Derrick Rose debutaba con Pistons y al final del partido lo tenía muy claro: “Estoy contento de que él esté en mi equipo“. Ese él no era otro que Andre Drummond, y las palabras del base cobraban todo su sentido a tenor de lo que hizo su compañero en el primer partido de la temporada.
Drummond arrasó en la pintura y terminó aniquilando a unos Pacers cuyo gran poder estuvo en la pintura.
El pívot de Pistons sumó 32 puntos, 23 rebotes, 4 tapones y 3 robos tras estar nada menos que 41 minutos en la pista, y por si fuera poco anotó 8 de sus 10 tiros libres. Todo ello para que su equipo ganara a Indiana 110-119 pese a la importante ausencia de Blake Griffin.
Le acompañó a lo grande Luke Kennard, que hizo 30 puntos y 6 triples, mientras que el debutante Rose se fue a 18 tantos y 9 asistencias.
Indiana tuvo el poder cerca del aro con Domantas Sabonis y Myles Turner jugando ya juntos como titulares. El lituano logró 27 puntos y 13 rebotes y el estadounidense añadió 25 tantos y 9 rebotes.
El debutante Malcolm Brogdon, procedente de Bucks, aportó en su primera aparición con Pistons 22 tantos y 11 asistencias.
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