Marcus Williams, que anotó 16 puntos con 4 canastas triples. El resto de los jugadores desplegaron un juego inconsistente.

Los Bulls basaron su éxito en el dominio del rebote y en su espectacular serie en el tiro de 3, desde cuya línea anotaron 11 de 17.

Portland 98 Phoenix 111

Los Suns siguen creciendo conforme Shaquille O'Neal se va asentando en su nuevo equipo. El partido en Oregón fue un claro ejemplo y el propio Shaq lo corroboró al asegurar que cada vez se siente más cómodo.

Phoenix dominó el encuentro disputado en el Rose Garden, obtuvo su quinto triunfo consecutivo y lo hizo a partir de un gran O'Neal, que trabajó en muchas facetas del juego (16 puntos, 15 rebotes, 5 asistencias y 3 tapones). Junto a él destacaron los dos pilares del conjunto de Arizona: Nash (22 puntos y 8 asistencias) y Stoudemire (25 puntos).

El conjunto dirigido por Mike D'Antoni tiró con muchísima solvencia (55% en el tiro de campo y 41% en triples anotando 10) y no tuvo rival bajo los aros en el aspecto reboteador, a pesar de que el mejor jugador de los Blazers fue el ala-pívot de segundo año LaMarcus Aldridge, que hizo 31 puntos y 8 rebotes y puso el contrapunto al desastroso partido de la estrella local, Brandon Roy, que se quedó en 6 puntos tras anotar 3 tiros de sus 14 lanzamientos a canasta.

En el lado positivo del equipo de Nate McMillan el buen rendimiento de su segunda unidad, que produjo 46 puntos. Una gran aportación a la que fue ajeno el español Sergio Rodríguez, que no anotó en los pocos minutos que jugó.

Phoenix se sitúa quinto con 45 triunfos y 22 derrotas y Portland, que ha enviado a McRoberts a la Liga de Desarrollo, sigue décimo y con cada vez menos opciones de clasificarse para los playoffs.