Se trata de una vía propuesta por ambas partes, de un acuerdo entre Serge Ibaka y Milwaukee Bucks para buscar la salida del equipo del jugador mediante un traspaso, según afirma el periodista de The Athletic Shams Charania.
La relación entre Ibaka y los Bucks no está funcionando a nivel deportivo. El jugador hispano-congoleño solo ha disputado 16 partidos esta temporada con una escasa media de 11,6 minutos por juego, ofreciendo un rendimiento gris, que en números se cifra en 4,1 puntos y 2,8 rebotes.
No está claro qué mercado puede tener Ibaka en la NBA ahora mismo, a sus 33 años y mostrando un declive enorme desde que salió de los Raptors, en gran medida provocado por sus recurrentes problemas de espalda que limitaron en alto grado su inclusión en las rotaciones de Clippers y Bucks.
Ibaka percibe ahora mismo un salario de 2,9 millones de dólares y está en su último año de contrato.
La disposición es mutua. El de Brazzaville y su equipo están dispuestos a explorar escenarios de traspaso que sean del agrado de Milwaukee y que permitan a Ibaka buscar un destino en el que pueda contar con más minutos que en los Bucks. Veremos en qué acaba el intento.