LeBron James ya tiene físicamente su ansiado anillo, el que le acredita como campeón de la NBA, el que con tanto ahínco persiguió. Jugadores, técnicos y directivos recibieron esa joya tan especial, sinónimo del éxito en su máxima expresión.
Fue en una ceremonia celebrada antes del Miami-Boston. LeBron recibió su caja con el anillo dentro, como la recibieron Chris Bosh, Dwyane Wade, ducho ya en estas lides, o jugadores como Shane Battier, Mike Miller o Udonis Haslem. También jóvenes como Mario Chalmers o Norris Cole o un veterano del calibre de Juwan Howard. Mientras, compañeros como Ray Allen o Rashard Lewis, que acaban de llegar a Heat, miraban la fiesta ajena.
El Comisionado de la NBA, David Stern, pronunció algunas palabras, pero no tuvo su noche. Confundió el huracán Sandy con el Katrina y acabó abucheado por la grada.
Los Heat saltaron a la ceremonia con una indumentaria deportiva diseñada para la ocasión y todo acabó con el clásico "We are the champions" mientras se izaba la bandera de campeones. Unos fuegos de artificio pusieron fin al acto.