Agitadas las aguas en Brooklyn Nets y bastante decepcionante el arranque de temporada del equipo, todo lo contrario de lo que ocurre con unos pujantes Charlotte Hornets. Sorprendente victoria de los de James Borrego en el Barclays Center por 95-111 para ponerse con un perfecto 3-0.
El día no empezó bien para los Nets, con un grupo de manifestantes protestando en el exterior del pabellón por la normativa de la ciudad de Nueva York respecto a la vacunación de la Covid-19, un grupo que mostró su apoyo al defenestrado Kyrie Irving. Una tensión innecesaria para un equipo que ya tiene suficiente distracción con la decisión de Irving.
Luego, ya en el partido, baja de Blake Griffin para evitar esfuerzos extra en este inicio de curso, y horrible segunda parte de un equipo local fiado por completo al encanto avasallador de un gran Kevin Durant, pero ni siquiera Durant puede solo con todo. Eso es imposible.
El alero estelar de los Nets acabó con 38 puntos y 17 de 24 en el tiro de campo. Ha hecho Durant excelentes números en sus 3 primeros partidos de la temporada, pero su equipo anda con marca de 1-2. Ser un equipo es otra cosa.
Los Hornets viven una realidad bien distinta. Avanzan viento en popa y a toda vela y están con un 3-0 que da al equipo una gran reserva de moral.
Charlotte se fue al descanso perdiendo 58-50, equilibró la situación en el tercer cuarto y apabulló al rival con un 17-32 en el cuarto final que llevó el marcador definitivo a un 95-111 bastante concluyente.
Miles Bridges lideró el juego de los Hornets durante los tres primeros cuartos, bien apoyado por un notable LaMelo Ball, pero llegado el momento de la verdad, el último cuarto, fueron dos suplentes de Charlotte los que marcaron las diferencias y doblegaron a los Nets. Espectacular cuarto final de Ish Smith y Caleb Martin ante un equipo local completamente seco.
Hornets metió 14 de sus 22 tiros de campo (un 63,2% de acierto) en los últimos 12 minutos del partido, con Ish Smith anotando 11 de sus 15 puntos totales y con Caleb Martin añadiendo 8 puntos en el decisivo cuarto final.
Desde luego, en el global del encuentro, Miles Bridges fue la estrella visitante con 32 puntos, 9 rebotes y 9 de 16 en el tiro, mientras que LaMelo Ball se quedó en 18 puntos.
Sin Terry Rozier en juego y con rendimientos grises en ataque de Gordon Hayward y Kelly Oubre Jr., Charlotte supo ver los puntos débiles del rival y a partir de la defensa oxidó las opciones de los de Steve Nash, que encajaron un parcial de 37-61 tras el descanso.
En los Nets, Durant estuvo demasiado solo. James Harden no tuvo su día: 15 puntos, 8 asistencias y 8 pérdidas de balón. Hizo 4 puntos en toda la segunda parte. Y nadie más llegó a los 10 puntos en todo el partido. Ni siquiera Patty Mills pudo ejercer de salvador. Llevaba una alucinante serie de 10 triples de 10 intentos en sus dos primeros juegos y hoy ha hecho un pobre 1 de 6.
Estamos solo en los comienzos, unos comienzos que no están siendo buenos para Nets y que sí lo están siendo para Hornets, pero queda toda la temporada por delante. Eso sí, el asunto Irving no le hace ningún bien a la mejor plantilla de la NBA.