Los Timberwolves están en venta. Su propietario, el multimillonario Glen Taylor, tiene el firme propósito de vender la franquicia que compró hace 25 años por 88 millones de dólares. Ahora, no se desprenderá de ella por menos de 1.200 millones.
Taylor ha confirmado a The Athletic lo que ya había avanzado en su día el portal Sportico, que está estudiando la venta de la franquicia.
El dueño de los Wolves ha explicado a The Athletic que ha contratado al banco comercial The Raine Group para explorar dicha venta y ha aclarado que en ningún caso el equipo caerá en manos de alguien que quiera sacarlo de Mineápolis. La franquicia, se venda o no, permanecerá en su actual sede.
Uno de los candidatos a hacerse con el equipo es el exjugador Kevin Garnett, que vistió la camiseta de Minnesota Timberwolves durante los primeros 12 años de su carrera NBA.
Garnett ha confirmado sus intenciones, y para ello se está rodeando de un grupo de inversores.
Otro candidato para hacerse con el club es el desarrollador inmobiliario de Nueva York Meyer Orbach, que ya es socio minoritario de los Wolves desde 2016.
ESPN habla de Orbach, pero incide en que el principal candidato a la hora de comprar la franquicia es bien conocido en Mineápolis, ya que se trata de la familia Wilf, propietaria desde 2005 de los Minnesota Vikings, el equipo de fútbol americano de la ciudad.
No parece que vaya a haber ningún movimiento de forma inminente, pero una cosa está clara: los Timberwolves están en venta.