Greivis Vásquez hizo anoche su mejor actuación desde que milita en la NBA. Batió su récord de puntos, con 25, y su registro de asistencias, con 14, y encestó el triple que llevó el partido a la prórroga. Pero ni él, ni un increíble Ryan Anderson, autor de 8 triples, evitaron la derrota.
Ganaron los Suns en ese tiempo extra en un encuentro en el que resultó vital el empuje de un suplente como P.J.Tucker, que además terminó atrapando el rebote crucial del encuentro. Luis Scola apenas tuvo minutos, aunque lo hiciera bien cuando estuvo en cancha.
Tampoco tuvo sus minutos habituales José Manuel Calderón en la nueva derrota por la mínima de Toronto Raptors, que perdió en Detroit. Ni siquiera sirvieron los 34 puntos de Andrea Bargnani. Al final, el local Brandon Knight acertó para ganar y el visitante Kyle Lowry falló para perder.
El espectáculo, eso sí, llegó en Houston de la mano de los Rockets, que le endosaron 131 puntos a la mejor defensa del campeonato, la de los Knicks. Los texanos metieron 72 al descanso con 51 de James Harden y Chandler Parsons -26 y 25- en el ecuador del encuentro. Inservibles los 37 puntos de Carmelo Anthony. Mientras, el argentino Pablo Prigioni tuvo buenos minutos, aunque sin apenas trascendencia. El local Jeremy Lin vivió un festín colectivo en su primer enfrentamiento con su ex equipo.
Además, Brooklyn Nets en un monumental partido defensivo derrotó a los Clippers.
Phoenix 111 New Orleans 108 (tras prórroga)
Nunca una actuación tan grandiosa les supo tan a poco a Greivis Vásquez y su compañero Ryan Anderson. El venezolano acabó el partido con 25 puntos, 14 asistencias, 5 rebotes y un 10 de 13 en el tiro de campo para sumar una valoración de 35 en 43 minutos. Además, anotó el triple que llevó a su equipo a jugar la prórroga en Phoenix. Mientras, Anderson también estuvo en modo récord: 34 puntos, 11 rebotes y 8 triples de 13 intentos. Entre ambos firmaron un monumental partido que se quedó en nada.
Porque P.J.Tucker arruinó a unos Hornets que se presentaron sin el novato Anthony Davis. Tucker fue la avanzadilla de unas suplencia que fue capaz de dar la vuelta a un partido que fue una locura, una auténtica montaña rusa de sensaciones y números. Y es que New Orleans llegó a dominar por 19 puntos en el tercer cuarto para terminar colocándose 8 abajo cuando faltaba 1:30 para acabar el partido. Por medio hubo locura ofensiva de Goran Dragic y tensión competitiva de la segunda unidad de Phoenix.
Sin embargo, cuando todo parecía perdido, se obró el milagro (visitante). Con -8 y 90 segundos por jugar, los Hornets volvieron a entrar en ebullición, esa ebullición perdida en la recta final del encuentro. Ryan Anderson anotó su enésimo triple, Robin Lopez hizo una cesta cercana a pase de Greivis Vásquez y el venezolano culminó todo con un triple. Parcial de 0-8 y empate a 103 con 17 segundos por jugar. El último tiro de Jared Dudley no llegó a buen puerto y hubo prórroga.
En la prórroga, a los Hornets les pesó su atasco ofensivo: 2 puntos en los primeros 4 minutos del tiempo extra. Sin embargo, aún hubieran tenido tiempo de hacer algo si no se hubiera cruzado el bueno de Tucker cuando Jermaine O'Neal, que hizo un sorprendente doble doble, erró un tiro crucial al final y con 5 segundos por jugar Tucker se hizo con el rebote ofensivo. Fue el remate, aunque los visitantes aún tuvieran una ligera opción de empatar a la desesperada con 9 décimas de segundo por jugar. Pero el segundo milagro no llegó.
Al final, triunfo de Suns con 23 puntos de Markieff Morris, 20 y 8 asistencias de Goran Dragic y 15 y 7 rebotes del decisivo Tucker. Luis Scola acabó con 10 puntos en solo 18 minutos de juego.
Houston 131 New York 103
Los Knicks presumían de ser el equipo que menos puntos encajaba esta temporada hasta que James Harden y Chandler Parsons asolaron su defensa de forma sangrante anoche. Y solo precisaron para ello los 2 primeros cuartos del encuentro. Houston le hizo en la primera parte 72 puntos a unos Knicks que por momentos se podría pensar que estaban entrenados nuevamente por Mike D'Antoni y no por Mike Woodson. Y de esos 72 puntos, ¡51 llevaron la firma de la pareja: 26 de Chandler y 25 de Parsons en una actuación asombrosa!. También al descanso, 24 puntos de Carmelo Anthony. El Toyota Center parecía un recinto ferial.
Del golpe moral de recibir tal salvajada de puntos, los Knicks ya no se recuperaron. A lo más, intentaron convivir con una cierta dignidad que lejos de llegar se alejó, y terminaron perdiendo por 28 en su noche más triste de la temporada, en la que solo han perdido hasta la fecha 3 veces.
Los Rockets, que siguen sin Carlos Delfino sin Kevin McHale y sin utilizar a sus novatos, acabaron con 14 triples que anotaron con una efectividad del 56%, y dominaron en todas las facetas del juego. Harden finalizó con 33 puntos, 9 asistencias y 16 libres sin error alguno, Parsons batió su marca personal con 31 tantos, a los que añadió 4 robos y un 13 de 17 en el tiro de campo, y Omer Asik se comió a ese tan cacareado defensor llamado Tyson Chandler. El turco logró 18 puntos y 14 rebotes y Chandler, incompetente anoche para su tarea, le terminó haciendo una falta flagrante. Jeremy Lin, mientras, no fue decisivo en el desenlace, aunque debió gozar de lo lindo de la situación. Bueno, tal vez no tanto, porque no tiene pinta de que la revancha forme parte de su carácter.
En los Knicks, 37 puntos y 7 triples de Carmelo Anthony y 17 con 8 asistencias de Raymond Felton, los únicos que dieron la talla. El argentino Pablo Prigioni lo hizo bien, aun estando desacertado desde el triple. Logró 5 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias en 15 minutos.
Detroit 91 Toronto 90
Otra derrota por la mínima de los Raptors. Esta vez en una cancha relativamente asequible, como es la de los Pistons. Aunque ambos conjuntos, Detroit y Toronto, parecen tal para cual. Andan por lo más profundo del pozo del Este con idéntica marca: 3 victorias y 10 derrotas.
El encuentro fue un mal sueño para el español José Manuel Calderón. Porque esta vez fue suplente-suplente. Es decir, suplió a Kyle Lowry durante 16 minutos, pues no compartieron cancha. Eso hizo que el español ni siquiera estuviera en la pista en los minutos finales, cuando se decidió el encuentro, algo que no le suele pasar casi nunca. Acabó el extremeño con 5 puntos y 3 asistencias en 16 minutos, viendo cómo su peso en el equipo parece degradarse, tal y como cabía esperar con la llegada de Lowry. Aunque para degradada la situación de Charlie Villanueva en Detroit. No huele la pista.
Ni siquiera un magnífico Andrea Bargnani (34 puntos) sirvió para que los Raptors ganaran. Eso sí, el italiano sigue con su alergia al rebote. Lowry se quedó en 19 puntos y falló en el tiro final y DeMar DeRozan hizo un partido para olvidar.
Los locales doblaron en puntos anotados en la pintura a su rival y supieron concretar al final con 2 cestas fáciles de Tyshaun Prince y Brandon Knight, ésta última la ganadora a 7 segundos del final. Lowry, luego, no supo decidir para Toronto. Greg Monroe logró 19 puntos, 11 rebotes y 5 asistencias, Prince y Knight, los decisivos, añadieron cada uno 16 tantos y el novato Andre Drummond rubricó su primer doble en la NBA con 13 puntos y 13 rebotes.
Defensa brutal de Brooklyn
Los Nets mostraron su poderío en el Barclays Center. Victoria ante los Clippers (86-76), uno de los equipos importantes del Oeste, y 5 triunfos en 6 partidos jugados en casa.
La defensa local en la segunda parte y, especialmente, en el cuarto final fue francamente grandiosa. Los Nets dejaron a los Clippers en 29 puntos en la segunda parte y las 2 estrella visitantes, Blake Griffin y Chris Paul, no anotaron ni un solo punto en el cuarto final, cuarto en el que Griffin ¡ni siquiera lanzó a canasta!.
Brook Lopez lideró el triunfo con 26 puntos y 3 tapones, Joe Johnson mejoró para irse a 19 y Reggie Evans complementó a Lopez con el rebote al lograr 12 capturas en 22 minutos. Además, Gerald Wallace está en estado de gracia defensivo. Ni siquiera precisaron los locales al mejor Deron Williams. En el equipo angelino, 14 puntos y 8 rebotes y 14 tantos y 9 asistencias de Griffin y Paul, desarmados al final, y doble doble con 13 rebotes de DeAndre Jordan.