Excelentes noticias para Alperen Sengun y Houston Rockets. El jugador turco ha evitado una grave lesión y no requerirá cirugía para superar los daños que sufrió anoche en el último cuarto del partido Kings-Rockets.
Sengun se lesionó a 39 segundos del final en una jugada con Domantas Sabonis. La cosa pintaba bastante fea viendo la jugada, los gestos de dolor del jugador, el tiempo que permaneció tumbado en la pista bajo el aro y su abandono de la cancha en silla de ruedas. Pero todas esas imágenes no se han correspondido con un diagnóstico acorde a la gravedad esperada.
Al jugador se le practicaron rayos X y resonancias magnéticas en el tobillo y rodilla derechos, y las pruebas han revelado que las lesiones que presenta no son graves.
El pívot europeo tiene un severo esguince de tobillo y el daño en la rodilla es leve, quedando libres de lesión el menisco y los ligamentos, según ha trascendido.
Se desconoce el tiempo de convalecencia que requerirá el jugador, si bien hay que recordar que el plazo para finalizar la temporada regular ya es corto, de solo un mes, puesto que la última jornada de la fase regular se disputará el 14 de abril.
Segun ha hecho hasta la fecha una espectacular campaña en su tercer año en la NBA, con medias de 21 puntos, 9,3 rebotes y 5 asistencias, siendo uno de los 5 jugadores (todos europeos) que suman en la temporada al menos 1.000 puntos, 500 rebotes y 300 asistencias, acompañando en dicha lista a Giannis Antetokounmpo, Luka Doncic, Nikola Jokic y Domantas Sabonis.
El culmen estadístico lo logró Sengun hace escasas fechas, cuando el 5 de marzo anotó 45 puntos ante Victor Wembanyama y al día siguiente firmó un triple-doble de impresión.
Más allá del tiempo que requiera su recuperación, Houston y Sengun respiran porque no se trata de una lesión grave, y eso es casi un milagro a tenor de la jugada en la que se lesionó.