Pau Gasol y Marc Gasol protagonizaron una monumental exhibición en la doble sesión dominical celebrada en el Staples Center. Primero jugó un Marc pletórico que vio cómo al final se le escapaba la victoria a Memphis; después, Pau tomó el relevo en una fácil victoria ante los Nets.
La doble sesión angelina no pudo tener un resultado redondo debido al increíble desenlace del Clippers-Grizzlies. Los de Tennessee dominaban con desparpajo un partido en el que estaban jugando de cine. Ganaban por 18 al inicio del último cuarto, pero un parcial de 33-5 les dejó con cara de tontos.
Mientras, los Lakers, tal y como estaba previsto, llenaron poco después el Staples para vapulear al peor equipo de la liga, los Nets, que con 17 derrotas en 17 partidos empatan el peor arranque de un equipo en la historia de la NBA.
En Miami, los Heat cayeron ante Boston Celtics con actuación desangelada de Carlitos Arroyo.
L.A.Lakers 106 New Jersey 87
Se veía venir. Nadie daba nada por estos Nets en su visita a Los Ángeles, y sucedió todo lo que se esperaba, los Lakers, con Bryant y Gasol a la cabeza, dieron un soberano repaso a un equipo que cuenta sus 17 primeros partidos de la temporada por derrotas, empatando así el peor inicio de la historia de la NBA, que comparte ahora con Miami (1988) y Clippers (1999).
Horas antes de esta nueva derrota, la franquicia había prescindido del que fue su entrenador durante casi 6 años, Lawrence Frank. El caramelo envenenado quedó en la boca de su sustituto, el unas horas antes técnico asistente Tom Barrise.
El guión se cumplió a rajatabla. Los Lakers, como sucede desde que regresara Pau Gasol, se pasearon de principio a fin. Pusieron la directa en el primer cuarto (27-12) y siguieron marcando diferencias en el segundo hasta plantarse en el descanso 25 puntos arriba (59-34). Todo lo demás sobró, pues fue ésta una victoria al ralentí, sin despeinarse.
Los locales no tuvieron rival, y Kobe Bryant y Pau Gasol se exhibieron sin ningún remilgo. El primero acabó con 30 puntos, 8 rebotes, 7 asistencias y 5 de 8 triples; el segundo aportó 20 tantos, 9 rebotes y 7 asistencias tras anotar 8 de sus 13 tiros de campo. Entre los 2, el abuso: 50 puntos, 17 rebotes, 14 asistencias y 19 de 30 en el tiro de campo. Fueron los que más anotaron y los que más puntos regalaron a sus compañeros. Fueron, en definitiva, el tándem perfecto.
A los Lakers les hubiera bastado con sus dos mejores hombres y con su acierto en el triple (13 de 25), pero además contaron con el buen partido de Farmar -15 puntos en 18 minutos- y la intimidación de Bynum -5 tapones en 24-.
Se trató del quinto paseo militar de los de Jackson una vez instaurado el terror Bryant-Gasol. Y el equipo se mantiene segundo en el Oeste con 13 triunfos y 3 derrotas.
En los Nets, con Nájera ausente por lesión y Frank por destitución, Barrise se limitó desde el banquillo a contemplar la debacle, en la que sólo algunos hombres salvaron sus vergüenzas personales. Sobre todo lo hizo un gran Brook Lopez (26 puntos y 12 rebotes) y también, en menor medida, Devin Harris -16 y 6 asistencias- y Courtney Lee -15 puntos-.
Fue así cómo los Lakers vivieron una plácida noche y su jugador Shannon Brown celebró sin sobresalto alguno sus 24 cumpleaños.
L.A.Clippers 98 Memphis 88
Si el partido de Pau Gasol, rozando el triple-doble, fue sensacional, no menos lo fue el de su hermano Marc horas antes en el Staples Center. Lástima que terminara en 'tragedia'.
De nada sirvió la exhibición de Gasol en los tres primeros cuartos. Sus números al final del partido lo dicen todo, hablan de una gran figura: 26 puntos, 5 rebotes, 6 asistencias, 3 tapones y 3 robos de balón en 42 minutos, con 13 de 18 en el tiro de campo.
Pero a pesar de esos numerazos, el jugador catalán se fue de L.A con tristeza y pesadumbre en el rostro. No era para menos, su equipo había perdido de forma incalificable un partido que tenía prácticamente ganado. Nadie se lo puede explicar.
El gran beneficiado fue el técnico local, Mike Dunleavy, que logró su victoria número 600 en temporada regular de un modo inequívocamente mágico. Pues mágico es lo que sucedió.
Los Grizzlies habían bordado el baloncesto. Se fueron al descanso con 15 puntos de ventaja (43-58), cerraron el tercer acto 16 arriba (65-81) y nada hacía presagiar su triste desenlace cuando Gay anotó nada más empezar el cuarto período y puso al equipo 18 arriba (65-83). A partir de ahí surgió la nada, un vacío inexplicable que enterró todo lo grande hecho por los de Hollins hasta entonces.
El parcial en los últimos 11 minutos de partido fue, átense los machos, ¡33-5!. Parecía una alucinación.
Los Grizzlies anotaron en ese tiempo 1 sola canasta en juego, obra de Gasol, con una serie de ¡1 de 17 en el tiro!, errando muchos de ellos a base de tapones del rival. Y por si fuera poco, perdieron 6 balones en unos minutos que resultaron cada vez más caóticos y que desataron la locura en la parroquia local.
Los Eric Gordon, Al Thornton y Marcus Camby sembraron el terror en Memphis en ambos lados de la cancha. A algo más de 3 minutos del final ya sólo perdían los locales por 6 puntos, a 2:26 por 3 y a 2:03 para el final empataron a 88 los Clippers. Poco después, a 1:39, los de Dunleavy se adelantaban ya (90-88) ante la incredulidad general. Y a partir de ahí, todo fue a peor para Gasol y los suyos, que acabaron humillados, sin aliento, con caras de estar totalmente noqueados, sobrepasados por una situación anómala que no comprendían.
Terminaron levantando los brazos de la victoria los Gordon (29 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias), Thornton (18 tantos) y Camby (14 puntos, 14 rebotes y 3 tapones) frente a los Gay (15 tantos y 10 rebotes y Tinsley (12 puntos y 7 asistencias tras una gran primera parte).
De nada sirvió el partidazo de Gasol en ataque y en defensa, anuló a Kaman. Sí se echó al final en falta a hombres como Mayo y Randolph, que estuvieron desastrosos y que terminaron con 8 y 5 puntos tras sumar entre ambos una serie de 3 de 18 en el tiro de campo.
Miami 85 Boston 92
Duelo de equipos punteros del Este en Miami y victoria del mejor de ellos, los Celtics, merced a la calidad de un enorme Kevin Garnett.
Garnett fue la estrella del partido con 24 puntos y 8 rebotes, anotando 11 de sus 12 tiros de 2 y decidiendo el choque al encestar a 38 segundos del final la canasta definitiva, la que puso un ya inalcanzable 85-91 en el luminoso.
La maravillosa defensa céltica y Garnett fueron la clave de la victoria, en la que también participaron Pierce -15 puntos-, Perkins -14 con 13 rebotes- y Rondo -13 con 11 asistencias-. Y es que los titulares del equipo bostoniano fueron una piedra de toque demasiado elevada para estos Heat.
Los Heat estuvieron desastrosos desde el perímetro (2 de 15 triples) y se atascaron ante el poderío defensivo del rival. Wade hizo 27 puntos y 6 asistencias, Beasley sumó 18 unidades y Jermaine O'Neal, 14 con 10 rebotes en un partido en el que Carlos Arroyo apenas apareció (no anotó en 14 minutos de juego y dio 2 asistencias).