Como cabía esperar, Lonzo Ball ha validado la opción de jugador que tenía sobre su último año de contrato con Chicago Bulls, una opción que le garantiza la próxima temporada un salario de 21,4 millones de dólares.
Lonzo lleva 2 temporadas y media sin jugar al baloncesto y nadie garantiza que pueda volver a hacerlo, aunque el jugador y su entorno se manifiestas optimistas y creen que podría regresar a las pistas las próxima temporada.
Lo cierto es que el que fuera número 2 del draft en 2017 lleva ya mucho tiempo luchando sin éxito contra una lesión de rodilla que le ha obligado a pasar 3 veces por el quirófano, la última en 2023 para transplantarle cartílago en la rodilla izquierda.
Ball jugó 52, 47, 63 y 55 partidos en sus 4 primeras temporadas como profesional, pero en la campaña 2021-2022 sufrió una lesión de rodilla que se le fue complicando más y más. Esa temporada solo disputó 35 partidos y en las 2 últimas no ha podido competir, por lo que acumula 2 temporadas y media en blanco.
El sueldo de Lonzo, de 26 años, esta temporada ascendió a 20,5 millones de dólares, el tercero más alto de los Bulls solo superado por Zach LaVine y DeMar DeRozan, siendo más alto que el de Nikola Vucevic.
Ese alto sueldo es producto del contrato que firmó en el verano de 2021 como resultado del acuerdo de firma y traspaso que le llevó de Pelicans a Bulls, un acuerdo de 80 millones de dólares por 4 años.
Más allá de las cuestiones económicas, lo más importante sigue siendo que Lonzo Ball pueda volver a jugar al baloncesto. La otra opción no es otra que retirarse siendo muy joven aún.