Mala suerte la del joven Donte DiVincenzo, que estaba disfrutando de unos buenos playoffs de su equipo, Milwaukee Bucks, desde la atalaya que le daba su puesto de titular en los esquemas de Budenholzer.
El escolta de los Bucks se lesionó en el segundo cuarto del tercer partido ante Miami (84-113 para Milwaukee). En un principio no parecía nada grave. Su equipo informó en primera instancia que se trataba de una contusión en el pie izquierdo, pero las pruebas médicas revelaron que la lesión era más grave de lo que se pensaba.
La resonancia magnética a la que se sometió el jugador fijó que tiene dañado el ligamento del tobillo izquierdo y esa lesión de aparta de los playoffs de la presente campaña.
El optimismo desplegado por Budenholzer tras el partido se transformó horas después en tristeza y muestras de apoyo al jugador.
DiVincenzo, de 24 años, había promediado en la temporada regular 10,4 puntos, 5,8 rebotes y 3,1 asistencias jugando 66 de los 72 partidos en un equipo puntero como son los Bucks, unas cifras que hablan bien a las claras de su notable progresión.