Los tiempos cambian y las pistas de la NBA se ven obligadas a modernizarse o morir. Una de las que serán abandonadas esta temporada es el actual Amway Arena de los Orlando Magic, que jugarán esta noche su último partido de temporada regular en él.
Si todo va bien, el próximo otoño los Orlando Magic comenzarán la temporada en el nuevo Amway Arena, una moderna instalación con capacidad para 18.500 espectadores en la que la ciudad de Orlando ha invertido 480 millones de dólares, 50 de ellos aportados por la franquicia de la NBA.
La nueva pista, una demanda desde hace años del propietario de la franquicia, sustituirá a la que durante 21 años ha sido el hogar de los Magic y en la que se han vivido, y todavía se han de vivir en estos playoffs, grandes momentos.
La jubilación del Amway Arena y el Izod Center, pista de los Nets, es un paso más en la necesaria modernización de las pistas de la NBA en busca de mayores comodidades y más amplias posibilidades comerciales.
Sólo 5 pistas superan actualmente en antigüedad al viejo Amway Arena -el Oracle Arena (Warriors), el Madison Square Garden (Knicks), el Bradley Center (Bucks), el Arco Arena (Sacramento) y The Palace of Auburn Hills (Pistons)-, pero casi todas ellas tienen proyectos de remodelación en marcha o de construcción de nuevas pistas que las sustituyan.