Era el momento de echarse a un lado y descansar después de un trabajo bien hecho durante muchos años. Dennis Lindsey ha anunciado mediante un comunicado que deja de ser vicepresidente ejecutivo de Utah Jazz para pasar a tener un rol de simple asesor del club.
Lindsey llevaba al frente de los despachos de Utah Jazz desde hace casi una década y la culminación de todo ese trabajo desarrollado por él y por su equipo ha sido ver a Utah encabezar la temporada regular en la Conferencia Oeste con la mejor marca de toda la NBA, pero ahora ha considerado que es el momento de que otros pulan el proyecto.
Esa labor recaerá en principio en Justin Zanik, general manager de Jazz, que será el que se ocupe del día a día del club en cuanto a las operaciones de baloncesto.
Además, el entrenador jefe, Quin Snyder, seguirá teniendo un importante peso en las decisiones que la franquicia tome en los despachos, según afirma el periodista de ESPN Adrian Wojnarowski.
Utah Jazz terminó la temporada regular en la primera posición del Oeste con 52 victorias y 20 derrotas, la mejor marca de toda la NBA, pero después, en los playoffs, no pudo acceder a las Finales del Oeste al caer en semifinales de conferencia ante los Clippers.