Boston Celtics y Josh Richardson se han puesto de acuerdo muy pronto. Nada más aterrizar el jugador desde Dallas Mavericks gracias a una excepción de traspaso, equipo y jugador han llegado a un acuerdo para prolongar su relación hasta 2023.
Richardson venía de un contrato con Miami de 42 millones de dólares por 4 años firmado en 2017. El escolta validó la opción sobre la temporada 2021-2022 antes de ser enviado desde Dallas a Boston, un opción de 11,6 millones de dólares. Y ahora extiende su contrato con su nuevo equipo a partir de un acuerdo corto de 12,4 millones por una campaña, según ha avanzado Shams Charania (The Athletic).
El ex de Heat y Sixers, de 27 años, completó una temporada más bien decepcionante con los Mavericks, un año en el que promedió 12,1 puntos, 3,2 rebotes y 2,6 asistencias en 59 partidos.
La inclusión de Richardson en Boston debería dar al equipo un buen apoyo defensivo, si bien se trata de un jugador que cuando está en forma puede aportar de forma notable desde los dos lados de la cancha.