Han sido 24 horas de felicidad en un reino hasta entonces triste. Los Knicks venían de sorprender a todos ganando en Cleveland. Por 19 puntos. Para ganar de nuevo anoche. Ante Denver. Por un apretado 116-110. Con partidazo de Kristaps Porzingis.
El partido parecía decidido y roto al descanso. Los Knicks terminaron la primera parte ganando por 22 puntos. Contundente 65-43. Por entonces, Porzingis era una máquina imparable con 22 puntos. Enes Kanter funcionaba. Kyle O'Quinn asustaba desde la segunda unidad. Pero llegó el tercer cuarto y Denver consiguió meterse en el partido. A partir de ahí, emoción.
Fue bello ver el duelo entre el letón Porzingis y el serbio Nikola Jokic. El local hizo 38 puntos, 3 tapones y 4 triples. El visitante llegó a 28 puntos, 8 rebotes y 6 triples. Son dos jóvenes maravillosamente atípicos y talentosos.
O'Quinn hizo un partidazo. Firmó 15 puntos, 12 rebotes y 5 tapones en un ratito. Y el español Willy Hernangómez apenas pudo estar 3 minutos en cancha. Está fuera de la rotación de Jeff Hornacek. El duelo con su hermano Juancho fue imposible porque Juancho está lesionado.
En Denver, 20 puntos de Jamal Murray. Gary Harris añadió 18. Emmanuel Mudiay firmó una gran primera parte. Y Paul Millsap se enredó en ataque. Hasta acabar con un desastroso 2 de 13 en el tiro.