Con el draft a la vuelta de la esquina, la mayor parte de las proyecciones publicadas sitúan en el mejor de los casos a Greivis Vásquez en el final de la segunda ronda, pero el venezolano no se muestra preocupado por ello y cree que estará en la NBA porque es donde debe estar.
Lo ha dejado claro en unas declaraciones realizadas a Hoopsworld.com. “Creo que puedo jugar en esta liga porque trabajo extremadamente duro. La gente siempre saca defectos al juego de otros, así que no me preocupa. Estoy aquí para demostrar que se equivocan.”, ha asegurado el venezolano.
Las declaraciones de Vásquez las recoge Luke Byrnes en un artículo en el que, precisamente, hace una encendida defensa del hasta hace poco base de los Terrapins de Maryland y se muestra extrañado de que sean pocos los que parezcan apostar por él.
Para Byrnes, Vásquez presenta unos números de los que muy pocos jugadores en la NCAA pueden presumir. Unos números conseguidos además en el seno de una de las conferencias más duras, sino la más, de la liga universitaria, la ACC, con equipos del nivel de Duke, campeones este año, North Carolina, Florida State, Clemson, Wake Forest o Georgia Tech.
Confiado en sus posibilidades
A Byrnes le parece casi una locura que el venezolano, que fue elegido como el mejor jugador de la ACC y recibió el premio Bob Cousy como mejor base de la NCAA, no sea considerado por nadie una elección de primera ronda, pero Vásquez no parece preocupado por ello, al contrario, y afirma que esos premios le han ayudado a “tener más confianza en mi juego”.
Vásquez cree que tiene juego y capacidad de progreso más que suficiente para hacerse un hueco en la NBA, pese a las críticas sobre él, centradas sobre todo en las dudas sobre su capacidad defensiva, asociadas a la falta de fuerza y explosividad que algunos le achacan, y en la inconsistencia de su tiro.
“Con un poco de suerte puedo llegar a ser un buen jugador en la liga, ya sabes, puede que un base titular. Conozco mi papel. No estoy intentando ser una superestrella. Mi papel es hacer mejores a los que juegan conmigo, no es anotar, pero también puedo jugar en múltiples posiciones.”, asegura un Greivis consciente de sus limitaciones y que dice “no temer a nadie”.
Habrá que ver quién apuesta por el venezolano el próximo 24 de junio, pero de lo que no hay duda es de que calidad, capacidad de liderazgo y mentalidad ganadora le sobran. Lo ha evidenciado a lo largo de una carrera universitaria en la que, como dice Byrnes, “ha demostrado ser uno de los mejores jugadores de la historia de la mejor conferencia del baloncesto universitario”.