Otra gran figura que nos deja. Esta vez es Paul Westphal, un brillantísimo jugador y un notable entrenador que está en ese gran olimpo baloncestístico llamado Salón de la Fama. Fue campeón de la NBA con Celtics, pero sobre todo fue y es leyenda de los Suns.
Westphal ha fallecido a los 70 años de edad como consecuencia de un cáncer que se le había detectado en el cerebro en agosto de 2020. Ha informado de su deceso la franquicia de Phoenix Suns a través de un comunicado.
Jugó como universitario en USC, fue elegido por Celtics en el décimo puesto del draft de 1972 y un par de años después, en 1974, ganó el anillo de campeón de la NBA con el equipo bostoniano.
Eso sí, sus mejores años como jugador los vivió en Phoenix Suns. Fueron 5 años (luego se retiraría en los Suns jugando una sexta temporada) en los que fue elegido 5 veces All-Star, entró en 3 ocasiones en el Primer Equipo de la temporada y en una en el Segundo Equipo.
Lideró Westphal la hazaña de llevar a los Suns a sus primeras Finales de la NBA allá por 1976, logro que conseguiría también, llegar a las Finales con Phoenix, cuando fue entrenador. Sucedió en 1993.
Como jugador disputó 823 partidos de temporada regular y 107 de playoffs. Jugó para Celtics, Suns, Sonics, Knicks y de nuevo para Suns cuando se retiró, en la temporada 1983-1984.
En su etapa de técnico ejerció como entrenador jefe de Seattle Supersonics (3 temporadas), Phoenix Suns (4) y Sacramento Kings (3), además de ser asistente de los Nets entre 2014 y 2016. Con Suns llegó a unas Finales y un par de semifinales de conferencia. Su marca en temporada regular como entrenador fue de 318 victorias y 279 derrotas y en playoffs de 27-22.
Toda esa doble trayectoria como jugador y entrenador, doble trayectoria brillante, es un mero acercamiento a una figura importante para la NBA y crucial para los Suns, una gran figura que merece todo el reconocimiento en su adiós.