La vida da muchas vueltas. Es lo que estará pensando ahora mismo Patrick Ewing, una leyenda de la NBA por los números que hizo como jugador en su día, una leyenda prácticamente vinculada a los Knicks.
Pues bien, anoche, Ewing tuvo que debutar en la NBA como entrenador jefe, aunque fuera de forma provisional, en un banquillo. Ewing es el segundo de Steve Clifford en Charlotte Bobcats, lo que le obligó a tomar el relevo de su jefe que tuvo que ser hospitalizado al sufrir un problema de corazón. Y quiera la casualidad que anoche los Bobcats se enfrentaban a los Knicks.
De este modo, Ewing se enfrentó en su debut al equipo para el que jugó 15 de sus 17 temporadas como jugador profesional en la NBA. Y no hay que olvidar que Ewing lidera la tabla histórica de los Knicks en partidos jugados, puntos, rebotes, tapones y robos.
"Estaba nervioso al principio, pero una vez el partido comenzó fui capaz de calmarme y hacer mi trabajo", aseguró el técnico tras el partido, que acabó ganando New York por 91-101. "Desafortunadamente, no logré mi primera victoria", lamentó.