Los Lakers no terminan de convencer. Cuando parece que ya han adquirido su velocidad de crucero, llegan y pierden en casa con Sacramento en una mala noche de sus hombres altos. Todo lo contrario que los altos de Memphis, artífices de una gran remontada en Filadelfia.
Andrés Nocioni tuvo que ver impotente desde el banquillo como sus Sixers perdían ante los Grizzlies una ventaja de 21 puntos. Buen partido de Marc Gasol, discreto de Greivis Vásquez y el bravo alero santafesino que no mereció ni un segundo de juego para su entrenador Doug Collins. O.J. Mayo empezó anoche a cumplir su sanción de 10 partidos por dopaje.
En Cleveland, más de lo mismo, nueva derrota (y ya van 19) de los Cavs. Esta vez ante unos Denver Nuggets en los que no jugó el panameño Gary Forbes.
Tampoco les va muy bien a Washington, que aún no han ganado ningún partido como visitante. Anoche perdieron tras 2 prórrogas ante los Thunder, liderados por los 40 puntos de Durant, pero sobre todo por el fantástico triple-doble de Westbrook (35 tantos, 13 rebotes y 13 asistencias).
L.A. Lakers 95 Sacramento 100
Inesperado desenlace en un duelo californiano 'a priori' sin historia. Inesperado porque quíen iba a esperar un batacazo de los dobles campeones de la NBA con uno de los peores equipos de la liga y en casa. Y es que los Kings se presentaron en el Staples Center acumulando sólo 10 victorias (y nuevamente sin Francisco García, lesionado).
Pero lo más sorprendente de la noche fue comprobar cómo la victoria se iba a los Kings por la superioridad de sus hombres altos, elemento éste que todos los analistas coincidían en asegurar antes del choque que sería la clave para una victoria local holgada.
Sorpresas da la vida: Cousins, Dalembert y Landry mojaron la oreja a Gasol, Bynum y Odom. Muy mal los hombres altos angelinos.
Los Lakers vivieron dos cuartos centrales decepcionantes. La suma del segundo y tercer períodos se saldó con un parcial de 38 a 55 y en el transcurso del tercer acto el equipo de Westphal llegó a dominar por 20 puntos (61-81 a 4 minutos del final del cuarto).
Resultaba humillante la situación, pero dejó de serlo porque los Lakers encauzaron la remontada en el último cuarto más por calidad que por juego y más por el miedo al éxito del rival que por desarrollar los locales méritos en abundancia.
Esa remontada llevó la firma de Kobe Bryant (38 puntos y 7 asistencias), el mejor con diferencia de los locales sólo apoyado por Shannon Brown (17 puntos desde el banquillo). Porque el resto anduvo pensando en otra cosa. Aún así, el equipo se llegó a poner a 3 puntos (90-93 a 2:43 del final) tras un tiro libre de Gasol. Entonces, todavía se creían en la remontada. Hubiera sido injusta.
Los Lakers anduvieron toda la noche mal en defensa y discretos en ataque, no dominaron el rebote, metieron menos puntos en la pintura que su rival (35-50) y fueron a remolque. Merecida derrota.
Gran partido de los Kings. Enormes sus hombres altos, especialmente el novato Cousins (ya dijimos que este chaval es bueno), que hizo una primera parte colosal en la que anotó 22 puntos. Cousins se doctoró en el Staples con 27 puntos, 10 rebotes y 3 robos en 32 minutos de juego. Pero es que, además, el haitiano Dalembert marcó 18 puntos, su mejor marca de la temporada, y Carl Landry añadió 12 con 10 rebotes (ambos formando parte inicialmente de la segunda unidad). El acierto desde el perímetro llegó de la mano del israelí Casspi -20 puntos y 8 rebotes-.
Frente a todo ese arsenal, Bryant estuvo demasiado solo porque los hombres altos de los Lakers, el elemento clave de sus éxitos, fueron desactivados: Bynum, 12 puntos, Gasol, 9 y 11 rebotes en 38 minutos con 4 de 11 en el tiro doble y Odom, 4 puntos y 8 rebotes con 0 de 7 en el tiro de campo.
Kobe Bryant subió un nuevo peldaño. Adelantó al mítico Olajuwon y se convierte ya en el octavo jugador que más puntos ha anotado en la historia de la NBA. Pero se fue triste, muy triste del Staples Center.
Philadelphia 94 Memphis 99
Si los Lakers de Pau Gasol no fueron capaces de terminar de remontar un déficit de 20 puntos, su ex equipo, los Grizzlies, y actual escuadra de su hermano Marc sí finalizó con éxito una extraordinaria remontada en Filadelfia, donde llegó a ir perdiendo por 21 tantos de diferencia.
La fe mueve montañas. El tercer cuarto había acabado con un 73-57 para los Sixers ante unos Grizzlies atascados en ataque que habían llegado a estar 21 abajo. Pero el último cuarto derivó en un giro inesperado, giro copernicano que dejó un parcial en los últimos 12 minutos de ¡21 a 42!.
Doblaron los visitantes a los locales en el último período a base de una ofensiva sin límites. Todo lo contrario que Philadelphia, que en el último cuarto perdió 10 balones.
En el Wells Fargo Center no se lo creían. De nada sirvió el gran acierto local en el triple -13 de 20-, porque los visitantes ganaron el partido sin echar mano prácticamente de esa vertiente del juego. Sólo lanzaron 5 triples en el partido (metieron 1). Lo suyo fue más una labor de golpear con el ariete en posiciones cercanas a canasta y vivir de unos últimos 12 minutos felices.
Aún así, el partido no se decidió hasta el final. Y es que cuando Memphis lo dominaba ya merced a su acierto en los tiros libres, llegaron en los últimos segundos sendos triples de Battie y Meeks que apretaron el marcador. Incluso tuvieron los Sixers una jugada para empatar (con 94-97 en el luminoso), pero perdieron el balón.
Zach Randolph fue el líder de un equipo que jugó de forma coral, con una envidiable socialización del juego, y que no pudo contar con O.J. Mayo, sancionado. Randolph acabó con 22 puntos y 12 rebotes y metió 6 de 6 tiros libres en los últimos 10 segundos del partido.
Los 5 titulares visitantes lograron dobles dígitos en anotación y 2 suplentes rozaron la decena. Fueron Tony Allen y Darrell Arthur, que resultaron muy importantes en el inicio de la remontada. Rudy Gay supo jugar en equipo (16 puntos y 4 asistencias) y Marc Gasol aún más, ya que no destacó en nada pero no faltó en ningún sitio del campo: 12 puntos, 4 rebotes, 5 asistencias, 3 tapones y 2 robos en 33 minutos.
En cuanto a Greivis Vásquez, estuvo discreto, tal vez influido por los rumores sobre la llegada de Jason Williams. Mejor en su segunda aparición que en la primera, el venezolano terminó con 2 puntos y 2 asistencias en 10 minutos de estancia en pista.
Cleveland 103 Denver 117
Partido sin hispanos, ya que el panameño Gary Forbes no jugó. Y partido sin historia, puesto que Cleveland es una ruina, un despojo como equipo. Ya acumula 19 derrotas consecutivas.
Lo peor no es perder, sino el modo. El equipo parece salir sin ningún ánimo de victoria, sin interés. En sus primera partes ya ha perdido siempre sus opciones de victoria porque no defiende nada. Ante los Nuggets al descanso, 50-70.
Carmelo Anthony dirigió la ofensiva de Denver con 33 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias, yéndose 18 veces a la línea de castigo. Su compañero Afflalo sumó 23 con 4 triples.
En los descarnados Cavaliers, Hickson logró 24 puntos y 14 rebotes con 10 de 12 en el tiro, Jamison sumó 20 tantos, 12 rebotes y 6 pases de canasta y Sessions logró 14 y 13 asistencias.
Oklahoma City 124 Washington 117 (tras 2 prórrogas)
Washington, como visitante, no tiene nada que envidiar a Cleveland. Los Wizards aún no han ganado un partido fuera de su casa y ya van 3 meses de competición. Su balance: 0-22.
Eso sí, la imagen que deja el equipo capitalino nada tiene que ver con la dejada por los Cavaliers. De hecho, los Wizards forzaron anoche una doble prórroga en una plaza fuerte como es Oklahoma City. El partido acabó con empate a 103, la primera prórroga igualada a 110 y el segundo tiempo extra decidió.
Para decidir, los locales tuvieron que contar con el mejor Kevin Durant (40 puntos y 7 rebotes) y, sobre todo, con un mágico Russell Westbrook, autor de un triple-doble de fantasía: 35 puntos, 13 rebotes y 13 asistencias. El equipo no pudo disponer de Sefolosha y Harden ocupó su puesto en el cinco inicial.
Los Wizards hicieron un gran partido y sólo perdieron 8 balones en 58 minutos, una cifra espectacular, pero se quedaron a las puertas de estrenarse como visitantes. Nick Young fue su jugador más prolífico con 32 puntos (logrados, eso sí, tras 33 tiros). Un Young que forzó la primera prórroga. Además, Rashard Lewis aportó 22 tantos, 8 rebotes y 4 triples y Trevor Booker, que fue titular, finalizó con 21 puntos, 12 rebotes y 9 de 11 en el tiro de 2.