San Antonio se impone a Dallas en un igualadísimo partido

San Antonio Spurs se impuso a Dallas Mavericks por un apretado 97-94 en un abarrotado AT & T Center gracias a una magnífica jugada defensiva de Bruce Bowen, que volvió a justificar el por qué de su merecida fama como defensor.

Los Spurs logran así su séptimo triunfo seguido y se colocan con un balance de 39-17 frente a las 38 victorias y 20 derrotas de Dallas, que es un rival directo en la lucha por liderar la División Sudoeste y por extensión la Conferencia Oeste.

Duncan anotó dos tiros libres a 34 segundos del final para dejar el marcador en 96-94. Avery Johnson pide entonces un tiempo corto y sustituye a Kidd saltando a la cancha Stackhouse en busca de un mayor arsenal ofensivo. La jugada, como era previsible, acaba en manos de Nowitzki, que falla su tiro, pero el balón se lo queda Dallas que pide un nuevo tiempo muerto. La nueva ofensiva intenta culminarla nuevamente el jugador alemán, que vuelve a errar, pero Jason Terry atrapa el rebote ofensivo. Ahí es donde surge la inconmesurable figura de Bowen. Terry intenta resolver y Bowen le tapona a 3 segundos de la conclusión poniendo fin a la incertidumbre y dando la victoria a su equipo.

El partido no pudo resultar más igualado. Reflejo de esa paridad fue el marcador, cuya regularidad por cuarto fue inquebrantable: 22-25, 25-22, 26-25 y 24-22. Otro buena referencia de lo parejo de ambos equipos se puede encontrar en que hubo 39 empates en el electrónico a lo largo de los 48 minutos y 47 cambios de liderazgo.

En el terreno estadístico lo que San Antonio perdió en los tableros (36 por 44 rebotes de su rival) lo recuperó en el equilibrio de las posesiones (6 robos y 6 pérdidas por 4 y 11).

El encuentro tuvo aire de play-off por su desarrollo, con los dos entrenadores -Popovich y Johnson- afinando ciertas situaciones ya en la recta final de la Liga Regular como ensayo para los momentos decisivos del campeonato, al que optan ambas franquicias.

Una buena medida de ese carácter extremadamente competitivo del partido la dieron los guarismos finales, que reflejan que los dos líderes de la contienda fueron los dos jugadores franquicia: Duncan por los locales y Nowitzki por los visitantes.

Duncan fue el jugador del partido tras obtener 31 puntos, capturar 15 rechaces bajo los tableros y ofrecer 3 asistencias; Nowitzki logró 28 puntos y 6 rebotes, yendo 21 veces a la línea de tiro libre para anotar 17.

Los argentinos de San Antonio

Los argentinos de los Spurs, Ginobili y Oberto, fueron titulares. Manu Ginobili jugó 38 minutos en los que consiguió 17 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias, pero su rendimiento bajó notablemente en la segunda mitad, en la que sólo anotó 2 puntos al estar muy bien defendido. Sus porcentajes de tiro fueron muy discretos (6/20 en tiro de campo y 1/7 en triples). Mientras, Oberto permaneció en la cancha 14 minutos para hacer 4 puntos, 1 rebote, 1 asistencia y 2 robos de balón.

En San Antonio destacaron también Finley (16 puntos) y Bowen, que además de resultar decisivo en la jugada final completó un buen partido ofensivo con 14 puntos.

Por parte de Dallas, escoltaron a Nowitzki el alero Howard (16 puntos y 8 rebotes) y el suplente Brandon Bass (16 puntos y 6 rebotes). Kidd aportó 10 asistencias.

Finalmente cabe resaltar que el partido resultó, sin duda, algo especial para el entrenador visitante, Avery Johnson, ya que llegaba a la cancha de un equipo, los Spurs, que el pasado 22 de Diciembre le rindió homenaje en una emotiva ceremonia en la que se retiró el número 6 con el que Johnson jugó en su día para la franquicia.