Tiene 21 años. Su desparpajo luce sin freno. Juega sin complejos. Se llama Tyrese Maxey y este sábado se adueñó del Wells Fargo Center. La grada se hizo coro: "¡Maxey, Maxey, Maxey...!". El centro del escenario le perteneció por completo.
Sixers arrancó con fuerza la postemporada. Llevándose por delante a los Raptors sin apenas oposición. Al descanso un ya contundente 69-51. Con los 4 jugadores esenciales del equipo local metidos en harina. El tercer cuarto dado a la vorágine anotadora. Un 38-37 para congelar cualquier intento de reacción visitante.
Un equipo local impresionante en el control de su ataque. ¡No perdió un solo balón en la primera parte y acabó el partido con 3 pérdidas!
Toronto no estuvo. Y todo lo que iba mal fue a peor. Fred VanVleet cayó eliminado por faltas en el último cuarto. Y también en el último cuarto se lesionó el novato Scottie Barnes. Pisotón involuntario de Joel Embiid. Doloroso. Tuvo que abandonar la contienda. Y su equipo ya iba muy atrás en el marcador. Todo estaba perdido para Raptors y terminó así, perdiendo.
Lo de Maxey fue pura filigrana baloncestística. Metió 21 puntos en un tercer cuarto en el que anotó de todos los colores. Un cuarto anotador que solo se había visto en Sixers en los últimos 25 años en manos de un tal Allen Iverson. El chaval no se cortó. Lanzó desde el rango de triple de los mejores especialistas. Desde una lejanía controlada. Y terminó el partido con 38 puntos. Con 14 de 21 en el tiro de campo. Es el jugador más joven en la historia de Sixers en alcanzar los 30 puntos en un partido de playoff. Y estuvo a un paso de llegar a los 40. Se fue a la banda con una sonrisa en la boca. Es un jugón.
Tobias Harris fue el segundo nombre propio. Por lo que supone para Sixers verle bien anudado al juego de su equipo con James Harden en liza. Brilló Harris con 26 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias. Notables sus porcentajes de tiro.
Otro que brilló de un modo generoso fue Harden. Autor de 22 puntos, 14 asistencias y solo una pérdida de balón. No fue su mejor día en el tiro. Pero repartió juego a granel con exquisita racionalidad.
Y a todo esto... ¡Joel Embiid como cuarto anotador de su equipo! Solo metió 4 puntos en la segunda parte. Para totalizar 19 puntos y 15 rebotes en el partido. Pero funcionó muy bien en la primera mitad. Para ese 69-51 al descanso que sentó las bases del triunfo.
Los de Rivers atacaron de un modo sobresaliente. Metieron el 50% de sus triples. Forzaron faltas de tiro. Solo perdieron 3 balones. Dominaron de principio a fin.
Toronto tuvo a Pascal Siakam con 24 puntos y 7 asistencias. Aunque su primera parte resultó deficiente. OG Anunoby metió 20 puntos. Fred VanVleet añadió 18 y 6 asistencias antes de caer eliminado por faltas. Scottie Barnes se fue a 15 tantos, 10 rebotes y 8 pases de canasta antes de lesionarse. Y la mayor decepción vino de la mano de Gary Trent Jr. y del lastimoso trabajo defensivo del equipo.