Los Spurs siguen vivos en la fase final de la NBA y lo están gracias a Manu Ginóbili. El argentino estuvo fantástico todo el partido y anotó canastas decisivas en los últimos segundos, cuando su equipo parecía al borde de la derrota. Sobre la bocina, Neal forzó una prórroga que les llevó a la victoria.
La nuevamente destacada actuación de Zach Randolph y Marc Gasol en los Grizzlies, Greivis Vasquez no estuvo especialmente afortunado en esta ocasión, no fue suficiente y habrá que ver cómo encajan los de Lionel Hollins una derrota como ésta, cuando ya saboreaban las mieles de la clasificación.
Mientras, Miami Heat y Oklahoma City pasaron a la siguiente ronda tras desembarazse por idéntico marcador (4-1) de Philadelphia y Denver. Eso sí, ambos sufrieron de lo lindo para ganar el quinto partido de sus series. Lo más destacable, el partidazo de Kevin Durant, que anotó 41 puntos.
San Antonio 110 Memphis 103 (tras prórroga) (2-3)
Los 48 minutos de tiempo reglamentario del partido que enfrentó anoche a Spurs y Grizzlies se resolvieron en 14 segundos finales frenéticos, con canastas increíbles, y terminaron con un triple de Gary Neal sobre la bocina que llevó el partido a la prórroga. Un tiempo extra que resultó favorable para los locales, que siguen así vivos en la competición.
Perdieron ayer los Grizzlies una inmejorable oportunidad de haber cerrado la eliminatoria y eso que, de inicio, no parecía que éste fuera a ser su partido. Empezaron fríos los de Memphis y muy concentrados los locales liderados por Manu Ginóbili, que terminó con 33 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias.
El argentino anotó 15 puntos en el segundo cuarto y los Spurs llegaron a tener 16 de ventaja mediado ese periodo, pero los Grizzlies consiguieron minimizar los daños antes del descanso y meterse de lleno en el partido en un gran tercer parcial en el que sólo permitieron 15 puntos a todo el equipo rival.
Llegaron los últimos 12 minutos y a los locales les pasó lo peor que les podía pasar. Despertó Randolph, sólo 8 puntos hasta entonces, y los Grizzlies asumieron el mando del encuentro. Parker, 24 puntos y 9 asistencias al final, y Ginóbili, con las puntuales ayudas de Hill y Splitter, evitaron que los visitantes adquirieran una ventaja significativa y el partido llegó al último medio minuto con una mínima ventaja para los de Memphis (90-91).
Esos últimos segundos fueron trepidantes. Primero, Randolph anotó un tiro de 5 metros con la posesión casi agotada y sólo 14 segundos para el final. A continuación, una jugada de listo de Ginóbili le permitió anotar una canasta rápida a pase de Duncan, pero 2 tiros libres de Randolph volvieron a dejar en 3 la ventaja con posesión para los locales.
Ahí vino la primera de las jugadas determinantes. Los Spurs estuvieron a punto de perder el balón en 2 ocasiones ante la presión defensiva del rival y los segundos pasaban pero, cuando todo parecía perdido para los locales, Manu rescató el balón y se sacó de la manga un increíble tiro desde la esquina. El balón entró limpio, con poco más de 2 segundos en el reloj, para mantener la esperanza en una grada angustiada, pese a que los árbitros lo dieron como doble, tras visionar la repetición, al pisar el argentino con la punta de la zapatilla la línea de 3.
Una rápida falta sobre Randolph, que no falló desde el tiro libre, les dejó a los Spurs unos raquíticos 1,7 segundos para buscar un último tiro con el que forzar la prórroga... y lo encontraron. Ginóbili sacó de banda para Neal y el novato de San Antonio dribló a su defensor y lanzó un triple frontal sobre la bocina que llevó el partido al tiempo extra.
En el tiempo adicional, Tony Parker llevó la iniciativa y los Grizzlies, tocados por el final del tiempo regular, perdieron pie en el último minuto permitiendo que los Spurs se llevaran una victoria que les permite seguir pensando en remontar la eliminatoria.
De nada sirvieron los 26 puntos y 11 rebotes de Randolph, los 20 de Conley o los 18 de Young. En cuanto a los hispanos de Memphis, Marc Gasol realizó un gran trabajo defensivo sobre Duncan y aunque no estuvo fino en el tiro (5 de 14), terminó con 11 puntos y dominó el rebote bajo su canasta haciéndose con 17 capturas. Greivis Vasquez estuvo algo más de 10 minutos en pista en los que sumó 2 puntos y 3 asistencias.
Miami 97 Philadelphia 91 (4-1)
Miami ganó con muchos apuros a Phildelphia para cerrar la serie con un rotundo 4-1 e irse en busca de los Celtics en unas semifinales de conferencia que prometen dejarnos emociones fuertes.
En cuanto a este quinto partido de su eliminatoria con los Sixers, los Heat no lo pasaron nada bien. De hecho, llegaron a los últimos segundos con el agua al cuello para terminar triunfando.
Llama la atención el que en esta ocasión 2 secundarios, 2 miembros de la segunda unidad, cobraran gran protagonismo en el triufno.
Por una parte, Mario Chalmers, se metió de lleno entre el 'big three' local al estar a su altura. El base suplente de Miami se fue a 20 puntos con 6 triples de 12 intentos y su equipo sumó un +20 en los 31 espléndidos minutos que el jugador se forjó en la pista. Por otra, tuvimos a Joel Anthony, que jugó 39 minutos para no lanzar ni una sola vez a canasta en juego. Eso sí, falta de 16 segundos anotó como si nada los 2 tiros libres decisivos que dieron tres cuartas partes del partido a los suyos.
En el lado contrario, dos jugadores veteranos apenas fueron vistos en la cancha. Bibby e Ilgauskas salieron de titulares, jugaron 4 minutos, encajaron un -10 y si te he visto no me acuerdo, porque Spoelstra no volvió a contar con ellos.
Lo demás, más o menos lógico, según el guión previsto. Wade, el mejor, terminó 26 tantos, 11 rebotes y 7 asistencias, Bosh agregó 22 y 11 rebotes y un más reposado James se contentó con 16 puntos, 10 rebotes y 8 asistencias. Sólo anotaron 6 jugadores del equipo y fuera de Wade, Bosh, James y Chalmers sólo hubo 13 puntos.
A los Sixers se le fue el partido desde el triple (12 los locales por 2 los visitantes) y también, por qué no decirlo, por la excesiva permisividad de los árbitros, que sólo pitaron 12 faltas a los Heat.
Tras 4 cuartos bien igualados, todo se decidió al final. Un 'fade away' de Iguodala acercó a los Sixers a 1 punto (92-91) a 36 segundos del final, pero el equipo no supo rematar.
Precisamente, Iguodada (22 puntos y 10 rebotes) y otro veterano, Elton Brand, con 22 tantos también, fueron los artífices del juego ofensivo visitante. Young, Meeks y Holliday sumaron 10 o más puntos, Evan Turner ayudó en el rebote y Andrés Nocioni, tal y como predijo, despidió la temporada desde el banquillo.
Oklahoma City 100 Denver 97 (4-1)
También sufrieron de verdad los Thunder para cerrar su enfrentamiento con los Nuggets. Pero todo es más llevadero si uno tiene en sus filas a Kevin Durant.
Durant protagonizó anoche otra formidable exhibición en la que demostró una vez más cómo es capaz de conjugar elegancia y eficacia. El alero de los Thunder endosó al rival 41 puntos y lo masacró en los segundos finales.
No es exageración alguna. Durant lo hizo todo y todo lo hizo bien en los 90 segundos finales del partido, los más comprometidos. En ese minuto y medio, la estrella local metió 9 puntos, todos los que anotó su equipo, incluida la canasta del 100-97 lograda a 12 segundos de la conclusión. Pero es que, además, en la jugada final taponó el triple de J.R.Smith que buscaba el empate, siendo por lo tanto decisivo en los dos lados del campo. Aún tuvo Afflalo un triple postrero, pero tampoco entró.
Los 41 puntos de Durant permitieron a Oklahoma City ganar un partido en el que dominaron el rebote, pero sólo anotaron el 36,6% de sus tiros. Un partido lleno de emoción y alternativas, ya que el liderazgo en el marcador se turnó 19 veces.
Junto a la gran noche anotadora de KD, el equipo de Scott Brooks contó con la ayuda desde la segunda unidad de Harden, la aportación de Sefolosha, el buen partido de Perkins (11 puntos y 9 rebotes) y la brutal actuación defensiva de Ibaka. El jugador congoleño sólo metió 1 punto en todo el partido, pero capturó 8 rebotes y ¡colocó 9 tapones!. Inmensa su intimidación. El que no anduvo fino fue Westbrook, que se quedó en un 3 de 15 en el tiro. Pero la grandeza de este equipo es que funciona como tal.
En Denver, no jugó una vez más Gary Forbes y el equipo interpretó un juego ofensivo coral en el que participaron muchas piezas. Affalo sumó 15 puntos, Kenyon Martin 14 y 10 rebotes y Lawson y Felton anotaron cada uno 13.