JORNADA NBA / Vendaval ofensivo en Colorado
Denver anota 168 puntos y gana a Seattle por 52 de diferencia
Detroit trunca la buena trayectoria de New Orleans y Toronto vuelve a perder sin Bosh
Denver Nuggets se convirtió en el gran protagonista de la jornada al endosarle 168 puntos sin prórroga alguna a Seattle Supersonics, al que derrotó por 52 puntos de diferencia (168-116) en un encuentro plagado de records históricos y de la temporada. Camby completó un triple-doble en 27 minutos de juego y el mexicano Nájera no aprovechó la ocasión, ya que fue el local que menos aportó en el ataque al anotar un solo punto.
Mientras, Detroit Pistons frenó en seco la brillante trayectoria de New Orleans Hornets, que no pudo contar con David West, una baja que se notó en demasía. El resultado fue contundente (105-84) y el técnico local, Flip Saunders, volvió a prescindir del argentino Walter Herrmann.
Por otra parte, tres jugadores hispanos (Francisco García, José Manuel Calderón y Carlos Delfino) saltaron a la pista del Arco Arena en la victoria de Sacramento ante Toronto por 106-100. El equipo canadiense no levanta cabeza desde que perdiera por lesión a su líder, Chris Bosh. Los Raptors llevan ya nueve partidos seguidos sin su estrella, de los cuales han perdido siete y con ésta suman diez derrotas consecutivas en el Arco Arena.
Denver 168 Seattle 116
Denver conserva una ley completamente surrealista. Es ilegal prestar la aspiradora al vecino. Tal vez por ello, los jugadores de los Nuggets decidieron pasar la aspiradora en su hogar amparados en la legalidad y no dejaron sobre el parqué ni las cenizas de su rival.
La de anoche fue la máxima anotación de la historia de la franquicia en un partido sin prórroga, quedándose a 16 puntos de su mejor registro absoluto, que data de 1983 cuando Denver perdió en Detroit 186-184 tras la disputa de tres tiempos extras. Además, los 52 puntos de diferencia constituyen la mayor distancia lograda por Denver en su historia, dándose la circunstancia de que hace apenas 20 días (el 27 de febrero) los Nuggets habían derrotado a los mismos Sonics por 42 puntos (138-96). Un caso que podría engrosar la sala de consultas de cualquier psiquiatra de prestigio.
Los locales actuaron con la precisión de un reloj suizo. Anotaron 84 puntos en la primera mitad y otros 84 en la reanudación. Denver superó los 40 puntos en tres de los cuatro cuartos y en el inicial alcanzó la friolera de 48 tantos.
Para alcanzar este nivel ofensivo los de George Karl lanzaron más de 100 tiros a canasta con un 60% de acierto, enchufaron 16 triples de 31 intentos y ejecutaron 35 tiros libres con una efectividad cercana al 86%. Con tal bagaje no es de extrañar que el equipo diera 44 asistencias y anotara 49 puntos en transiciones rápidas.
El partido adquirió desde el principio un ritmo de juego trepidante (los dos equipos totalizaron 71 puntos a la contra). Ello dio pie a una anotación fantástica y a que varios jugadores rondaran la ratio de un punto anotado por minuto jugado. Así, en los locales Carmelo Anthony logró 26 puntos en 26 minutos, Iverson 24 en 27 y Kenyon Martin 23 en 26. Entre los suplentes, Atkins y J.R.Smith se fueron a los 19 puntos y el lituano Kleiza alcanzó los 17. Pero entre todos ellos destacó un formidable Marcus Camby, que hizo un triple-doble en algo más de dos cuartos (13 puntos, 15 rebotes y 10 asistencias, a los que sumó 4 tapones). Ante tal borrachera llama la atención la escasa aplicación ofensiva del mexicano Nájera, que terminó con 1 punto y 6 rebotes en 16 minutos.
Obviando la debacle defensiva generalizada, en Seattle se salvaron en ataque el novato Kevin Durant (23 puntos en 27 minutos), Wilcox (17 puntos y 12 rebotes en 24 minutos) y los franceses Gelabale y Petro con 16 y 14.
Denver se coloca ahora con 40 triunfos y 26 derrotas, a tiro de piedra de la octava plaza que da derecho a jugar las eliminatorias por el título.
Detroit 105 New Orleans 84
Detroit volvió a demostrar que es uno de los pocos equipos que se puede medir de tú a tú con equipos punteros del Oeste. En este caso se deshizo sin problemas de los Hornets que acudieron al estado de Michigan sin David West.
La clave del partido radicó en el segundo cuarto. El equipo local logró un parcial de 34-18 amparado en los dulces minutos protagonizados por uno de sus jugadores suplentes: Jarvis Hayes. El alero de Georgia aportó 19 puntos en dicho cuarto, de los cuales 15 procedieron de 5 triples. Y es que fue el perímetro el que mató a los Hornets. Detroit logró 14 triples de 21 intentos y ante esa efectividad casi mágica los visitantes opusieron una serie de 3 de 18 desde la línea más exterior.
La deficiente defensa en el perímetro por parte de New Orleans encumbró definitivamente a Hayes que terminó el partido con 29 puntos en 25 minutos y encestando 7 triples de 8 intentos. Y es que los locales ni siquiera precisaron de la brillantez de sus titulares, entre los que sólo firmó buenos números el base Billups (17 puntos y 5 asistencias).
Las bases sentadas por Detroit en ese segundo cuarto se consolidaron y ampliaron en el último dejando todo visto para sentencia y cortando la buena marcha de un equipo, New Orleans, que venía de ganar a San Antonio Spurs y Los Angeles Lakers.
Del lado de los Hornets sobresalió Stojakovic (21 puntos y 9 rebotes) y Paul (14 puntos y 14 asistencias), aunque éste bajó su nivel respecto a partidos anteriores. El sustituyo de West, Ely, cumplió con su papel (15 puntos).
Sacramento 106 Toronto 100
Tres hispanos en el Arco Arena. En los locales, Fracisco García; en los visitantes, Calderón y Delfino. El primero terminó con 5 puntos, 3 rebotes y 2 tapones en 25 minutos; el segundo con 6 puntos, 9 asistencias y 3 robos; y el tercero con 8 puntos y 6 rebotes. Los tres jugaron los minutos decisivos de partido.
Está claro que los Raptors han perdido buena parte de su juego grácil al quedarse sin una pieza básica de su engranaje: Chris Bosh. El equipo ha entrado en una dinámica preocupante y puede caer hasta la séptima plaza en el Este ante la amenaza de Washington, que va a recuperar a Arenas, y Philadelphia, que está en plena racha de juego y resultados.
El partido fue siempre de los Kings, que llegaron a dominar por 15 (48-33) en el segundo cuarto. Pero cuando los visitantes parecían tocar fondo, un tiempo muerto de Sam Mitchell les devolvió a la superficie gracias a un parcial de 2-16 protagonizado por una borrachera de tiro de Jason Kapono.
A partir de entonces el encuentro se movió en la angostura, por lo que respecta al marcador, si bien Toronto no dio nunca la impresión de poder llevarse la victoria.
Ese ir siempre a remolque se trasladó al marcador final, un resultado que penalizó especialmente la falta de dureza de los Raptors en el rebote y su falta de consistencia como equipo en el que sólo destacaron las individualidades de Kapono (26 puntos con una fantástica serie de 12 de 19) y Nesterovic (20 puntos y 8 rebotes). Buena prueba de la fragilidad de Toronto en la pintura es que el esloveno tuvo que jugar todo el partido, ya que sólo se ausentó de la cancha 23 segundos.
En los ganadores, gran partido de Kevin Martin (32 puntos), que resultó decisivo al final desde la línea de tiros libres), y muy bien Artest (19 puntos, 10 rebotes, 5 asistencias y 4 recuperaciones), que anotó la canasta que resolvió el encuentro a falta de 10,9 segundos.