Otra vez LeBron James al rescate con una actuación salvífica. Monumental partido del de Akron para impulsar la victoria de los Lakers sobre los Wizards (122-109). James anotó 50 puntos tras meter 33 en la segunda mitad y 19 en el cuarto, el tercero, que supuso el punto de inflexión en el partido.
Segundo encuentro de 50 o más puntos para LeBron en una semana y segundo partido consecutivo como local con medio centenar de puntos o más anotados. Y todo ello con 37 años, como si la naturaleza no hiciera efecto en su juego. El paso del tiempo no va con este señor, aunque su equipo tenga una fijación por vivir en el alambre.
Terminó James con 50 puntos, 7 rebotes, 6 asistencias, 18 de 25 en el tiro de campo (6 de 9 desde el triple) y 8 libres sin fallo alguno. Fueron 36 prodigiosos minutos en los que su equipo hizo un +22 con él en pista. Un partido para enmarcar que culminó con un triple a 1:41 del final que puso el 119-101 y que llevó al jugador a esos 50 puntos redondos.
Era este Lakers-Wizards un partido de ex debido al traspaso en su día de Russell Westbrook al equipo californiano y las contrapartidas que obtuvo Washington, un equipo que está jugando sin Bradley Beal.
Entre esos ex, buena nota para Kyle Kuzma (23 puntos y 7 rebotes), que fue el máximo anotador visitante, y malas notas, muy malas, para Kentavious Caldwell-Pope y un Russell Westbrook que ante su exequipo dio 9 asistencias y solo perdió 1 balón -hasta ahí todo bien-, pero que se fue del juego con solo 5 puntos tras meter 2 de sus 11 tiros de campo. Sí, 5 puntos a razón de un salario de 44,2 millones de dólares, el cuarto más alto de toda la NBA.
Lakers se fue al descanso perdiendo 52-59 y con malas sensaciones en la pista y en la grada. El rebote era del equipo capitalino, los locales seguían en su deficiente línea defensiva, la segunda unidad de Wizards funcionaba y LeBron y Malik Monk, que terminó el partido con 21 puntos y 5 de 7 en el triple, aguantaban la ofensiva local.
Llegó el tercer cuarto y ese fue el momento en el que el partido cambió. Lakers hizo un 37-23 para acabar el cuarto 89-82 gracias a la explosión de LeBron, autor de 19 puntos en el cuarto. Crucial el parcial de 22-8 que lo cambió todo con 12 puntos consecutivos de James.
Y esta vez Lakers llegó con los deberes hechos a la recta final del partido, lo que le permitió vivir con tranquilidad la resolución del mismo y evitar un nuevo disgusto.
Además de LeBron y Monk, destacar los 15 puntos de Talen Horton-Tucker y el buen papel del joven Austin Reaves, que contrastó con las malas actuaciones de los veteranos Carmelo Anthony y Russell Westbrook.
En Wizards, además de Kuzma, 21 puntos del novato Corey Kispert, su mejor anotación en la NBA, 15 de Rai Hachimura, que brilló en la primera mitad, 14 de Tomas Satoransky, que lo hizo en el último cuarto, y 14 puntos y 14 rebotes de Kristaps Porzingis, que se mostró errático en el tiro.