El Este premia a sus dos mejores equipos en la burbuja con una final de conferencia de pronóstico incierto.
Boston Celtics y Miami Heat ya conocen lo que es jugar finales de conferencia y Finales de la liga, y ya han experimentado con creces la sensación de ser campeones de la NBA.
Boston tiene 21 títulos de conferencia y 17 de la NBA; Miami atesora 5 títulos de conferencia y 3 de la liga. Ya se han visto las caras en una final de conferencia en 2012. Y han sido los equipos que mejor juego han desarrollado durante los playoffs que se están disputando en la burbuja de Orlando.
Dos grandes equipos, con lo que significa en su totalidad la palabra equipo, dos sobresalientes defensas, dos entrenadores de nivel y dos escuadras cuyas estrellas están completamente alejadas de la vacuidad mediática, prefiriendo adoptar perfiles bajos en el mejor sentido de la expresión.
Además de todo eso, dos responsables directivos atravesados por prácticamente 40 años de desencuentros y tiranteces no disimuladas: Danny Ainge (Celtics) y Pat Riley (Heat). Dos espíritus definitivamente irreconciliables.
Los Celtics se presentan en la final del Este con marca de 8-3 en playoffs (4-0 a Sixers y un agónico 4-3 ante Raptors) y los Heat están con balance de 8-1 (4-0 de Pacers y 4-1 a Bucks).
En sus enfrentamientos en temporada regular: 2-1 para Boston. Dos victorias que llegaron hace muchos meses, cuando el planeta aún no estaba metido en el desajuste global provocado por la pandemia de Covid-19. Llegaron esos triunfos el 4 de diciembre y el 28 de enero. Mientras, la victoria de Miami se registró ya en la burbuja, el pasado 4 de agosto.
Estos dos equipos acumulan tres enfrentamientos en postemporada en la última década. En 2010, Celtics se impuso en primera ronda 4-1; en 2011 ganó Heat 4-1 en semifinales de conferencia; y en 2012 volvió a ganar Heat, esta vez 4-3, nada menos que en una final de conferencia.
Boston Celtics se presenta en este duelo con un rating ofensivo en playoffs de 111,2 y uno defensivo de 102,7; Miami Heat lo hace con cifras de 112,9 y 105,4.
A partir del martes, 15 de septiembre, el primer partido de la serie, con muchas incógnitas por resolver.
Jayson Tatum, Jaylen Brown y Marcus Smart son los que han tirado de Boston en su dura eliminatoria contra Toronto. Habrá que esperar qué rendimiento ofrece el empequeñecido Kemba Walker y cómo se resuelve el rompecabezas Hayward.
Miami ha de tirar del liderazgo de Jimmy Butler, pero también del estrellato de Bam Adebayo y Goran Dragic (importante para Boston parar al esloveno en ataque y encontrarle en defensa).
Pero Heat es algo más que ese trío. Jae Crowder ha hecho una serie brutal ante Milwaukee y puede ser un jugador muy útil a la hora de parar a Tatum. Están los jóvenes Tyler Herro, al que no le tiembla la mano, y Duncan Robinson, aunque no ha estado muy prolífico en el tiro, la veteranía de Iguodala... profunda la plantilla de Miami.
Y luego están los entrenadores. Erik Spoelstra tiene la ventaja de haber vivido ya 4 Finales de la NBA con 2 anillos en la etapa de LeBron James. Pero Brad Stevens ya acumula 2 finales de conferencia perdidas, además de haber llegado a dos Final Four en la NCAA con la modesta Butler. Las pizarras serán muy importantes. En ese aspecto, Spoelstra está dando todo un clinic en estos playoffs.
Lo cierto es que se avecina una final muy interesante, con dos equipos que están ofreciendo un gran juego. Tenemos todos los ingredientes para disfrutar del baloncesto.