El propietario de los Knicks, Jim Dolan, y su entrenador, Mike D'Antoni, se estarán revolviendo ahora mismo en sus camas por distintos motivos, pero con los mismos protagonistas dentro de sus pesadillas: Danilo Gallinari, Al Harrington, Timofey Mozgov y los Denver Nuggets.
El partido del morbo no pudo resultar más letal para los Knicks, que perdieron tras 2 prórrogas su tercer partido consecutivo en el Madison y vieron cómo Gallo ejercía de superestrella y Harrington y Mozgov se marcaban muy buenas actuaciones.
Mientras, en clave hispana, duelo texano en Houston con victoria de Rockets sobre Spurs aprovechando las ausencias en San Antonio de Tim Duncan y Manu Ginóbili. Scola metió 12 puntos y Splitter hizo el mejor partido que se le recuerda en la NBA: 25 puntos y 10 rebotes.
Además, Miami ganó a Philadelphia, jugando 2 minutos el defenestrado Nocioni, y Detroit derrotó a Portland con un gran Stuckey.
Gran victoria de Denver en un gran partido
Rudy Fernández no pudo jugar en el Madison, así como tampoco el escolta titular de su equipo, Arron Aflalo. Pero Rudy pudo vivir desde la banda la pasión del baloncesto en el partido del morbo. Triunfo de Denver en NY por 114-119 tras la disputa de 2 prórrogas y 3 ex jugadores de los Knicks como máximo anotadores de los Nuggets. Tremendo. D'Antoni mirando al rival como objeto de deseo por tener todas las piezas necesarias para jugar como él quiere. A cambio, los Knicks cuentan con jugadores de calidad, pero para jugar a otra cosa. Y la sombra del Madison es alargada.
Los Knicks perdieron su tercer partido consecutivo en casa y además se quedaron sin Josh Harrellson, que se rompió la muñeca al final de la primera prórroga. Carmelo Anthony fue su faro para bien y para mal. Sin Melo no hubieran llegado a los tiempos extras, pero con Melo perdieron el partido en una jugada final desafortunada por parte del alero, que acabó con 25 puntos y 10 rebotes, pero 10 de 30 en el tiro. Fields y el novato Shumpert metieron 18, Bill Walker hizo 15 en sólo 11 minutos y Stoudemire estuvo gris pese a su doble doble.
En el otro lado de la cancha, Danilo Gallinari, la apuesta del draft de D'Antoni, su más querido pupilo, el hijo de un buen amigo, terminaba asestando quién sabe si el golpe definitivo al técnico de los Knicks. Gallinari estuvo en gran jugador y fue más decisivo que Anthony, acabando con 37 puntos, 11 rebotes y 18 de 20 desde el tiro libre. Pero lo peor fue que otros 2 ex Knicks le siguieron como máximos anotadores: Al Harrington (24 tantos y 11 rebotes) y el ruso Mozgov (16 puntos). Entre los 3 sumaron 77 puntos e hicieron morder el polvo a Dolan. Y Mozgov, además, a algún analista neoyorquino aventajado. Nene Hilario y Andre Miller sumaron sendos dobles dobles para ayudar al triunfo. Y George Karl, a los Mike D'Antoni, jugó un partido de 58 minutos con una rotación de sólo 7 jugadores. Todo esto, como digo, lo vio y lo vivió desde la banda con pasión Rudy Fernández.
Houston 105 San Antonio 102
Los Rockets se impusieron en un extraño duelo texano a los Spurs. Extraño porque San Antonio afrontó el partido sin Tim Duncan y Manu Ginóbili. Y eso es mucho. Aún así, los de Popovich equilibraron esas bajas. Tony Parker puso un paso extra ausente Manu y se fue a 24 puntos y 13 asistencias y Tiago Splitter dio varios pasos hacia delante para convertirse en el mejor de los suyos en su mejor partido NBA: 25 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias y 11 de 13 en el tiro de campo. Estuvo inmenso. Lo peor es que Richard Jefferson, pese a meter un importante triple a 11 segundos del final, volvió a esconderse. Y ya van.... Matt Bonner salió de titular y metió 16 puntos.
Houston ganó, como hizo Memphis anoche, su sexto partido consecutivo y confirmó su solidez como local (7-1), que corre paralela a la fragilidad de los Spurs como visitante (1-6). Ahora, ambos equipos tienen casi el mismo balance en la clasificación, lo que no dice mucho a favor de los Spurs.
Kevin Martin fue el máximo anotador de los Rockets con 25 puntos y otros 5 compañeros anotaron 12 o más. Lowry hizo 14 con 8 asistencias, Goran Dragic estuvo muy bien, Dalembert colocó 6 tapones y el argentino Luis Scola contribuyó con 12 tantos, 7 rebotes y 2 asistencias en 27 minutos. Houston estuvo acertado en el tiro, pero sufrió en demasía en el rebote. Sin embargo, sobrevivió al triple final de Gary Neal que buscaba el empate. Y ganó a su rival texano.
Miami 113 Philadelphia 92
Asusta pensar que uno de los equipos más sólidos del Este sea vapuleado de esta manera en el AmericanAirlines Arena. Pero los Heat son los Heat aunque jueguen sin Wade. Para suplir esa ausencia se multiplicaron Chris Bosh y LeBron James. El primero logró 30 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias; el segundo se mostró muy completo con 28 tantos, 9 rebotes, 5 asistencias, 4 robos y 3 tapones. A su lado, buenos desempeños de Chalmers, Haslem y Anthony en un triunfo fácil en el que el equipo anotó el 54% de sus tiros y capturó 53 rebotes por 31 de su rival.
Fue tan claro el partido que por eso jugó el defenestrado Nocioni. Eso sí, 2 minutos, el que menos lo hizo del equipo. Falló su único tiro el santafesino y en esos 2 minutos su equipo recibió un -8. La clave del mal juego visitante radicó en su pésima defensa y la mala actuación de Iguodala, que se quedó en su peor puntuación de la temporada con 4 puntos. Los mejores de Sixers fueron Lou Williams con 22 puntos y 4 triples y Evan Turner con 16 unidades. Vucevic fue titular y no lo hizo nada mal.
Y en partido sin hispanos, Detroit derrotó 94-91 a Portland. Resultado sorpresa por la trayectoria de ambos equipos y actuación estelar de Stuckey, que fue titular junto al novato Knight. Rodney Stuckey sumó 28 puntos con 4 de 5 triples y metió 4 tiros libres en los últimos 7 segundos del choque que fueron decisivos. Tayshaun Prince añadió 17 puntos y Knight cumplió con creces.
En Portland, ausente Gerald Wallace fue titular Nicolas Batum. Aldridge metió 25 puntos y Felton 20 a los que añadió 9 asistencias. El equipo se desangró en el triple -3 de 20-, derramando más sangre que la que derramó el sueco Jerebko, al que le tuvieron que dar un par de puntos de sutura en la cara tras recibir un codazo involuntario de Craig Smith.